Así es la huelga de los médicos que trabajan: “Es fundamental que los pacientes entiendan nuestras razones”

Los facultativos del Doce de Octubre que no pueden participar en el paro al estar de servicios mínimos se organizan para manifestarse de forma alternativa contra la temporalidad laboral

Médicos especialistas, ante las puertas del Doce de Octubre este lunes, en su primer día de huelga indefinida.KIKE PARA

En la cafetería del personal del hospital Doce de Octubre de Madrid, seis médicos desayunan este lunes, primer día de huelga indefinida de médicos contra la temporalidad laboral, mientras charlan animadamente de la concentración que se celebra...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

En la cafetería del personal del hospital Doce de Octubre de Madrid, seis médicos desayunan este lunes, primer día de huelga indefinida de médicos contra la temporalidad laboral, mientras charlan animadamente de la concentración que se celebraba a primera hora de la mañana en las puertas del hospital. Tienen una pegatina en la bata, justo a lado de la etiqueta con sus nombres y de su especialización, con el lema Facultativo en huelga. Servicio mínimo. Es su manera de apoyar los paros de los médicos madrileños por la precariedad, que afecta a más de la mitad de los profesionales, la misma huelga en la que no pueden participar por orden de la Comunidad de Madrid. La unidad farmacéutica tiene que garantizar el 100% de los servicios al ser considerada “unidad urgente” por la Administración.

“La dirección del hospital nos hizo firmar ya la orden de servicio para toda la semana”, explica Susana Cortijo, farmacéutica oncológica de 44 años. Junto a sus compañeros, estuvo en primera línea desde las nueve de la mañana para pedir el fin de la temporalidad, una condición que sufre desde hace 14 años. “En lugar de valorar a la gente que está superespecializada, nos obligan a hacer un examen totalmente básico y obsoleto. Lo único que van a conseguir es perder a profesionales”, añade, indignada, antes de volver a trabajar.

Ante la imposibilidad de unirse presencialmente a la huelga, Cortijo y los otros médicos que tienen que trabajar se afanan para que el conflicto esté en la boca de todos en todo el hospital. Hablan con los pacientes, reparten panfletos y colocan pegatinas con el código QR de la petición en Change.or para paralizar la OPE (Oferta Pública de Empleo) convocada por el Gobierno regional.

Varios facultativos que no pueden ponerse en huelga posan ante el Doce de Octubre, este lunes.KIKE PARA

“La nuestra es una profesión totalmente vocacional y se aprovechan de esto. Saben que estamos dispuestos a aguantar de todo para nuestros pacientes”, afirma Carmen García, de 35 años, temporal de farmacia hospitalaria desde hace ocho años. Como los otros compañeros de su unidad, García tampoco puede ir a la huelga. Sin embargo, está dispuesta a hacer “todo lo necesario” para que la lucha tenga éxito. “Nos estamos moviendo mucho en las redes sociales, han sido importantes para dar a conocer el problema fuera de nuestro sector”, cuenta.

En las semanas de tensión que anticiparon el comienzo de la huelga, los facultativos de Madrid han acudido a las redes sociales para explicar a los ciudadanos las razones de su malestar. “Es fundamental dar la cara. Compartir información y hacer que la gente entienda que lo que hacemos tiene una motivación: garantizar la mejor asistencia posible a nuestros pacientes”, detalla José Manuel Caro, de 35 años.

Además de haber participado en la concentración, los médicos que no pueden ir a la huelga monitorean con atención los muchos chats de WhatsApp y Telegram en los que los especialistas de su hospital coordinan las acciones de protesta. “¿No puedo hacer huelga? Entonces tendré que manifestarme después de mi turno de trabajo”, asegura García, con energía.

Durante las consultas, los sanitarios contestan con entusiasmo a los pacientes que les preguntan por las chapas con el lema #FijezaYa que enseñan en las batas. María Calatayud, de 40 años, considera de vital importancia involucrar a sus pacientes en la huelga, aunque solo sea proporcionándoles información. “Están a tope con nosotros y entienden nuestras razones. Saben perfectamente lo que significa perder a un médico de confianza”, explica esta reumatóloga con contrato temporal desde hace cuatro años. Aunque este martes le ha tocado trabajar, el miércoles y el jueves participará en la huelga, ya que en su unidad los servicios mínimos son del 50%.

Para Francisco Giménez, de 44 años, no habrá ni un solo día de huelga. Es internista y trabaja en urgencias. Se siente indignado ante la decisión de la Comunidad de no reconocer su derecho a manifestarse. “Nos tratan como a los militares, que son los únicos que no tienen derecho a la huelga, aunque entiendo que la seguridad de un paciente tiene que ser siempre nuestra prioridad”, reconoce. “Por suerte, el movimiento de protesta es fuerte y está unido. Me da esperanza de que podemos ganar”, añade.

Suscríbete aquí a nuestra newsletter diaria sobre Madrid.

Sobre la firma

Más información

Archivado En