Feijóo declara su “respeto” por Puigdemont, admite contactos “indirectos” con él y le reta a dejar caer a Sánchez

Alberto Núñez Feijóo no quiere romper puentes con Junts per Catalunya. El PP todavía confía en que el partido de Carles Puigdemont tumbe la investidura de Pedro Sánchez. O, si no es así y hay legislatura, no renuncia a pactar con la formación independentista leyes o iniciativas concretas que generen inestabilidad en el futuro Gobierno progresista, según reconocen fuentes de la dirección popular. En ese...

Alberto Núñez Feijóo no quiere romper puentes con Junts per Catalunya. El PP todavía confía en que el partido de Carles Puigdemont tumbe la investidura de Pedro Sánchez. O, si no es así y hay legislatura, no renuncia a pactar con la formación independentista leyes o iniciativas concretas que generen inestabilidad en el futuro Gobierno progresista, según reconocen fuentes de la dirección popular. En ese contexto se inscriben las declaraciones de Feijóo este miércoles en Barcelona, en las que se ha referido con cierta deferencia al expresidente catalán, que permanece fugado de la justicia desde octubre de 2017.

En contraste con los cánticos que se escuchan en las movilizaciones del PP contra la amnistía a los encausados del procés, en las que los simpatizantes populares corean “¡Puigdemont, a prisión!”, el presidente del PP ha declarado hoy su “respeto” por el expresidente catalán. También ha destacado que en los contactos “no personales ni directos, pero sí indirectos”, que el PP ha mantenido con él, Puigdemont “no mintió” sobre sus posiciones, y que eso “es un valor”. Las declaraciones de Feijóo han aumentado la tensión con el líder del PP catalán, Alejandro Fernández, que rechaza la posibilidad de abrir un diálogo con Junts. El referente del PP en Cataluña ha manifestado su discrepancia por esa posición amable de su jefe de filas hacia el expresidente catalán, agravando la crisis interna.

“Le conozco, sí”, ha señalado Feijóo sobre Puigdemont en un desayuno informativo del Forum Nueva Economía, recordando que coincidieron en su etapa como presidentes de Galicia y de Cataluña, respectivamente. “No hemos hablado mucho. Yo respeto a todos los ciudadanos de mi país”, ha reflexionado el líder del PP, antes de elogiar al líder de Junts como político: “Creo que es un político... hay otros que mienten mucho. El señor Puigdemont todo el mundo sabe lo que pide. En los contactos, no personales ni directos, pero sí indirectos, no nos ha mentido. Eso sí es un valor. No estoy de acuerdo en absoluto con sus planteamientos, pero eso no significa que desde la discrepancia pueda haber respeto. Tiene asuntos pendientes con la justicia que creo que sería conveniente que los saldase”.

Las palabras de Feijóo sobre Puigdemont han removido en su silla a Alejandro Fernández, líder del PP en Cataluña, que se ha incorporado al desayuno informativo poco después de que empezara tras haber participado en la sesión de control en el Parlament. Fernández ha asistido a la conferencia de su jefe de filas pese a la tensión interna —la dirección nacional reconoce en privado desde hace tiempo su intención de apartarle—. Pero el político catalán, que se ha construido una posición política diferenciada de la cúpula por su rechazo al diálogo con Junts, ha retado a Génova a medir su apoyo ante las bases del PP de Cataluña. “Que se atrevan a defenderlo y lo votamos en un congreso”, decían este pasado domingo en su entorno.

Esta tarde, Fernández ha manifestado abiertamente su discrepancia con Feijóo. El diputado catalán ha publicado un tuit en la red social X (antes Twitter) con un pantallazo de la noticia de EL PAÍS en el que se ve la fotografía del acto de esta mañana en la que aparece él mismo, con gesto algo contenido, junto al político gallego y el expresident socialista José Montilla, que ha asistido también al desayuno informativo, ambos sonrientes. Y ha añadido el siguiente texto: “Supongo que algo hay de cierto en aquello de que la cara es el espejo del alma”. Fuentes de su entorn han confirmado después que era una forma de manifestar que no está de acuerdo con ese trato a Puigdemont. Fernández es portavoz del PP en el Parlament desde finales de 2016, y en ese puesto de primera línea asistió a la recta final del procés, que dejó episodios traumáticos para los parlamentarios no independentistas como los de los plenos de aprobación de las leyes de desconexión en septiembre de 2017.

Génova lleva meses queriendo relevar a Fernández, enfrentado a la dirección por la estrategia para Cataluña, pero el líder del PP catalán está dispuesto a dar la batalla orgánica y a presentarse al congreso, así que la cúpula ha reculado y ha pospuesto la fecha del cónclave para tratar de calmar las aguas. Esta mañana Feijóo ha evitado confirmar a Fernández en su puesto, pero ha dejado de nuevo en el aire cuándo se celebrará la cita orgánica. La crisis interna no tiene una solución sencilla para Feijóo. Fernández solo puede ser relevado por un congreso o por una gestora. El primer caso requiere asumir un cónclave de división, porque Fernández no acepta marcharse, pero el segundo enviaría el mensaje siempre delicado de que el partido en Madrid decide sobre el partido en Cataluña.

En su discurso en Barcelona, Feijóo ha dejado más pinceladas sobre los contactos que mantuvo el PP con Junts para su investidura fallida y la constitución de la Mesa del Congreso. El PP ya había reconocido esas conversaciones, pero nunca ha aclarado quiénes fueron los interlocutores. Hoy, el político gallego ha apuntado que hubo contactos “indirectos” con Puigdemont. “No hemos negado que hemos tenido contacto con Junts. Yo era candidato y era mi obligación. Y porque desde el punto de vista de política económica hay muchas más coincidencias”, ha argumentado.

Feijóo también ha explicado que el PP mantuvo conversaciones con el partido de Puigdemont para la constitución de la Mesa del Congreso, que el PP quería presidir. “Nos plantearon tres condiciones: el catalán en el Parlamento Europeo, el catalán en el Congreso y un proyecto de ley de amnistía. Tuvimos que decirles que no podíamos. Y me quedé sin ser presidente”.

Mientras adoptaba ese discurso amable con Puigdemont, el líder del PP ha invitado a Junts a tumbar la investidura de Sánchez. “Yo no sé si a los militantes de Junts la política económica de Sumar y del PSOE les irá bien. Y tampoco sé quién va a rentabilizar en Cataluña lo que se consiga, en su caso, en un pacto”, ha subrayado, buscando los puntos débiles del acuerdo para los independentistas. En otro momento de su discurso, Feijóo ha invocado el resultado de la reciente consulta a las bases del Consell de la República, la entidad privada que dirige Puigdemont en Bruselas, que han pedido bloquear la investidura de Sánchez. “La participación fue escasa [apenas un 4$], pero el resultado fue contundente [un 74% en contra de la investidura]”, ha destacado el líder del PP. “Junts siempre habla del derecho a decidir...”, ha incidido.

En Barcelona, Feijóo también ha defendido su discurso de hace meses contra la amnistía, con la misma contundencia que viene haciéndolo en el resto del país. “La amnistía no es una reconciliación, es una transacción política”, ha apuntado. “El amnistiado ha dicho que lo va a volver a hacer. La amnistía no cabe en el ordenamiento jurídico. No se puede negociar algo que es ilegal. Perdonar, que el Estado perdone, es legal. Pero que el Estado pida perdón a alguien que ha cometido un delito es un despropósito. Y es inmoral”.