Alec Baldwin es formalmente acusado de homicidio accidental en Nuevo México
La Fiscalía de Santa Fe indica que el protagonista y la encargada de la armería usaron las armas de fuego de manera negligente y temeraria
Alec Baldwin ha sido oficialmente acusado de homicidio accidental. Tal y como estaba previsto, la Fiscalía de Santa Fe (Nuevo México) ha presentado este martes la acusación formal por la muerte de la fotógrafa Halyna Hutchins en el rodaje del wéstern Rust, ocurrida en octubre de 2021. La fiscal de distrito, Mary Carmack-Altwies, ha presentado los cargos en contra del productor y protagonista de la cinta, a quien acusa de no seguir las medidas de seguridad en el uso del arma de fuego que disparó por accidente una bala que mató a la cineasta e hirió al director de la cinta. La encargada de la armería de la producción, Hanna Gutierrez-Reed, también enfrentará cargos que podrían llevarla a prisión por un año y medio.
La Fiscalía ya había adelantado a mediados de enero que afinaba los últimos detalles de su caso y que este sería presentado ante los tribunales a finales de este mes. En una conferencia, Carmack-Altwies y la fiscal especial, Andrea Reeb, subrayaron el empleo “temerario” y “peligroso” que algunos integrantes de la producción dieron al arma de fuego, una Colt .45, que Baldwin empuñó mientras ensayaba una escena de la cinta independiente. Tan solo la presencia de una bala de verdad es una violación flagrante a los protocolos de seguridad de la industria cinematográfica. En el rodaje fueron encontradas al menos cinco.
“Tan solo el día del incidente, la evidencia muestra que ocurrieron al menos una docena de actos, omisiones o descuidos, en un corto periodo transcurrido entre la comida y la hora del disparo. Y esto no incluye el uso temerario del arma por parte de Baldwin”, señala la Fiscalía en la presentación de la demanda contra el protagonista de 30 Rock.
El documento, que se basa en un informe de más de 500 páginas elaborado por la policía, asegura que Baldwin recibió un entrenamiento “muy limitado” en la utilización de armas de fuego. El accidente ocurrió cuando el actor ensayaba un movimiento donde desenfundaba la pistola y apuntaba a la cámara. De la hora que Baldwin debía dedicar para familiarizarse con el revólver, el hoy acusado dedicó tan solo media hora. “Baldwin estaba distraído y hablando por teléfono móvil a su familia durante el entrenamiento”, señala la fiscal, quien se basa en declaraciones juradas de miembros de la producción, entre ellos Gutierrez-Reed.
“La evidencia muestra que Baldwin pidió y recibió el entrenamiento en el plató del rodaje”, señala la Fiscalía en otro momento de la acusación. Los abogados argumentan que este tipo de entrenamiento no corresponde con los estándares de la industria, que exigen que esta preparación se haga con tiempo y en un lugar acondicionado para el empleo de armas. “Esta temeraria desviación de los estándares conocidos, prácticas y protocolos, causaron directamente el disparo”, añaden.
“Si estas personas hubieran hecho su trabajo, Halyna Hutchins estaría con vida hoy. Es así de simple”, dijo Reeb a mediados de septiembre. Baldwin y Gutierrez-Reed, de ser hallados culpables, podrían enfrentar penas de prisión y una multa económica. David Halls, el asistente de dirección, la última persona de la producción que debe revisar un arma de fuego en un rodaje antes de dársela al talento, ya se ha declarado culpable. Con esto evitará ir a un juicio. También ha anunciado que cooperará con las autoridades y la fiscal de distrito.
El abogado defensor de Baldwin, Luke Nikas, repudió la presentación de los cargos. “Mi cliente no tenía ninguna razón para pensar que había una bala de verdad en el arma o en el set. Confió en los profesionales con los que trabajaba, quienes le aseguraron que no había munición en la pistola”, dijo el letrado en comunicado hecho público hace algunos días. El representante legal de Gutierrez-Reed considera deficiente la investigación de las autoridades y ha dicho que utilizará el juicio para “exponer la verdad” de lo que ocurrió aquel día.
Alec Baldwin dijo en su primera entrevista tras el incidente que nunca apretó el gatillo y que se limitó a echar hacia atrás el martillo del arma. Sin embargo, una investigación del FBI confirmó lo contrario y determinó que el revólver sí se accionó: esto provocó la detonación.
En casi 15 meses transcurridos desde el incidente, se han presentado varias demandas. La familia de Hutchins denunció a Baldwin por homicidio imprudente, pero el actor llegó a un acuerdo con el viudo, Matthew Hutchins, para que este desistiera del litigio. A cambio, Baldwin nombró a Hutchins productor ejecutivo de Rust, con lo que recibirá una parte de los beneficios, que no ha sido revelada, una vez que se reanude el rodaje del wéstern. Aún no hay fecha para que esto suceda, pero se estima que el juicio hará aún más complicado que se retome la filmación.