Pleno del Senado

Resulta imposible conocer la cuantía de la evasión de capitales

Doscientos veinte millones de pesetas aprehendidos en 1976; 340, en 1977, y quinientos millones repatriados como consecuencia del indulto general de 14 de marzo pasado fueron las cifras aportadas por el ministro de Comercio, Juan Antonio García Díez, en su respuesta a la interpelación sobre la evasión de capitales presentada por el senador señor Ferrer, de Entesa dels Catalans, en el Pleno del Senado de ayer. En cualquier caso, no resulta posible conocer la cuantía de la evasión.El ministro de Comercio, quien ilustró a los senadores sobre las diversas formas existentes de evasión de cap...

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Doscientos veinte millones de pesetas aprehendidos en 1976; 340, en 1977, y quinientos millones repatriados como consecuencia del indulto general de 14 de marzo pasado fueron las cifras aportadas por el ministro de Comercio, Juan Antonio García Díez, en su respuesta a la interpelación sobre la evasión de capitales presentada por el senador señor Ferrer, de Entesa dels Catalans, en el Pleno del Senado de ayer. En cualquier caso, no resulta posible conocer la cuantía de la evasión.El ministro de Comercio, quien ilustró a los senadores sobre las diversas formas existentes de evasión de capitales, anunció que está en preparación una nueva ley de control de cambio, que será presentada a las Cámaras en la primavera próxima, aunque indicó que la principal arma contra la evasión es reforzar la confianza en el actual proceso político español, tarea que no sólo corresponde al Gobierno, sino a todos los grupos políticos. El señor García Díez, quien afirmó que la evasión de capitales es posible. porque en España existe el control de cambio de moneda, declaró que era prácticamente imposible, por la, propia naturaleza de los hechos y de los medios empleados, aportar cifras sobre el capital evadido.

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El ministro de Comercio anunció que existen diversos medios para actuar contra las distintas formas de evasión de capitales (desde los movimientos ilegales de pagos por mercancías y servicios, hasta la adquisición ilegal por residentes españoles de activos en el extranjero), entre ellos desalentar el pago ilegal mediante la clara contabilidad que exige a las empresas la anunciada reforma fiscal; llevar la peseta a su valor real, y potenciar los medios existentes para la investigación y represión de la evasión, fundamentalmente dos brigadas especiales dependientes del Banco de España, y del Juzgado Central de Instrucción número tres de la Audiencia Nacional, competente actualmente en los delitos monetarios. Sobre el traslado de estos delitos a la jurisdicción ordinaria, el ministro declaró que no sólo se ha buscado con ello la eficacia, sino también restablecer el principio de unidad jurisdiccional propio del Estado de Derecho.

La interpelación al Gobierno sobre la evasión de capitales del senador señor Ferrer, a la que respondió el ministro de Comercio, contenía diversas preguntas sobre la cantidad del capital expatriado en los últimos tres años y sobre las medidas adoptadas por el Gobierno para evitar su expatriación. El señor Ferrer expuso, con citas de la Gaudium et Spes y de la Populorum Progressio y con referencias al marxismo, que todos los grupos ideológicos representados en el Senado estarían de acuerdo con toda seguridad en que no debe existir un dominio absoluto sobre el capital, es decir, que sus poseedores no pueden hacer con él lo que quieran. El senador de Entesa dels Catalans no dudó en calificar de «especuladores» a los que evaden en las actuales circunstancias capitales al extranjero y a sus prácticas de terrorismo blanco.

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