¡Nos queremos vivas!

Una reflexión sobre la epidemia crónica de feminicidios en América Latina y muchas recomendaciones de mujeres a las que seguir en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, la mayor en español, y a la que también se puede asistir virtualmente en el boletín feminista de EL PAÍS América de esta semana

Una mujer grita en la marcha por el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres en la Ciudad de México el pasado jueves.Monica Gonzalez

Bienvenidos a esta cuarta entrega de Americanas, la newsletter feminista de EL PAÍS América. Soy Almudena Barragán, periodista de EL PAÍS en México. Desde hace 10 años he cubierto los movimientos de mujeres y la lucha feminista en el país. (Si alguien te ha enviado nuestro boletín y quieres suscribirte, puedes hacerlo aquí)

El pasado 25 de noviembre se conmemoró el Día Internacional contra la Violencia de Género. U...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Bienvenidos a esta cuarta entrega de Americanas, la newsletter feminista de EL PAÍS América. Soy Almudena Barragán, periodista de EL PAÍS en México. Desde hace 10 años he cubierto los movimientos de mujeres y la lucha feminista en el país. (Si alguien te ha enviado nuestro boletín y quieres suscribirte, puedes hacerlo aquí)

El pasado 25 de noviembre se conmemoró el Día Internacional contra la Violencia de Género. Una pandemia silenciosa que deja cada año más de 4.000 feminicidios en Latinoamérica, según la Cepal. En realidad esta cifra solo sirve para acercarnos al problema, pero no muestra ni la ínfima parte de todos los crímenes de odio que se cometen contra las mujeres en la región.

Les pongo como ejemplo el caso de México, un país sumido en una profunda crisis de seguridad pública en el que cada día 11 mujeres son asesinadas. Desde 1990, pero de manera más acelerada en los últimos cinco años, el asesinato de mujeres ha aumentado sin freno hasta llegar a un máximo de 3.957 homicidios en 2020, según el Instituto de Estadística y Geografía (Inegi). De todos esos casos, menos de un 20% es clasificado, investigado y juzgado como feminicidio, pese a que existen criterios de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que indican que toda muerte violenta de una mujer en México debe investigarse como feminicidio. “De esas más de 3.000 mujeres asesinadas, el 50% tiene características de feminicidios”, explicaba la directora del Observatorio Nacional del Feminicidio, María de la Luz Estrada. La especialista agregaba otro dato alarmante: “Los feminicidios de niñas y adolescentes de 0 a 17 años se han incrementado desde 2015 hasta los 542 en septiembre de 2021″.

Cuando hablamos del fracaso en el combate a la violencia contra las mujeres, no solo hablamos de un sistema de justicia que les falla —la tasa de impunidad supera el 95% y solo un 2% de los casos reciben sentencia— también de unas autoridades poco o nada comprometidas con abordar el problema de raíz. Sumado a lo anterior, el próximo año se aplicarán recortes o subidas insignificantes a los programas destinados a frenar la violencia machista, mientras los asesinatos de mujeres siguen al alza.

Necesitamos como sociedad instituciones fuertes, responsables y comprometidas con prevenir, sancionar y erradicar la violencia machista; que respeten las leyes que ya existen y que las apliquen con perspectiva de género. También hacen falta hombres que no acosen, no violen, no asesinen y no utilicen el cuerpo de las mujeres y las niñas como objeto de consumo. Y eso, queridas lectoras y lectores, solo puede lograrse con educación feminista. Es la única forma de tener una sociedad más equitativa, libre y justa.

La lucha de las mujeres en este país y en este continente es una lucha por sobrevivir y así pudo sentirse en las manifestaciones de varias ciudades. En una de ellas, una mujer fue asesinada. Marisol Cuadras tenía 18 años y participaba en una protesta junto al Ayuntamiento de Guaymas (Sonora) cuando un comando armado disparó muy cerca de donde estaba para atentar contra el comisario de la ciudad. Junto a ella murieron dos personas más y otra resultó herida. Solo unas horas antes, la joven había escrito en el suelo la palabra “Todas” junto a varios pares de zapatos rojos que simbolizan a las asesinadas y a las desaparecidas en México.

Aunque su asesinato no parece estar relacionado directamente con su participación en la marcha, Marisol fue asesinada el mismo día en el que millones gritábamos “¡basta!” a la barbarie que nos desangra. Porque no exageramos cada vez que decimos: “Si muero mañana, si desaparezco mañana: luchen por mí, no me olviden”. Como menciona mi compañera Carmen Morán en esta columna: “La violencia en México tiene cifras de un país en guerra, pero los mexicanos no lo saben. Como en todo conflicto bélico, las mujeres llevan la peor parte”.

Nazaret García, de 27 años, es una joven que decidió salir a la calle este 25N para mostrar su enojo, su rabia y su indignación. En su camiseta podía leerse el mensaje: “Estar viva no debería ser un logro” y sin embargo, ella, su hermana, sus amigas y todas las que allí marchábamos sabíamos que sí es un logro seguir vivas. Salir a la calle y volver sanas y salvas es el mayor reto al que nos enfrentamos cada día. Nazaret lo describe a la perfección: “En México la violencia es una epidemia sin fin”.

Fabiola Ledesma conocida como Masta Quba (Santiago de Querétaro, 7 de febrero de 1988) es una rapera y activista de Hip Hop.Cortesía

Ojalá puedan leer lo que tiene que decir al respecto la rapera Masta Quba. Ella forma parte de una generación de músicas que se abren camino en la escena urbana con letras cargadas de feminismo y lucha antirracista. En sus canciones retrata el abuso, la violación, la urgencia de legalizar el aborto, la autodefensa feminista y la rabia por el feminicidio de sus amigas. Con sus letras transforma ese dolor en un canto a la dignidad y a la lucha de las mujeres. Les dejo su canción: Nosotras tenemos otros datos. No se pierdan tampoco este vídeo de Teresa de Miguel sobre la Santa Vulva, un símbolo contra la violencia machista en la capital mexicana.

El jueves, otra vez, volvimos a salir a la calle en ciudades de toda Latinoamérica. Lo hicimos por nuestras hijas, nuestras amigas, nuestras madres, nuestras hermanas. Marchamos por las que ya no están y por las que vendrán. Como escribió Marisol Cuadras horas antes de morir: Por todas.

Estos son nuestros artículos recomendados de la semana:

Los hijos del ‘baby boom’ de las FARC crecen en paz

La maternidad estaba prohibida en la guerrilla colombiana, que obligaba a abortar a las embarazadas. Pero eso acabó con los acuerdos de paz

Marsia Taha, la chef que colocó a Bolivia en el mapa de la gastronomía mundial

La jefa de cocina del restaurante Gustu, en La Paz, ha sido nombrada la Chef Femenina Revelación de América Latina

La familia rota de Disney

La nueva película de Disney, cuya protagonista es una niña colombiana, viene con un mensaje sobre el peligro de las expectativas detrás de las mágicas imágenes tomadas de ‘Cien Años de Soledad’

Aremi Fuentes, Premio Nacional de Deportes en México

La halterista, medallista olímpica en Tokio 2020, es reconocida como una de las mejores deportistas de México pese al caos en la administración del deporte.


Y para despedirnos, unas sugerencias:

📚 Mujeres en la FIL:

Desde Guadalajara, nuestra corresponsal de Cultura, Camila Osorio, nos recomienda algunas de las escritoras a las que seguir en la Feria Internacional del Libro, que arrancó este sábado en esa ciudad mexicana, y donde estarán algunas de las mejores escritoras de América Latina. El mayor evento editorial en español del mundo regresa este año a un formato semipresencial, aunque también habrá actos virtuales que se pueden seguir por streaming:

  • La colombiana Pilar Quintana, ganadora este año del premio Alfaguara, presentará virtualmente su libro Los Abismos sobre la relación de una madre y su hija en la ciudad de Cali.
  • La mexicana Cristina Rivera Garza también presentará virtualmente El invencible verano de Liliana, un valiente y doloroso libro sobre un feminicidio muy cercano a su vida: el de su hermana, Liliana, por un exnovio.
  • Otra mexicana, Fernanda Melchor, presentará Páradais, una novela cruda sobre cómo toma forma el machismo y la violencia en dos chicos que consideran matar a una mujer.
  • En forma virtual y presencial estarán la chilena Diamela Eltit, premiada este año con el premio FIL de Literatura en Lenguas Romances por toda su obra como novelista y académica; y la uruguaya Fernanda Trías, premiada este año con el Sor Juana Inés de la Cruz por su novela Mugre Rosa, que trata sobre la historia de una mujer cuidadora de un niño enfermo en medio de una pandemia parecida a la que hemos vivido.
  • La argentina Camila Sosa Villada, autora de Las Malas, estará en un evento con jóvenes de Guadalajara (presencial y virtual), y la presidenta de la Convención Constitucional chilena, Elisa Loncón, se presentará también virtualmente para hablar sobre literatura en lenguas originarias (Loncón es mapuche y doctora en Lingüística).
  • Perú es el país invitado este año. Del país sudamericano estará en Guadalajara Miluska Benavides, nombrada una de las mejores plumas en español menores de 35 años; también habrá poetas como Mariela Dreyfus o las escritoras indígenas Dina Ananco Ahuananchi y Ch’aska Anka Ninawaman.
  • Un evento con cuatro escritoras maravillosas será ‘Brujas y modernas’ (solo presencial, lastimosamente) con la argentina Dolores Reyes, autora de Cometierra, la mexicana Brenda Lozano, autora de Brujas, y una local de Guadalajara, Ave Barrera, autora de Restauración. Modera la peruana Jennifer Thorndike, autora de las novelas Ella y Esa muerte existe.

🎙️ 🥊 Una mujer inspiradora:

La periodista mexicano-estadounidense María Hinojosa, fundadora de la productora Futuro Media y directora y presentadora de los podcasts Latino USA y In the Thick. Nos lo recomienda nuestra compañera Lorena Arroyo, quien la entrevistó recientemente y habló con ella sobre el reto migratorio y sobre su libro Una vez fui tú, en el que aborda su vida como periodista, mujer y migrante.

Con 16 años, María Hinojosa fue víctima de una violación, pero le costó décadas ponerle nombre a lo que le había pasado. En 2019, durante las audiencias en el Congreso de Estados Unidos para la nominación a la Corte Suprema de Brett Kavanaugh —un juez acusado de haber abusado sexualmente de una menor de edad cuando ambos eran estudiantes— , decidió que tenía que contar su historia al ver cómo muchos estadounidenses quitaban peso al testimonio de la víctima por haber sucedido hacía años.

María se identificó con la historia de la víctima de Kavanaugh —la doctora Christine Blasey Ford— y decidió que tenía que contar la suya para visibilizar una situación que no debería ser normalizada. “La decisión de contarlo fue bastante dura y estoy tan contenta de que lo hice porque tantas mujeres me han dicho: ‘Gracias por decirlo, porque me pasó lo mismo’. Y, lo más importante para mí, que me lo dio de regalo mi terapeuta, fue entender que hay otra vida que puedes vivir si trabajas ese trauma. Eso es liberación feminista”, me dijo en una entrevista a principios de mes. En esa conversación, hablamos también del síndrome de la impostora y cómo usarlo a nuestro favor, de cómo impulsarnos gracias a las alianzas entre mujeres y de sus trucos para cuidar la salud mental. Spoiler alert: cuando está en Nueva York, practica boxeo todas las mañanas en un parque de la ciudad. Confiesa que al dar golpes con sus guantes siente que nadie la puede parar. “Que se den cuenta de que pueden ser más grandes, tener mucho más dinero, ser mucho más famosos, pero que yo, así chiquitita, voy a seguirle dando”, advierte.

🎧 Un podcast:

Deforme Semanal Ideal Total. Nos lo recomienda nuestra colega Teresa de Miguel.

Hacía tiempo que estaba en mi lista de podcasts a escuchar, pero por una cosa o por otra no lo había empezado. Hasta que el otro día un amigo periodista me dijo que salía a correr cada mañana acompañado del programa. Y decidí copiarme. Me calcé los tenis y los audífonos y puse el primer capítulo de Deforme Semanal Ideal Total. Las carcajadas llegaron rápido de la mano de Isa Calderón y Lucía Lijtmaer, que pueden saltar de hablar de consoladores y exnovios a Hitchcock y Nora Ephron en un abrir y cerrar de ojos. Libros, cine, feminismo, filosofía, todo entremezclado con historias personales en las que es imposible no sentirse identificada. “Un espacio alejado de la perspectiva machirula reinante”, que dicen ellas mismas. Una hora después, cuando se acababa el programa, me di cuenta de que ya no iba corriendo, sino metida en esa charla con amigas.

¡Muchas gracias por acompañarnos y hasta el próximo domingo! (Si les han enviado esta newsletter y quieren suscribirse para recibirlo en su correo, pueden hacerlo aquí).

Sobre la firma

Más información

Archivado En