La gira de Von der Leyen
La UE busca recuperar su iniciativa en Oriente Próximo a la vez que rebajar su dependencia energética de Rusia
El calendario corre, y la invasión rusa de Ucrania ha generado una situación de urgencia energética y alimentaria ante la cual la Unión Europea no tiene más remedio que actuar con celeridad si pretende cumplir su objetivo de eliminar para 2027 la dependencia actual del gas ruso, que asciende en su conjunto al 40%. Además, el riesgo de estallidos sociales muy cerca de su frontera exterior es real. ...
El calendario corre, y la invasión rusa de Ucrania ha generado una situación de urgencia energética y alimentaria ante la cual la Unión Europea no tiene más remedio que actuar con celeridad si pretende cumplir su objetivo de eliminar para 2027 la dependencia actual del gas ruso, que asciende en su conjunto al 40%. Además, el riesgo de estallidos sociales muy cerca de su frontera exterior es real. En esta estrategia de “diplomacia energética” se enmarca la gira realizada esta semana por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, por Israel, Palestina, Egipto y Jordania, que ha puesto de manifiesto no solo los complicados equilibrios políticos de la zona, sino la necesidad de que Europa recupere la iniciativa en un área de interés estratégico. Las ONG humanitarias se han quejado del aparente silencio de la UE en esta gira sobre la situación de los derechos humanos en Egipto, algo menos degradada con Biden, eso sí, que durante el mandato de Trump.
Los movimientos de la UE en busca de rebajar la dependencia energética de Rusia alteran el mapa de las relaciones con Oriente Próximo, refuerzan la cooperación económica y generan efectos colaterales tan relevantes como el desbloqueo anunciado por Von der Leyen en Ramala de más de 200 millones en ayudas, entre ellas las que afectan a enfermos de cáncer palestinos. El comisario húngaro Oliver Várhely había condicionado esa ayuda de máxima urgencia humanitaria a la eliminación de presuntas alusiones antisemitas en los libros de texto palestinos.
El principal resultado de la gira se ha concretado en la firma de un memorando que culmina las negociaciones iniciadas en noviembre de 2021. El acuerdo a tres entre la UE, Israel y Egipto promueve que el gas israelí sea transportado a través de un gasoducto a las terminales de gas natural licuado (GNL) de Egipto en el Mediterráneo, antes de conducirlo en buques cisterna a las costas europeas, según anunció el Ministerio de Energía de Israel. El hallazgo de grandes yacimientos desde 2010 en aguas de Chipre, Líbano, Israel y Egipto abría la posibilidad a medio plazo de la construcción de un gasoducto en el Mediterráneo. Von der Leyen fue muy explícita al justificar su viaje en la voluntad de combatir el chantaje ruso y los cortes unilaterales de suministro de gas a Polonia, Finlandia y Suecia, a pesar de que el operativo tardará todavía en estar listo. En este contexto, la diplomacia de la UE ha anunciado la entrega inmediata por parte de la Comisión Europea de 100 millones de euros, como anticipo de los 3.000 millones previstos para los próximos años en la región, para paliar los efectos negativos en la cadena de suministros alimenticios provocados en Egipto por la agresión rusa. Las inversiones estarán destinadas a agricultura, sistemas de irrigación y purificación del agua y son fundamentales para prevenir una situación de descontento social de consecuencias impredecibles.