Un premio clásico en las letras españolas

El Premio Nadal, clásico de las letras españolas, cumple este año su 37 a edición. Desde su institución ha servido para consagrar a los autores más destacados y singulares de la novela moderna en prosa castellana. Carmen Laforet, Gironella, Delibes, Luis Romero, Sánchez Ferlosio, Martín Descalzo, Martín Gaite, Matute, Pinilla, Vicente Soto, Sanjuán, Cunqueiro, García Pavón, Fernández Santos, Umbral -entre otros- han sido algunos de sus más significados ganadores.Todas las tendencias, temas y estilos han tenido sitio en el premio de la editorial Destino desde aquella ya lejana fecha de su prim...

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El Premio Nadal, clásico de las letras españolas, cumple este año su 37 a edición. Desde su institución ha servido para consagrar a los autores más destacados y singulares de la novela moderna en prosa castellana. Carmen Laforet, Gironella, Delibes, Luis Romero, Sánchez Ferlosio, Martín Descalzo, Martín Gaite, Matute, Pinilla, Vicente Soto, Sanjuán, Cunqueiro, García Pavón, Fernández Santos, Umbral -entre otros- han sido algunos de sus más significados ganadores.Todas las tendencias, temas y estilos han tenido sitio en el premio de la editorial Destino desde aquella ya lejana fecha de su primera edición, en 1944. El premio surgió como un homenaje póstumo que un grupo de amigos de la redacción de Destino quiso rendir al redactor jefe de este semanario Eugenio Nadal, quien falleció prematuramente antes de cumplir los treinta años, cuando tenía ante sí un prometedor futuro.

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Desde 1968, la misma editorial concede también el premio Josep Pla, que está reservado a obras en prosa de narrativa en catalán, rigurosamente inéditas y sin limitación en el género. Terenci Moix, Baltasar Porcel, Teresa Pamies, Alexandre Cirici, María Manent, Villalonga y Castellet figuran entre sus ganadores. Desde su fundación, había asistido siempre a su entrega el escritor ampurdanés Josep Pla, a quien el premio guarda memoria, que este año se ha visto obligado a romper su costumbre aquejado de una lipotimia sufrida el pasado 31 de diciembre.

La dotación económica de ambos premios asciende a 200.000 pesetas, cifra modesta, pero que se ve ampliamente compensada por el prestigio con que cuentan en el mundo de las letras. El Premio Nadal tiene mucho que ver con el resurgimiento de la literatura española de los últimos años, que en la década de los cuarenta pasaba por uno de los momentos más críticos de su historia. Precisamente, la primera novela ganadora, Nada, de Carmem Laforet, en 1944, constituyó uno de los hitos de la novela española de la posguerra y sirvió para consagrar a una autora joven con su primera obra. A aquella primera edición concurrieron veintiséis obras y su dotación en metálico ascendió a 5.000 pesetas.

El Nadal es quizá el premio literario de mayor concurrencia femenina: seis mujeres lo han conquistado y dos han quedado finalistas. Entre los ganadores del premio figuran también tres autores hispanoamericanos: Manuel Mejía Vallejo, Eduardo Caballero Calderón y Luis Gasulla. Pueden optar al Nadal todas las obras inéditas en lengua castellana con una extensión no inferior a doscientos folios.

Los cinco primeros años, el Nadal se concedió en el viejo Café Suizo de la Ciudad Condal. En 1949 se cerró el establecimiento y el premio se trasladó al restaurante Glazier, situado también en las Ramblas, y ya desaparecido igualmente. De aquí se pasaría más tarde al hotel Oriente y, en 1958, se daba el salto definitivo, por cuestión de espacio, al hotel Ritz.

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