El "Misterio de Elche" no se representará en el Festival de Teatro de Nancy

El patronato se opone a su salida al extranjero

Tras una polémica que ha durado varios meses, la junta gestora del patronato del Misterio de Elche ha acordado que esta representación sacro-lírica, con más de setecientos años de antigüedad, no acuda al Festival Mundial de Teatro de Nancy, a celebrar en esta ciudad francesa del 12 al 25 de diciembre.

En sus setecientos años de vida, el Misteri asuncionista ilicitano se ha representado todos los años, con escasas interrupciones, en el interior de la basílica de Santa María de Elche, en los días 14 y 15 de agosto, con ocasión de las fiestas mayores de esta ciudad. Este año surgió la ...

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Tras una polémica que ha durado varios meses, la junta gestora del patronato del Misterio de Elche ha acordado que esta representación sacro-lírica, con más de setecientos años de antigüedad, no acuda al Festival Mundial de Teatro de Nancy, a celebrar en esta ciudad francesa del 12 al 25 de diciembre.

En sus setecientos años de vida, el Misteri asuncionista ilicitano se ha representado todos los años, con escasas interrupciones, en el interior de la basílica de Santa María de Elche, en los días 14 y 15 de agosto, con ocasión de las fiestas mayores de esta ciudad. Este año surgió la posibilidad de que por primera vez en su historia el Misteri abandonara su marco habitual para ser representado en el exterior, cuando el director del festival mundial de teatro de Nancy visitó Elche solicitando la participación y escenificación de este drama en la ciudad, francesa durante su festival de teatro. De esta forma, el Misteri podría ser admirado y contemplado por destacados especialistas que todos los años se dan cita en aquella ciudad.Al conocerse la invitación, surgieron las primeras controversias en torno al tema por parte de aquellos que se negaban a su salida al exterior por temor a que no se mantuviera la pureza de la representación o no se dieran las circunstancias idóneas para la misma. Argumentaban que nunca el Misteri había sido representado fuera de Elche y, por tanto, no debía salir, cualquiera que fuera la causa que lo justificara. Sometido el tema a votación en la junta gestora del patronato, resultó un empate que el, alcalde socialista, en su calidad de presidente neto, no resolvió, optando porque la decisión última la tomase el Ministerio de Cultura, habida cuenta que el Misteri es monumento nacional desde 1931.

Las presiones por parte de algunos sectores ilicitanos se dirigieron entonces hacia el Ministerio de Cultura, a donde enviaron cartas y telegramas para que no dieran el permiso de representación en Nancy. En el mismo sentido llegaron a enviarse cartas al Papa, en un intento de lograr que la jerarquía eclesiástica interviniera en el tema.

Entre tanto, los rectores del Festival de Nancy habían dado todo tipo de garantías de que no se adulterarían las representaciones y se facilitarían todo tipo de obras para que el Misteri fuera representado igual que en la basílica ilicitana. En este sentido, estaba previsto que un equipo de técnicos de Elche se trasladase antes a Nancy para confirmar que todo el montaje y organización estaba tal como se había garantizado. Para el desplazamiento, los rectores del festival de teatro iban a pagar la cantidad estipulada previamente por el patronato del Misteri. Tal era el interés en aquella ciudad porque pudiera representarse el drama asuncionista.

Pero el Ministerio de Cultura tampoco decidió, y en una visita a Elche del subdirector general de Teatro para entrevistarse con los miembros de la gestora, señaló que esta era una decisión que sólo correspondía tomar a los ilicitanos. Agotados prácticamente los plazos para tomar una decisión, y ante la proximidad de la celebración del festival de teatro, volvió a reunirse la gestora para tomar una determinación. Mientras esta reunión se llevaba a cabo, unas cien personas se concentraron ante la ermita de San Sebastián, donde estaba reunida la gestora, para expresar su opinión contraria a la salida al exterior del Misteri. Los gritos de «a Nancy, no» se mezclaban con los cantos del himno de la virgen, con canciones en las que se señalaba que «la virgen de la Asunción dice que no quiere ser francesa» y con solicitudes de dimisión para miembros de la gestora.

Para el presidente de la junta local gestora, «aquello fue un grupo de señoras muy bien orquestadas por algún experto director de este tipo de actuaciones. Pero sus gritos no influyeron en absoluto en la decisión tomada por la gestora».

El presidente, en principio partidario de la representación en Nancy, lamenta «la oportunidad que hemos perdido, por la repercusión que estas representaciones hubieran tenido. Hay que pensar que se trataba de una embajada cultural de Elche en un país extranjero, en un festival admirado por todo el mundo y, sobre todo por especialistas, que hubiera supuesto un lanzamiento del Misteri a nivel mundial. Por otra parte, hay que pensar la satisfacción que esto hubiera representado para los actores, que no son profesionales y nunca han cobrado nada, de que se hubiera reconocido a nivel mundial su valor. Mi opinión personal en estos momentos es de pena, de pensar que hemos perdido una oportunidad única de darnos a conocer en el exterior, en un ambiente como éste».

«Detrás de todas esas manifestaciones en favor del no sólo hay un pretexto político. Nunca se han preocupado del Misteri. El otro Ayuntamiento quemó la coral ilicitana, que era una cuna de cantores. Han dejado que la ermita de san Sebastián, de tanta importancia en la vida del Misteri, sea una auténtica ruina. Y ahora se preocupan de que el Misteri pueda perder su pureza y tradición porque se represente en el extranjero.»

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