Denuncian el estado de los fondos del Museo de Bellas Artes de Zaragoza

La Asociación de Defensa Ecológica y del Patrimonio Histórico-Artístico (Adelpha), denuncia al Ministerio de Cultura lo que a juicio de la mencionada asociación es calificado de «lamentable estado de los fondos pictóricos del Museo Provincial de Bellas Artes y Arqueología de Zaragoza de resultas de una serie de restauraciones destructivas. Los repintes, las excesivas o desiguales limpiezas -añade la nota-, los levantamientos arriesgados de capas pictóricas, etcétera, han dado al traste con buena parte del valor artístico de las tablas y cuadros de este museo».A continuación la nota pública de ...

La Asociación de Defensa Ecológica y del Patrimonio Histórico-Artístico (Adelpha), denuncia al Ministerio de Cultura lo que a juicio de la mencionada asociación es calificado de «lamentable estado de los fondos pictóricos del Museo Provincial de Bellas Artes y Arqueología de Zaragoza de resultas de una serie de restauraciones destructivas. Los repintes, las excesivas o desiguales limpiezas -añade la nota-, los levantamientos arriesgados de capas pictóricas, etcétera, han dado al traste con buena parte del valor artístico de las tablas y cuadros de este museo».A continuación la nota pública de Adelpha señala una serie de cuadros «víctimas de restauración destructiva»: en la sala 13, el retablo del Santo Sepulcro, de Jaume Serra, con múltiples repintes. En la sala 14, el Juicio final. Jesús ante Pilatos de Miguel Ximénez y Martín Bernat. En la sala 15, San Martín, de Miguel Ximénez retablo de San Agustín y San Onofre; predela del retablo de los santos Miguel, Fabián y Sebastián, con limpieza muy desigual, dejando zonas totalmente sucias. En la sala 16, El Salvador, de Luis de Morales el Divino, con escandalosos repintes; Virgen con Niño, atribuida a Lucas de Leyden. En la sala 17, Virgen con Niño, lienzo anónimo, y en la sala 18, Virgen con Niño, de Pedro Atanasio Bocanegra.

«Se trata, pues -concluye el comunicado- de obras de positivo interés para el arte aragonés y también de otras escuelas que han sido objeto de un trato peor que el abandono, pues éste, al menos, aún permite la restauración científica en su día. Adelpha se dirige al Ministerio de Cultura en ruego de que se revisen las anteriores restauraciones y se encomienden las próximas a especialistas solventes.