Madonna critica las medidas de Donald Trump contra la comunidad LGTBIQ+
“Es muy triste ver a nuestro gobierno desmantelando todas las libertadas por las que hemos estado luchando y ganando a lo largo de los años”, dice la cantante sobre la orden del presidente estadounidense de prohibir los tratamientos de cambio de sexo a los menores de 19 años
La Casa Blanca, bajo el mando de Donald Trump desde el pasado 20 de enero, ha arremetido, de nuevo, contra las infancias trans. El nuevo presidente de los Estados Unidos, a través de una orden ejecutiva, ha prohibido los tratamientos de cambio de sexo y cirugías de transición de género a los menores de 19 años al considerarlos, en sus palabras, “una mutilación y esterilización sexual”. Frente a estas medidas, Madonna ha salido en defensa de la comunidad LGTBIQ+ y ha criticado abiertamente las últimas órdenes emitidas y aprobadas por el mandatario. “Es muy triste ver a nuestro nuevo gobierno desmantelando lentamente todas las libertades por las que hemos estado luchando y GANANDO a lo largo de los años”, ha escrito la cantante en su cuenta de X. En el mensaje, acompañado de una fotografía de su rostro, ha agregado la bandera del orgullo, un corazón roto y un llamado a la resistencia: “¡No abandonen la lucha!”
La orden emitida por Trump critica que, actualmente, muchos médicos “están mutilando y esterilizando a un número cada vez mayor de niños bajo la afirmación radical y falsa de que los adultos pueden cambiar de sexo a través de una serie de intervenciones médicas irreversibles”. El republicano añade en su decreto: “Esta peligrosa tendencia será una mancha en la historia de nuestro país y debe terminar”. Las personas transexuales en los Estados Unidos representan alrededor del 0,5% de la población.
Desde la década de 1980, cuando empezó a ser conocida, la diva del pop ha empleado su plataforma para defender a la comunidad LGTBIQ+ y luchar por la igualdad de derechos —Madonna también es uno de los iconos queer más importantes de la historia—. En 2010, Madonna y la presentadora Ellen DeGeneres, adoptaron una postura contra bullying debido al aumento de suicidios de adolescentes relacionados con el acoso escolar y centrando su discurso en los jóvenes homosexuales que se habían quitado la vida. En esa ocasión, Madonna trazó un paralelo entre la persecución de las personas LGTBIQ+ y las injusticias históricas, enfatizando la gravedad del problema y la necesidad de transformación social.
En su paso por Rusia durante el MDNA Tour en 2012, la icónica cantante fue multada por promover la homosexualidad debido a que ella, en pleno concierto en San Petersburgo, reclamó más derechos para el colectivo en ese país y enarboló la bandera gay: “Tenemos que luchar para ser libres. La comunidad gay y la gente gay, aquí y en todo el mundo, tiene los mismos derechos”. El motivo de su defensa era una ley que castigaba “la propaganda de la homosexualidad y la pedofilia entre los menores”.
Además, Madonna ha colaborado con organizaciones benéficas y ha donado millones de dólares a causas relacionadas contra el VIH/SIDA, la prevención del suicidio dentro del colectivo y la promoción de la igualdad de género y la diversidad. Sobre su lucha contra el SIDA, destaca los dos conciertos en Barcelona de su gira Celebration Tour de 2023, donde aprovechó el escenario para homenajear a varios famosos afectados por la enfermedad como Marin Burgoyne, Keith Haring, Freddie Mercury y Robert Mapplethorpe. En ese entonces, cuando Madonna interpretó la canción Live to tell, las pantallas mostraron imágenes de sus amigos y artistas.
En el plano musical, el aspecto más destacado de su apoyo —y su impacto— en la comunidad LGTBIQ+ son sus canciones y sus videoclips. Desde Express Yourself hasta Like a Virgin, muchas de las letras abordan temas de empoderamiento personal, sexualidad y liberación. Y todo el imaginario que rodea a Madonna a menudo presenta personajes y situaciones queer que desafían los estereotipos de género y la sexualidad. Por ejemplo, el ya icónico vídeo de Like a Prayer (1989) presenta una narrativa que enfrenta la discriminación religiosa y, al mismo tiempo, desafía las normas de género y celebra la autenticidad.
Esta no es la primera orden emitida por Trump que vulnera los derechos de las personas trans. Desde que asumió la presidencia, el republicano ha tomado varias medidas que arremeten contra el colectivo y vulneran los derechos de las personas transexuales, a través de órdenes ejecutivas. El pasado 21 de enero, estableció que los pasaportes, los registros de la seguridad social u otros documentos de identificación oficiales deben reflejar el sexo asignado al nacer. En la orden puede leerse: “Estos sexos no son intercambiables y están fundamentados en una realidad fundamental e incontrovertible”. El texto también describe la autodeterminación de género como una “afirmación falsa” y dicta: “La ideología de género reemplaza la categoría biológica de sexo con un concepto cambiante de identidad de género autoevaluada”.
Y el jueves 28 el mandatario vetó a las personas transexuales del ejército de EE UU y acabó con las políticas de inclusión. En su defensa, el presidente alegó lo siguiente: “la adopción de una identidad de género inconsistente con el sexo de un individuo choca con el compromiso de un soldado con un estilo de vida honorable, sincero y disciplinado, incluso en la vida personal. La declaración de un hombre de que es una mujer, y su requisito de que otros respeten esa falsedad, no es consistente con la humildad y el altruismo que se demandan de un miembro de las Fuerzas Armadas”.