La orden del religioso español con ébola recibirá materiales por 160.000 euros

El Congreso prevé ratificar un crédito para afrontar el virus en el hospital de Monrovia, Liberia

Miguel Pajares y un enfermero en el Hospital San José de Monrovia (Liberia), ahora cerrado.juan ciudad

La ONG Juan Ciudad y la orden San Juan de Dios, a la que pertenece Manuel García Viejo, el misionero español con ébola, recibirán 160.000 euros en material sanitario para afrontar la epidemia en Liberia. La Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo ha propuesto la financiación de dos ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La ONG Juan Ciudad y la orden San Juan de Dios, a la que pertenece Manuel García Viejo, el misionero español con ébola, recibirán 160.000 euros en material sanitario para afrontar la epidemia en Liberia. La Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo ha propuesto la financiación de dos lotes completos de equipos médicos, medicamentos e instrumental de protección, desinfección y rehidratación. El dinero forma parte de la concesión de un suplemento de crédito —por valor de 5,1 millones de euros— que el Congreso tiene previsto ratificar este jueves para financiar, entre otros, proyectos ante situaciones de emergencia y para la lucha contra el cambio climático.

Se trata de la convalidación de un decreto ley del 12 de septiembre, a través del cual se conceden suplementos de crédito y créditos extraordinarios en los presupuestos de diferentes ministerios; en el caso del ébola, en el de Asuntos Exteriores y de Cooperación. La orden gestiona, a través de la ONG, el Hospital de San José en Monrovia, donde se contagió el misionero español Miguel Pajares, fallecido el 12 de agosto, cinco días después de haber sido repatriado. El decreto señala que la entrega del material tiene "el fin de apoyar la reapertura de dicho hospital para el tratamiento de esta enfermedad y otras".

Más información

La orden está presente en más de 50 países de cuatro continentes; gestiona más de 350 centros, de los que 80 son hospitales. Uno de ellos es el Hospital de San Juan de Dios en la ciudad de Lunsar, Sierra Leona, donde García Viejo ejercía como director médico antes de ser repatriado el pasado domingo. Desde el lunes se encuentra en el Carlos III, el centro que atendió a Pajares y a Juliana Bonoha, la misionera española de origen guineano que estuvo aislada durante 21 días por causa del virus, hasta el 28 de agosto.

En el decreto ley se destaca, además, que la presidenta de Liberia, Ellen Johnson-Sirleaf, ha pedido ayuda al Gobierno de España para poder afrontar la emergencia sanitaria ocasionada por la propagación del virus. La epidemia ha matado a más de 2.800 personas, casi la mitad en Liberia, en estado de emergencia desde el pasado el 6 de agosto.

La organización International Crisis Group (ICG), que analiza y previene conflictos armados, ha señalado este miércoles que en Liberia y Sierra Leona, el segundo país más golpeado por el ébola, los Gobiernos han dado una "respuesta militar" a los problemas de salud, ante la carencia de médicos. Antes de la epidemia, Liberia tenía solo 45 médicos para una población de 4,5 millones y, ahora que el virus se ha propagado, la mitad de los centros de salud han cerrado por la falta de personal.

García Viejo está "estable", pero todavía espera el tratamiento

Manuel García Viejo, el religioso español con ébola, se encuentra "consciente y clínicamente estable, pero continúa dentro del contexto de gravedad". Así lo ha informado la orden de San Juan de Dios, a la que pertenece desde hace 52 años. El misionero, ingresado desde el lunes en el hospital Carlos III de Madrid, todavía no recibe tratamiento experimental.

La orden ha explicado en un comunicado que "se siguen estudiando posibles alternativas terapéuticas experimentales relacionadas con el tratamiento de la enfermedad provocada por el virus del ébola".

La terapia alternativa que tiene más opciones ahora mismo es administrarle el suero de un paciente alemán que superó la enfermedad. El religioso, de 69 años, ha pedido que se mantenga la privacidad sobre su situación.

Sobre la firma

Más información

Archivado En