Encuentran en Pompeya la tumba de un antiguo prefecto de la Hispania romana

Durante las restauraciones de la nueva biblioteca del sitio arqueológico apareció la sepultura de Numerius Agrestinus, soldado de Augusto en las guerras cántabras

La tumba del antiguo prefecto de la Hispania romana encontrado en las obras de la nueva biblioteca de Pompeya.silvia vacca

La tumba de Numerius Agrestinus, prefecto de la Hispania romana y soldado del emperador Augusto durante las guerras Cántabras (29-19 a.C.), fue hallada en Pompeya durante las obras de restauración que se realizan en el edificio San Paolino, nueva sede de la biblioteca del Parque Arqueológico de Pompeya. La inscripción en la sepultura detalla que Agrestinus fue militar, duumvir (titular de la más alta magistratura en la antigua Roma) y prefecto de los autrigones. Esta era una tribu celtíbera del norte de la península ibérica que fue dominada e integrada al Imperio Romano; de ahí el gesto de los altos cargos públicos de dedicarle un sepulcro en suelo público de Pompeya en el siglo I, unas décadas antes de la erupción.

“Es una demostración de la red de poder que conectaba a las élites del imperio, a cuyos miembros se les pedía que se comprometieran en zonas de conflicto, con la promesa de recompensas económicas pero sobre todo de prestigio social en la comunidad de residencia”, explica en una nota de prensa el director del Parque Arqueológico de Pompeya, Gabriel Zuchtriegel. La excavación ya llegó a los dos extremos de la tumba, que tiene forma de semicírculo y se remonta a un tipo de sepultura conocida en Pompeya: la schola, que consiste en un hemiciclo de toba, decorado en los extremos con patas de león.

El mismo Agrestinus aparece en otra inscripción funeraria de Pompeya, en la necrópolis de Porta Nocera. Se trata de un monumento cilíndrico creado por su esposa, Veia Barchilla, para ella y su marido, una edificación anterior a la tumba recientemente encontrada, con el que el consejo de decuriones decidió honrar al político y militar. El epígrafe cuenta que él eligió las tierras pompeyanas como su “buen retiro”. “Se trata de un cargo hasta ahora no atestiguado que ayuda, en el plano histórico, a comprender mejor la organización del poder romano en una fase de transición hacia el modelo imperial”, comenta Zuchtriegel.

Trabajos de excavación sobre la tumba, de la que se pueden leer algunas inscripciones.ANNASILVIAVACCA

“Con este descubrimiento el yacimiento de Pompeya se confirma como un lugar de primera importancia para ampliar nuestros conocimientos y comprender mejor la sociedad de la época. Por eso quería que en la última Ley de Presupuestos hubiera recursos para una campaña nacional de ampliación de las excavaciones en varios parques arqueológicos. En Pompeya, en particular, hay en estos momentos varias excavaciones como nunca antes en las últimas décadas”, afirma el ministro de Cultura italiano, Gennaro Sangiuliano. Mencionó especialmente las excavaciones de Civita Giuliana, zona arrebatada de la “actividad ilegal de los saqueadores de tumbas y recuperada gracias a un acuerdo entre el Parque Arqueológico de Pompeya y la Fiscalía de Torre Annunziata”.

Haber ocupado dos veces el cargo de duumvir y ser honrado con un monumento funerario en suelo público son expresiones de reconocimiento y lealtad, asegura Sangiuliano. Los gestores musealizarán el monumento con un contexto sobre el personaje y su importancia en la serie de conflictos bélicos que tuvieron lugar entre el Imperio Romano y las tribus cántabras y astures en la región del norte de Hispania.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Más información

Archivado En