‘Antes de que lleguen las nubes’: una novela negra nórdica con flamenco y ‘pescaíto’ frito
La autora de ‘best-seller’ sueca Mari Jungstedt publica en español la primera obra de esta serie que se desarrolla en la Costa del Sol y tiene como protagonista al inspector Héctor Correa
Alejada de los clásicos ambientes gélidos, oscuros y solitarios de la novela negra escandinava, Antes de que lleguen las nubes (Maeva) es una historia con un contexto inusual. La periodista sueca Mari Jungstedt (Estocolomo, 1962) ha trasladado a sus personajes a un entorno donde no hay nieve, pero sí clases de flamenco, pescaíto frito y pueblos blancos. La autora de best sellers ha dejado atrás la fría isla de Gotland, al sureste de Suecia, donde se desarrollan hasta 16 de ...
Alejada de los clásicos ambientes gélidos, oscuros y solitarios de la novela negra escandinava, Antes de que lleguen las nubes (Maeva) es una historia con un contexto inusual. La periodista sueca Mari Jungstedt (Estocolomo, 1962) ha trasladado a sus personajes a un entorno donde no hay nieve, pero sí clases de flamenco, pescaíto frito y pueblos blancos. La autora de best sellers ha dejado atrás la fría isla de Gotland, al sureste de Suecia, donde se desarrollan hasta 16 de sus trabajos anteriores para que sus nuevos protagonistas saboreen la playa malagueña y el sol andaluz. “Es que esta zona me gusta muchísimo”, explica sonriente Jungstedt, que ha vendido más de 6,5 millones de ejemplares de sus libros, traducidos a 20 idiomas, y que este lunes llegó a Málaga para promocionar la publicación en castellano de la obra. Es la primera de una serie que espera alargar tanto como la de Gotland, que le ha convertido en una de las autoras más vendida en su país.
Igual que el inspector Kurt Wallander —protagonista de las novelas de Heninng Mankell— desarrolla sus investigaciones en la ciudad sueca de Ystad y Harry Hole —comisario de obras como Petirrojo, de Jo Nesbø— lo hace en Oslo, el policía Héctor Correa trabaja en la Costa del Sol. Es el agente que lleva las riendas de un relato que arranca al puro estilo clásico del thriller nórdico: un asesinato. Ocurre en el Tajo de Ronda, gran símbolo de esta ciudad malagueña, pero a partir de ahí el texto viaja por la geografía local. Lo hace a Marbella o a la pequeña localidad de Benagalbón, a poco más de 20 kilómetros del centro de Málaga y donde la traductora Lisa Hagel busca rehacer su vida. El relato guarda también un amplio hueco para la barriada de El Palo, al este de la capital. Y visita restaurantes como La Candelaria, El Tintero, Canta el Gallo o Bardal, dirigido por el chef Benito Gómez.
Más allá de su ambientación malagueña, la estructura de la obra y sus intrigas son las clásicas del thriller nórdico. Eso sí, Antes de que lleguen las nubes (publicado en Suecia en 2020) llama la atención por su brevedad —287 páginas— y por unos personajes cotidianos, alejados de algunos de los estereotipos del género. Es el caso del investigador de homicidios Héctor Correa, con familia, optimista y que ha vivido ya su gran amor. “Me gusta utilizar personas más o menos normales en las que el lector pueda sentirse reflejado”, subraya la escritora. Igual ocurre a Lisa Hagel, quien quiere abrirse hueco laboral como traductora y, casi sin quererlo, consigue ayudar al policía en su trabajo. Ambos en la madurez, comparten una sensación de soledad y ausencia de amor, pero miran al futuro con cierta ilusión después de conocerse en unas clases de baile en el Museo del Flamenco. Allí firmaba libros Jungstedt este martes tras una sesión fotográfica.
La trama se aleja de grandes temas sociales habituales del nordic noir como la inmigración o la violencia contra la mujer, pero a cambio relata un oscuro capítulo de la España franquista, que le sirve de telón de fondo y la autora prefiere no desvelar a los lectores. “Es un tema presente en todos mis libros: cómo lo que te ocurre en la niñez te marca luego como adulto. Es la verdadera razón por la que escribo novela negra”, subraya Jungstedt, para quien el contexto español de su historia ha supuesto “un gran desafío”. “Soy alguien de Estocolmo escribiendo sobre el sur de España, pero también era alguien de fuera cuando escribía sobre la isla de Gotland. Al final la clave es hacer muy bien la investigación antes de escribir”, relata la autora en un dignísimo español que estudió de joven y mejoró durante sus años de guía turística antes de trabajar durante 14 años en la televisión y la radio pública sueca.
Desde que en 2003 publicara su primer libro, del que vendió 5.000 ejemplares, Jungstedt se ha convertido en una best-seller en su país. Tras publicar varias de sus novelas en español, su primer intento de acercamiento al país lo hizo en 2015 con la publicación de Mar de nubes. Residía entonces en Arguineguín (Gran Canaria), donde situó la novela escrita junto al noruego Ruben Eliassen, con el que compartía entonces su vida. La relación se rompió y, aunque llegó a publicar un segundo libro de su serie canaria, se dio cuenta de que prefería cambiar de tercio. “Algo que fuese original mío al cien por cien”, recalca. Eligió Málaga por pura afinidad, porque apenas conocía la provincia. Y en 2019, con un mapa y un coche, comenzó a seleccionar localizaciones. Viajó por los pueblos de montaña y caminó por la ciudad cerca del mar. “Me gusta conocer bien los sitios, sus colores, sus sonidos. La historia es lo más importante en una novela negra, pero los personajes y ese ambiente son también importantes para enganchar al lector”, señala.
Antes de que lleguen las nubes es de lectura fluida y predispone para un atracón. No hay descanso en las peripecias de Héctor Correa y Lisa Hagel, ni en su tímida amistad camino de otra cosa, ni en su búsqueda del misterioso asesino, pero este no será el último caso juntos. Jungstedt presenta en España este libro apenas tres semanas después de hacer lo propio en su país con el segundo volumen ambientado en tierras malagueñas. Se titula Andra sidan månen (En el otro lado de la luna, sin fecha aún de publicación en España) y supone el número 20 en 20 años para la autora sueca, que ahora pretende alternar la publicación de un libro de la serie de Gotlam con otro de la serie de Málaga. Ambas han funcionado bien en Suecia, pero la escritora abre los ojos ante la expectación de cómo acogerá el público español a Correa y Hagel. “No tengo ni la menor idea”, apunta divertida. Ahora toca a los lectores escribir esa historia.