Los científicos reiteran su recelo ante el abuso de antibióticos

Con un nuevo llamamiento a la opinión pública mundial y, a la clase médica, en particular, sobre el negativo efecto que está teniendo el abuso de antibióticos, cada vez menos efectivos ante un número creciente de cepas microbianas, fue clausurado ayer el VIII Congreso Nacional de Microbiología, cuyas sesiones venían desarrollándose desde el pasado 28 de septiembre en la facultad de Farmacia, de Madrid.El doctor Fernando Baquero, del servicio de microbiología del centro Ramón y Cajal, de Madrid, reiteró ante la Prensa la declaración redactada recientemente como conclusión de una conferencia int...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Con un nuevo llamamiento a la opinión pública mundial y, a la clase médica, en particular, sobre el negativo efecto que está teniendo el abuso de antibióticos, cada vez menos efectivos ante un número creciente de cepas microbianas, fue clausurado ayer el VIII Congreso Nacional de Microbiología, cuyas sesiones venían desarrollándose desde el pasado 28 de septiembre en la facultad de Farmacia, de Madrid.El doctor Fernando Baquero, del servicio de microbiología del centro Ramón y Cajal, de Madrid, reiteró ante la Prensa la declaración redactada recientemente como conclusión de una conferencia internacional sobre biología molecular de plásmidos celebrada en Santo Domingo, y según la cual «los antibióticos están perdiendo efectividad debido a la diseminación y persistencia de organismos microbianos resistentes a ellos, por lo que, de no corregirse la situación actual, llegará el momento en que los agentes antimicrobianos dejarán de ser útiles para combatir las enfermedades».

La declaración advierte acerca de las consecuencias peligrosas del mal uso de los antibióticos a consumidores, médicos, vendedores fabricantes y dependencias gubernamentales. «Sólo así podemos iniciar el establecimiento de medidas que limiten el uso innecesario y el mal uso de estas drogas», concluye el comunicado.

El congreso, que fue inaugurado el pasado lunes por el rector de la Universidad Complutense de Madrid, Francisco Bustelo, ha sido considerado como el más importante de los celebrados hasta la fecha, y ha contado con la participación de más de 1.200 congresistas de toda España, así como de representantes de otros nueve países más y un numeroso grupo de jóvenes microbiólogos españoles que desarrollan su trabajo en el extranjero, sobre todo en Estados Unidos.

Seiscientas comunicaciones

Casi seiscientas comunicaciones libres, agrupadas en cincuenta especialidades de microbiología, tres simposios principales (virus, bacterias y hongos) y, finalmente, doce mesas redondas, que van desde la enseñanza de la microbiología hasta la antibioterapia y su influencia sobre la ecología microbiano- hospitalaria, pasando por la ingeniería genética, la ecología microbiana o la microbiología de los alimentos, son un claro exponente de la importancia que los científicos le han otorgado a este congreso.

La conferencia inaugural, a cargo del catedrático de Microbiología de la Universidad de Oviedo, Carlos Hardisson, reveló el comportamiento de un tipo de bacterias muy peculiares, las Streptomyces, cuya complejidad estructural y organizativa les confiere un especial interés para el estudio de los mecanismos que regulan los procesos de diferenciación de las células. Carlos Hardisson señaló la existencia de analogías entre el ciclo de desarrollo de los hongos filamentosos (micelio a partir de una espora) y de la Streptomyces, lo que constituye, a su juicio, un notable caso de convergencia evolutiva que podría ayudarnos a comprender por qué, en organismos superiores mucho más complejos que una bacteria, ciertos procesos de diferenciación celular conducen a una desviación de esas funciones, que origina el cáncer.

Un mejor conocimiento del mecanismo de la Streptomyces puede, pues, conducir a un mejor conocimiento de las causas del cáncer, sin olvidar el hecho de que dichas bacterias sintetizan la mayor parte de los antibióticos, así como otros metabolitos que pueden tener enorme importancia desde el punto de vista económico en su utilización agrícola.

Las distintas comunicaciones del simposio sobre virus pusieron de manifiesto diversos avances en la comprensión de los mecanismos moleculares que se producen en el momento de la infección vírica, exponiendo como posibilidad real en un futuro próximo la obtención de una vacuna contra la peste porcina africana, y analizando los distintos mecanismos de acción de los interferones.

Las comunicaciones del simposio sobre bacterias se referían a las bases genéticas y fisiológicas de la resistencia y patogenicidad bacteriana, estudiando diversos casos concretos de este tipo de microbios resistentes a ciertos antibióticos. Por último, el tercer simposio versó acerca de los hongos, exponiendo en once comunicaciones cuáles son las bases de la morfogénesis y patogenicidad de estos organismos.Ingeniería genética

Por lo que respecta a las doce mesas redondas, algunas de ellas presentaban un interés marcadamente sectorial (enseñanza de la microbiología, control de calidad en microbiología, taxonomía bacteriana), otras versaban sobre temas de candente actualidad, como por ejemplo la ingeniería genética o la microbiología de los alimentos, y aún había un tercer grupo con un contenido práctico importante, como por ejemplo el estudio de la patología de las plantas hortícolas en España, la microbiología industrial y la antibioterapia y su influencia sobre la ecología microbiano-hospitalaria.

En el tema de la ingeniería genética quizá cabría destacar la comunicación del doctor Ruiz-Argüeso, de la ETS de Ingenieros Agrónomos de Madrid, sobre las aplicaciones de la ingeniería genética a las plantas cultivadas, con previsible incremento de la productividad de las cosechas, mejora de la calidad obtenida y dotación a las plantas de nuevas capacidades productivas. Por lo que respecta a la microbiología de los alimentos, la comunicación de los doctores Pellón y Gómez, del Instituto Tecnológico de Postgraduados de Madrid, y del Instituto Tecnológico de Massachussets, respectivamente, indicaba que tanto la genética microbiana como las técnicas más sofisticadas de la ingeniería genética contribuirán en breve plazo a la mejora de diversos procesos de producción de alimentos, que además serán cada vez más seguros.

Archivado En