Más ciencia y menos desigualdad: la Conferencia Internacional del Sida cierra con una llamada de auxilio

La 24ª edición de la Conferencia Internacional del Sida (AIDS 2022) cerró este martes en Montreal (Canadá) con mensajes optimistas acerca de la lucha mundial contra esta enfermedad endémica, pero también con evidentes signos de preocupación a raíz de los últimos datos publicados, que indican retrocesos en el progreso conseguido en las anteriores décadas. Una de cal y una de arena, una celebración y una denuncia. Así ha transcurrido la semana en la que se considera la mayor cita mundial de la comunidad que trabaja para acabar con el VIH, un evento que se celebra cada dos años bajo el auspicio de la Sociedad Internacional del Sida (IASociety).

El Gobierno de Canadá, país anfitrión, ha denegado el visado a muchos de los participantes y delegados, especialmente a aquellos procedentes de países del Sur global

Ya antes incluso de su inauguración, la presidenta saliente de la conferencia, Adeeba Kamarulzaman, expresaba en voz alta durante una rueda de prensa la preocupación que existe en la mente de muchos en los últimos tiempos: el riesgo de que el mundo se desvíe del camino en la lucha contra el VIH y no porque no haya información o recursos, sino porque no se hace lo que se debe. “Estamos viendo una y otra vez que, ya sea en el contexto del VIH o de la covid-19, demasiadas decisiones sobre la salud pública se basan en la política y en los beneficios, en lugar de en el avance científico y en la aportación de los más afectados”, criticaba.

No solo por la pandemia del nuevo coronavirus, sino por el impacto de la invasión rusa de Ucrania, lo cierto es que los datos más recientes presentados por las Naciones Unidas no son muy esperanzadores: 1,5 millones de nuevas infecciones y 650.000 muertes en el que ha sido el año que ha registrado un progreso más lento desde 2016. Además, se han encontrado aumentos de casos en casi todas las regiones del mundo.

Nuestro objetivo era centrar las mentes en las necesidades de la gente y en las nuevas pruebas científicas. La política y las políticas deben diseñarse en torno a esos dos pilares y en ese orden

Jean-Pierre Routy, copresidente de AIDS 2022

La conferencia ha querido ser una plataforma en la que la comunidad internacional renueve los votos de su compromiso en la respuesta global contra el virus, tal y como dejaba claro el eslogan elegido para la cita: “Re-engage and Follow the Science”: comprometeos y seguid a la ciencia, en castellano. Durante estos cinco días se han dado pinceladas sobre la futura agenda de investigación, se han mostrado nuevas herramientas de prevención, tratamientos mejorados y posibles pasos hacia el fin de esta enfermedad inmunológica, aún incurable. “En esta época tan polarizada y politizada, este mensaje es increíblemente importante. Nuestro objetivo esta semana era centrar las mentes en las necesidades de la gente y en las nuevas pruebas científicas. La política y las políticas deben diseñarse en torno a esos dos pilares y en ese orden”, reclamó durante el acto de clausura Jean-Pierre Routy, copresidente de la conferencia.

La polémica de los visados

No solo de sida se ha hablado en un encuentro que debía servir para ese fin, pues el Gobierno de Canadá, país anfitrión, ha denegado el visado a muchos de los participantes y delegados, especialmente a aquellos procedentes de países del Sur global, como la activista Tia Johnson, fundadora de la Alianza Africana para la Prevención del VIH.

“Me siento profundamente disgustada por el elevado número de denegaciones y visados pendientes que han impedido la entrada en Canadá a muchos delegados inscritos, entre ellos el personal y los dirigentes de la IASociety”, se quejó en la ceremonia de inauguración Kamarulzaman, quien atribuyó las dificultades de los asistentes a un problema de “inequidad global” y “racismo sistémico”.

La propia Winnie Byanyima, directora del Programa de Lucha contra el VIH de las naciones Unidas (Onusida) denunció con un tuit las barreras que ella también encontró: “Estoy en el aeropuerto de Ginebra, en la puerta de embarque, con la tarjeta de embarque en la mano de camino a #unaids2022. Casi me niegan el embarque, con todos los documentos examinados una y otra vez, las llamadas realizadas... Embarqué la última. A cientos de personas en el sur se les han negado visas y no asistirán. ¡Injusto, racista!”, escribió.

Un paso adelante en la prevención

La prioridad es garantizar que los nuevos avances lleguen rápidamente a quienes más los necesitan, principalmente en los países de ingresos bajos y medios, así como las poblaciones clave, como los profesionales del sexo y los consumidores de drogas inyectables. Por eso, uno de los hallazgos que más atención ha recibido ha sido la nueva manera de prevenir el contagio de VIH mediante el uso de la profilaxis de exposición previa al virus (PrEP).

El PrEP oral se aprobó por primera vez en EE UU hace una década, pero la aceptación y la adherencia se han visto limitadas, en parte, por el hecho de que algunas personas tienen dificultades para tomar píldoras diarias. En los últimos años, un par de estudios conocidos como HPT083 y HPT084 han demostrado el Cabotegravir de acción prolongada o CAB-LA, que se administra por inyección una vez cada dos meses, es una alternativa segura y eficaz a la PrEP oral. En el marco de este congreso se han presentado las conclusiones de ambos, que analizan la efectividad del CAB-LA, en hombres cisgénero y en mujeres transexuales el primero, y en mujeres, el segundo. En todos los casos, la versión inyectable fue más eficaz que la oral y, en el caso de las mujeres trans, además se observa que la medicación no interfiere con la terapia hormonal de afirmación de género.

Con la intención de que el uso de CAB-La se generalice, también en el marco de esta conferencia se anunciaron dos estrategias nuevas. La primera, un acuerdo entre ViiV, la farmacéutica que lo fabrica, y el Fondo de Patentes de Medicamentos de la ONU para que se puedan fabricar genéricos y el acceso al fármaco sea asequible en 90 países del mundo de ingresos medios y bajos con mayor carga de la enfermedad. Sobre este acuerdo aún existen grandes interrogantes que responder, pues en el aire han quedado cuestiones como qué pasara con un gran número de países de renta media que no han sido incluidos, sobre todo en América Latina, donde existen millones de personas que podrían beneficiarse del medicamento.

El segundo anuncio, este de la OMS, ha sido una recomendación del CAB-LA como una opción adicional de prevención del VIH para las personas con un riesgo considerable de contraerlo, que son el 70% de los nuevos infectados cada año: los trabajadores del sexo, los hombres que tienen relaciones con hombres, usuarios de drogas inyectables, los reclusos, las personas transgénero y sus parejas sexuales.

Nuevas vías hacia una posible cura del sida

En el campo de los avances destinados a la curación del sida se han presentado también los casos de los conocidos como la paciente de Barcelona y el paciente de Londres. La primera es una mujer de la capital catalana que ha logrado vivir más de 15 años sin carga viral y sin tomar terapia antirretroviral. El equipo que ha llevado su caso, liderado por médicos del Hospital Clínic de la Ciudad Condal, han averiguado, además, qué mecanismos celulares han hecho posible la curación funcional de la mujer.

Igual de optimista es la historia del conocido como paciente de City of Hope o Ciudad de la Esperanza, un varón de 66 años al que se le diagnosticó el VIH en 1988. En 2019, desarrolló una leucemia mieloide aguda y recibió un trasplante de células madre de un donante que era naturalmente resistente al VIH. Treinta y nueve meses después, el hombre no tiene ADN del VIH detectable en su cuerpo, así que parece estar curado. Este es el cuarto caso conocido de remisión en un individuo que recibió un trasplante, y su particularidad es que el donante y el receptor no eran perfectamente compatibles, lo que indica que esta opción podría estar disponible para más enfermos. “Aunque el trasplante no es una opción para la mayoría de las personas con VIH, estos casos siguen siendo interesantes e inspiradores, y ayudan a iluminar la búsqueda de una cura”, expresó Sharon Lewin, recién elegida presidenta de IASociety y sucesora de Kamarulzaman.

En la conferencia se ha presentado el cuarto conocido de remisión total del VIH en un paciente trasplantado de médula

Otro de los avances presentados es una manera más efectiva de tratar a los pacientes de VIH y hepatitis B, que suponen un 7% de la población mundial. También se presentó el éxito de una nueva estrategia para prevenir las infecciones de transmisión sexual o ETS a través de la llamada Doxy PEP, que es la abreviatura de la profilaxis postexposición con doxiciclina. La doxiciclina es un antibiótico seguro y ampliamente utilizado, y la investigación halló que la toma del mismo dentro de las 72 horas posteriores a las relaciones sexuales sin preservativo reduce el riesgo de contagiarse de tres ETS bacterianas: la gonorrea, la clamidia y la sífilis. No obstante, aún hacen falta más investigacion para comprender mejor los potenciales impactos sobre la resistencia a los antibióticos.

Entre las noticias más positivas, el éxito de Botsuana, que ha conseguido cumplir la estrategia 95-95-95 de Onusida, es decir: que el 95% de la población que padece VIH está diagnosticada; que, de ellos, el 95% está en tratamiento antirretroviral, y que, de estos, el 95% no presenta carga viral detectable. Botsuana tiene una prevalencia muy alta: uno de cada cinco adultos es seropositivo, pero el país ha puesto en marcha una serie de estrategias como Test and Treat (prueba y tratamiento) que proporciona terapia antirretroviral inmediata a quienes dan positivo en VIH.

Una alianza contra el VIH infantil

La reunión de Montreal ha supuesto una plataforma para anunciar nuevos pactos, como la nueva Alianza Mundial para Terminar con el VIH/SIDA en niños para 2030, liderada por Onusida, Unicef y la OMS, y gobiernos de algunos de los países más endémicos. Viene propiciada por el hecho de que solo el 52% de los niños que viven con VIH/Sida está en tratamiento –entre adultos, la media mundial es del 76%– y su meta es que, al final de la década, a ningún menor de edad con VIH/SIDA se le niegue el tratamiento y que todos nazcan sin portar el virus. Entre los puntos de acción más urgentes está la atención en prevención, diagnostico y tratamiento de mujeres y adolescentes embarazadas y lactantes, así como garantizar la atención integral para bebés, niños y adolescentes que porten VIH o que estén expuestos a él.

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