Feijóo se abre a suavizar su propuesta de disolver partidos que promuevan declaraciones de independencia o un referéndum ilegal
El líder del PP afirma que los análisis de los ‘pellets’ dicen que “no son tóxicos” y “lo tóxico es su utilización política”
Las críticas prácticamente unánimes que ha recibido en la prensa la propuesta del PP de disolver partidos políticos que promuevan declaraciones de independencia o un referéndum ilegal han llevado a Alberto Núñez Feijóo a abrirse a una rectificación de la medida estrella de su enmienda a la totalidad a la proposición de ley de amnistía a los encausados por el procés. El presidente del Partido Popular ha reconoc...
Las críticas prácticamente unánimes que ha recibido en la prensa la propuesta del PP de disolver partidos políticos que promuevan declaraciones de independencia o un referéndum ilegal han llevado a Alberto Núñez Feijóo a abrirse a una rectificación de la medida estrella de su enmienda a la totalidad a la proposición de ley de amnistía a los encausados por el procés. El presidente del Partido Popular ha reconocido este martes en una entrevista en Onda Cero que, como mínimo, su propuesta necesitaba “una explicación más pormenorizada”, y ha abierto la puerta a que se suavice en el periodo de enmiendas. En el texto registrado en el Congreso, los populares proponen la disolución de partidos que promuevan declaraciones de independencia o un referéndum ilegal mediante la introducción en el Código Penal de una serie de delitos de “deslealtad constitucional”, una iniciativa drástica en la que muchos juristas observan indicios de inconstitucionalidad. Ante el amplio rechazo a su propuesta, Feijóo se abre a modificarla en la tramitación parlamentaria. “Se puede discutir si primero suspendemos al partido político y que luego, solo en casos muy agravados, se produzca la disolución”, ha admitido Feijóo, antes de subrayar que es una propuesta y, como tal, el PP “está dispuesto a ver las enmiendas que se presenten”.
El líder conservador ha admitido, además, fallos en la comunicación de la iniciativa, que se registró en el Congreso el miércoles. “En nuestra explicación, algunas cosas las dimos por obvias, y no se pueden dar por obvias”, ha reflexionado el jefe de la oposición, que encargó a su portavoz parlamentario, Miguel Tellado, la presentación de la medida en una conferencia de prensa. “Lo que yo entiendo es que no la hemos explicado. Lo que yo no entiendo es que teníamos que presentar una enmienda a la ley de amnistía y nos dieron de plazo, que recuerdo, era hasta el 3 de enero, y nosotros presentamos la enmienda el 3 de enero sin hacer un mínimo de pedagogía y de explicación de nuestra enmienda”, ha razonado Feijóo.
El dirigente popular abre la puerta, por tanto, a rebajar su iniciativa y a que la disolución de un partido político se plantee solo en los casos “muy graves” de formaciones que promuevan declaraciones de independencia o un referéndum ilegal. Feijóo sigue defendiendo, en todo caso, su planteamiento de “fortalecer al Estado” con un nuevo delito de “deslealtad constitucional”. “¿Se puede discutir si primero debemos suspender ese partido político y, solo en casos muy graves, plantear la disolución? Sí. Esta es una propuesta que será debatida en las cámaras y que nosotros estamos dispuestos a ver las enmiendas que se presenten. Pero entendemos que hay que fortalecer al Estado, dado que en este momento el Estado se queda sin ningún tipo de barrera para proteger la integridad de la nación española”, ha defendido Feijóo.
La clave de la rectificación a la que se abre el líder popular es a que su iniciativa se quede, por norma general, en un escalón inferior al de la disolución de los partidos políticos, es decir, en una suspensión temporal. Según los juristas consultados por EL PAÍS, la propuesta de disolver formaciones políticas que promovieran un referéndum ilegal o declaraciones unilaterales de independencia alteraría no solo una consolidada práctica de tolerancia en las relaciones políticas, sino que supondría un giro de 180 grados en la concepción de la organización democrática avalada por el Tribunal Constitucional. El tribunal de garantías siempre ha defendido la legalidad y la participación política de las organizaciones cuyo ideario está en absoluto desacuerdo con el propio texto de la Constitución.
La propuesta del PP registrada en el Congreso dice, en su artículo 547, que “cuando de acuerdo con lo establecido en el art. 31 bis una persona jurídica sea responsable de cualquiera de los delitos establecidos en este Capítulo”, en referencia a la convocatoria de referéndum ilegales y de declaraciones unilaterales de independencia, “se le impondrá la pena de disolución, salvo que la persona jurídica realice antes de la apertura de juicio oral actos inequívocos de colaboración activa dirigidos al esclarecimiento de los hechos y la restauración del orden constitucional, en cuyo caso se le impondrá la pena de suspensión de actividades de seis meses a cinco años o pena de multa de seis meses a cinco años”.
El líder del PP ha insistido en lo oportuno de abrir este debate, aunque ahora admite suavizar su iniciativa. “Nosotros estamos a disposición de ver si se enmiendan, si se modifican, si se disminuyen las penas y hay una suspensión más que una disolución de los partidos políticos. Pero este es un debate que hemos de dar”, ha enfatizado en la entrevista.
Crisis medioambiental en Galicia
Feijóo se ha pronunciado este martes, por otro lado, sobre la crisis medioambiental por la llegada de cientos de miles de pellets de plástico a las costas gallegas, que los populares temen que movilice a la izquierda en las elecciones gallegas del 18 de febrero. El líder del PP ha defendido la no toxicidad del material, según los análisis de la Xunta de Galicia, aunque la Fiscalía de Medio Ambiente considera que los gránulos “presentan indicios de toxicidad” y ”no son biodegradables”. “De momento parece ser que los análisis a los que se ha sometido dicen que no son tóxicas [las bolitas de plástico], pero eso les corresponde a las personas que hacen ese tipo de análisis”, ha considerado Feijóo. “Lo que sí es tóxico es la utilización política que se está haciendo de un vertido en las costas portuguesas que el mar ha traído a las costas gallegas y, de momento, a las costas asturianas”, se ha quejado.
Después, en su discurso ante el comité ejecutivo nacional reunido hoy en la sede del partido, en la calle Génova de Madrid, Feijóo ha alertado a los suyos de que no deben confiarse ante el nuevo ciclo electoral, recordando lo que al PP le pasó en las generales del pasado julio, el trauma de la victoria insuficiente para gobernar. ”Creo que en 2023 hemos aprendido que no debemos de confiarnos y que no debemos de relajarnos. Vamos a trabajar en estos próximos 40 días en una campaña electoral gallega que ya ha comenzado de conformidad con la estrategia del PP de Galicia; vamos a pelear para ser decisivos en el nuevo ciclo político que se abrirá en Euskadi y para lograr otra victoria en unas elecciones generales como son las europeas de junio”, les ha exhortado. Feijóo, que ya ha experimentado en sus propias carnes un fallo estrepitoso de las encuestas, advierte a sus colegas de partido que la victoria en las elecciones gallegas del 18 de febrero no está hecha porque la anticipen los sondeos: “No podemos conformarnos y creer que todo está hecho. Las encuestas van bien, pero las encuestas, encuestas son”.