Publicación de "Caminos y viajeros de Asturias"

El Instituto de Estudios Asturianos (IDEA) ha puesto a la venta el libro Caminos y viajeros de Asturias, de Jesús Evaristo Casariego, editado por la empresa de transportes de viajeros Autobuses Luarca, SA (ALSA). De la primera edición de este libro se tiraron quinientos ejemplares en 1973, con motivo del cincuentenario de la fundación de dicha empresa, que acaba de donar una reedición al IDEA, en respuesta al llamamiento de ayuda hecho por el presidente de esta institución cultural, el señor Casariego. El libro relata sucedidos y anécdotas viajeras curiosas, así como la evolución de los...

El Instituto de Estudios Asturianos (IDEA) ha puesto a la venta el libro Caminos y viajeros de Asturias, de Jesús Evaristo Casariego, editado por la empresa de transportes de viajeros Autobuses Luarca, SA (ALSA). De la primera edición de este libro se tiraron quinientos ejemplares en 1973, con motivo del cincuentenario de la fundación de dicha empresa, que acaba de donar una reedición al IDEA, en respuesta al llamamiento de ayuda hecho por el presidente de esta institución cultural, el señor Casariego. El libro relata sucedidos y anécdotas viajeras curiosas, así como la evolución de los transportes y de la legislación.El primer viaje en automóvil de Oviedo a Luarca se realizó en 1896, y el primer accidente automovilístico ocurrido en Asturias fue en el mes de octubre de 1903.

El último gran viaje que se realizó en Europa en silla de posta fue el realizado en junio de 1895 por el noble portugués conde Fantalva, que atravesó toda Asturias en su viaje de Lisboa a París, invirtiendo desde Luarca a la capítal de Francia 82 días. La Voz de Luarca saludó así el paso del conde: «Llamó la atención de muchas personas un hermoso carruaje de forma especial que, arrastrado por seis arrogantes mulas con elegantes aparejos, entró en esta villa por la carretera de Galicia... El mencionado señor conde se llama don Alfredo Ferreiro de los Angeles y es persona instruida y de amable trato. Parece que es soltero y su aspecto es como de tener treinta años. Aplaudimos su modo de vivir y su modo de viajar, para que sus excursiones le sean de provecho, ya que tiene el gusto de ver detenidamente los sitios y poblaciones por donde pasa.»

El conde Fantalva fue quien, al parecer, inspiró a Era de Queiroz el personaje de Jacinto, el potentado portugués residente en París de la novela A cidade e as serras.