Defensa del entorno urbano de una iglesia de Valladolid

Pintores, poetas, grupos folklóricos y varios centenares de ciudadanos rindieron homenaje a la iglesia de La Antigua de Valladolid, un monumento que puede perder su actual fisonomía si se llevan a cabo los edificios proyectados alrededor de su entorno. Edificios que cerrarían la perspectiva actual del templo y dejarían a la iglesia románica encajonada entre bloques de hormigón.El homenaje a La Antigua fue organizado por el grupo ecologista de Valladolid, y en su realización han colaborado nurmerosos partidos políticos centrales sindicales y entidades ciudadanas.

Desde las seis de la tar...

Pintores, poetas, grupos folklóricos y varios centenares de ciudadanos rindieron homenaje a la iglesia de La Antigua de Valladolid, un monumento que puede perder su actual fisonomía si se llevan a cabo los edificios proyectados alrededor de su entorno. Edificios que cerrarían la perspectiva actual del templo y dejarían a la iglesia románica encajonada entre bloques de hormigón.El homenaje a La Antigua fue organizado por el grupo ecologista de Valladolid, y en su realización han colaborado nurmerosos partidos políticos centrales sindicales y entidades ciudadanas.

Desde las seis de la tarde espectadores y artistas se concentraron en las cercanías del templo. Allí, pintores y escultores plasmaron en sus trabajos diversas perspectivas de la Iglesia mientras los visitantes adquirían las obras y escuchaban las intervenciones de cantantes y grupos folklóricos castellanos que interpretaron temas relativos a la situación del movimiento. Varias decenas de niños participaron en el concurso de pintura infantil, que tenía como tema único el estado de la iglesla de La Antigua y del resto de los monumentos vallisoletanos en peligro de desaparición.

La pérdida del entorno urbanístico de La Antigua, uno de los monumentos más característicos de Valladolid ha suscitado numerosas protestas en los últimos tiempos. Hace un mes, un grupo de ecologistas celebró con crespones negros ataudes y atavíos de luto incluidos,un simbólico entierro del monumento, a través de las calles céntricas de la ciudad. Tras ser disueltos por la policía, el grupo se corcentró ante la iglesia y humorísticamente invocó la presencia del robot Mazinger Z para que destruyera los bloques de viviendas que van a cerrar la perspectiva del monumento.