China presenta un plan para aumentar la natalidad ante la bajada histórica de nacimientos
El Gobierno pide a las autoridades locales que presenten paquetes completos de medidas fiscales, educativas, de vivienda y empleo
El Gobierno chino continúa ideando formas de animar a la población a tener más hijos. Los medios de comunicación estatales publicaron el martes un plan de medidas gubernamentales con el que Pekín aspira a elevar la baja tasa de natalidad del país, que el año pasado cayó a un mínimo histórico. Aunque China permite desde mayo de 2021 tener hasta tres hijos, la nación más poblada del planeta se enfrenta a ...
El Gobierno chino continúa ideando formas de animar a la población a tener más hijos. Los medios de comunicación estatales publicaron el martes un plan de medidas gubernamentales con el que Pekín aspira a elevar la baja tasa de natalidad del país, que el año pasado cayó a un mínimo histórico. Aunque China permite desde mayo de 2021 tener hasta tres hijos, la nación más poblada del planeta se enfrenta a una grave crisis demográfica, con expertos augurando que experimentará un crecimiento negativo antes de 2025. Con el fin de revertir esta tendencia, 17 departamentos gubernamentales emitieron conjuntamente un documento en el que se proponen nuevas políticas preferenciales de acceso a la vivienda, mayor flexibilidad laboral o ayudas fiscales y a la educación con el objetivo de “crear un entorno favorable al matrimonio y la fertilidad”. La implementación de estas directrices, que en su mayoría son una enumeración de promesas en la que no se especifican requisitos concretos, dependerá de los gobiernos locales.
Un total de 17 ministerios del Consejo de Estado (Ejecutivo chino) presentaron conjuntamente en julio una nueva hoja de ruta para apoyar el matrimonio y facilitar que las parejas tengan hasta tres hijos. El documento, hecho público el martes por los medios estatales, pide a los gobiernos locales que presenten un paquete completo de medidas de apoyo –que incluyen campos como los impuestos, seguros, educación, vivienda y empleo– para fomentar la natalidad.
Analistas citados por el diario Global Times, propiedad del Partido Comunista y de corte nacionalista, señalan que no es común que tantos gabinetes publiquen un plan de estas características, “lo que pone de manifiesto la gravedad del ritmo de crecimiento de la población china”. Cifras oficiales muestran que en 2020 la población total del país aumentó en 480.000 personas, la tasa de crecimiento más baja de las últimas seis décadas. Al menos 11 de las 31 regiones y provincias chinas experimentaron ya el año pasado un crecimiento negativo de la población, sobre todo en el noreste, noroeste y centro de la nación.
Uno de los objetivos que marca el documento es reducir el número de abortos que no se deban a una “necesidad médica”. En septiembre del año pasado, el Consejo de Estado ya se marcó la meta de reducir el número de interrupciones del embarazo que no se realizan por cuestiones de salud, aunque, al igual que ahora, no se han ofrecido más detalles al respecto. El texto se limita a recomendar mejorar los servicios de atención médica prenatales y posnatales y optimizar la salud reproductiva de las mujeres. Asimismo, aconseja desarrollar más proyectos para el alivio del dolor del parto y la mejora de la prevención y el tratamiento de la infertilidad en hombres y mujeres.
Entre los incentivos para convencer de traer más niños al mundo figuran políticas de ayuda a la vivienda y beneficios fiscales. Según informa la cadena estatal CGTN, las autoridades podrán ofrecer más casas subvencionadas para jóvenes que residen en núcleos urbanos y dar prioridad de acceso a los matrimonios con hijos menores de edad. Además, aquellas parejas con más de un hijo y que no sean propietarios podrán retirar para el alquiler un porcentaje mayor del dinero acumulado en el Fondo de Vivienda de la Seguridad Social ―trabajadores y empleadores chinos están obligados a pagar parte de los impuestos mensuales a un fondo diseñado para la compra de una futura casa―. Además, se ofrecerán exenciones fiscales a las parejas que tengan hijos menores de tres años, que se suman a las existentes para quienes tienen descendientes en edad escolar.
El documento también aborda el cuidado de los niños. Se fomentará la flexibilidad horaria en el entorno laboral y la posibilidad de trabajar desde casa para los empleados con hijos. Además, se pide una mejora de las bajas y los seguros de maternidad, y se anima a los empresarios a ayudar a su personal con el pago de guarderías y a incluir en los contratos estipendios relacionados con la crianza. En una rueda de prensa celebrada el miércoles, Hao Fuqing, subdirector del departamento de desarrollo social de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, enfatizó que la falta de guarderías públicas en las ciudades es una de las trabas que las parejas encuentran para decidirse a tener hijos.
Aunque el número de nacimientos aumentó inmediatamente tras la eliminación de la política del hijo único (1980-2016), la tendencia ha vuelto a tomar en los últimos años un camino descendente. Una encuesta de 2021 de la Comisión Nacional de Salud muestra que las mujeres en edad fértil tienen “poca voluntad” por tener hijos: “El número medio de hijos que quieren tener es de 1,64; en 2017, era de 1,76 y en 2019, de 1,73″, apunta el sondeo. La cifra baja a 1,48 entre las veinteañeras y a 1,54 entre las treintañeras. “Los altos costes de la crianza, la escasez de guarderías, así como la preocupación por el desarrollo de la carrera profesional se han convertido en los principales obstáculos para las mujeres”, agrega el texto.
Lejos de la estabilidad
Los últimos datos publicados por la Administración Nacional de Estadísticas (2020) revelan que la tasa global de fecundidad del país (el número promedio de hijos que nacerían por mujer si esta hubiera dado a luz en todos sus años reproductivos) es de 1,3, por debajo del 2,1 requerido para que la población se mantenga estable.
En un artículo publicado el 1 de agosto en la revista Qiushi, del Comité Central del Partido Comunista, la Comisión Nacional de Salud alertó que, para 2035, se espera que más del 30% de la población china sea mayor de 60 años. La reducción del tamaño medio de las familias, que según el censo de 2020 es de 2,62 ―una disminución de 0,48 en comparación con el de 2010― añade presión al cuidado de los ancianos y los niños.
Algunas ciudades ofrecen desde el año pasado ayudas para las familias con más de un bebé. Panzhihua, en Sichuan, anunció que aquellos con un segundo o tercer hijo recibirían un subsidio de 500 yuanes mensuales (3,63 euros) hasta que el infante cumpliese tres años. Jiaxing, en Zhejiang, prometió a aquellos con más de dos hijos una rebaja de 300 yuanes (2,18 euros) por cada metro cuadrado para la compra de una casa nueva. Zhengzhou, en Henan, aseguró que para 2025 cada urbanización contará con una guardería.