Control policial en la conmemoración chilena de la muerte de Neruda

Una fuerte vigilancia policial fue dispuesta el pasado día 23, por las autoridades, en la tumba del poeta Pablo Neruda, al cumplirse el séptimo aniversario de su fallecimiento. La policía uniformada exigió identificarse a cada persona que acudió a rendir homenaje al premio Nobel de Literatura. Su viuda, Matilde Urrutia, calificó la acción como «una vergüenza, un acto de incultura».Desde tempranas horas, centenares de personas, incluidos intelectuales, artistas, poetas, trabajadores y estudiantes, concurrieron al cementerio general para rendir homenaje al escritor. En el interior del camposanto...

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Una fuerte vigilancia policial fue dispuesta el pasado día 23, por las autoridades, en la tumba del poeta Pablo Neruda, al cumplirse el séptimo aniversario de su fallecimiento. La policía uniformada exigió identificarse a cada persona que acudió a rendir homenaje al premio Nobel de Literatura. Su viuda, Matilde Urrutia, calificó la acción como «una vergüenza, un acto de incultura».Desde tempranas horas, centenares de personas, incluidos intelectuales, artistas, poetas, trabajadores y estudiantes, concurrieron al cementerio general para rendir homenaje al escritor. En el interior del camposanto, piquetes policiales procedieron a identificar a los concurrentes, obligándoles a permanecer sólo un minuto.

La viuda de Neruda lamentó la actitud oficial, señalando que, por primera vez, se habían adoptado dichas restricciones.

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