La vuelta al cole
Empieza un curso en el que la caída de la natalidad toma las aulas de infantil y se asoma a la primaria. Y en el que la inflación deja temblorosa un sinfín de bolsillos
Ni la muerte de Isabel II, ni el debate en el Senado entre Sánchez y Feijóo, ni la mayor subida de tipos de interés de la historia en la zona euro. La noticia con más impacto esta...
Ni la muerte de Isabel II, ni el debate en el Senado entre Sánchez y Feijóo, ni la mayor subida de tipos de interés de la historia en la zona euro. La noticia con más impacto esta semana en numerosos hogares españoles ha sido la vuelta al cole. Emoción y vértigo, el del paso veloz del tiempo, para los padres que han visto cómo la pequeña o el pequeño de la casa despedía la escuela infantil y entraba en el cole de mayores. Otros, más pequeños aún, se asomaban por primera vez a la escuela infantil con lloros desconsolados al soltar la mano cariñosa de mamá, papá, la abuelita… y entrar en un mundo desconocido. Con suerte, el llanto se habrá ido apagando entre la curiosidad y el descubrimiento de otras caras con lagrimones, tan curiosas como las suyas. Pronto serán caras amigas, se consuelan mamá, papá, la abuelita…, llenos de congoja tras soltar la mano de su bebé e irse escuchando su llanto. Para otros, menos pequerrechiños y más expertos, el primer día es regresar a terreno conocido y a los amigos. Algunas, felices de volver al cole. Otros, pensando que menos mal que casi es sábado. Y así, hasta ocho millones de escolares. Ocho millones de historias.
Empieza un curso en el que la caída de la natalidad toma las aulas de infantil y se asoma a la primaria. Y en el que la inflación deja temblorosos un sinfín de bolsillos. 400 euros por hijo cuesta la vuelta al cole en 2022, nos contaban las noticias. Un buen pico se lo llevan los libros de texto, hasta un 20% más caros. Lo que no dicen los informativos es que sus noticias nos recuerdan el empujón que necesitan las políticas de ayudas para libros de texto para llegar a la gratuidad universal deseable. Más lejos aún parece el comedor gratuito, medida a la que los grandes partidos son reacios por su coste. En el reciente debate sobre el estado de la nación, Más País presentó una enmienda simbólica instando al Gobierno a estudiar su implantación en primaria y solo encontró el apoyo de Podemos y Ciudadanos. PP y Vox se abstuvieron. Los de Abascal, porque solo lo querían para niños españoles. El PSOE votó en contra. Demasiado dinero. 1.664 millones de euros, según la ONG Educo. 1.472 si descontamos los 191 millones que ya se invierten en becas y ayudas. Quizás suena a mucho, aunque solo es un 0,13% del PIB.
La educación básica plenamente gratuita constituye un instrumento indispensable para garantizar la igualdad de oportunidades y este es el tipo de medidas que la impulsan. La lucha contra la desigualdad empieza por fortalecer los cimientos. Y fortalecer la educación es fortalecer la sociedad.