El PP presentará mociones municipales para protestar contra la concesión de indultos a los condenados del ‘procés’
El partido de Pablo Casado prepara una ofensiva contra el Gobierno ayuntamiento a ayuntamiento. La competición en la denuncia será dura con Vox y Ciudadanos
Llamada a rebato del PP a toda su organización. No habrá pueblo, pequeño o grande, de los 8.000 que hay en España, en cuyo Ayuntamiento el partido conservador deje de presentar una moción contra los indultos que el Gobierno de España piensa otorgar a los condenados por el procés. La competición en la denuncia será dura con Vox y con Ciudadanos, aunque el partido ultra quiere llevar la voz cantante y exhibir la bandera más g...
Llamada a rebato del PP a toda su organización. No habrá pueblo, pequeño o grande, de los 8.000 que hay en España, en cuyo Ayuntamiento el partido conservador deje de presentar una moción contra los indultos que el Gobierno de España piensa otorgar a los condenados por el procés. La competición en la denuncia será dura con Vox y con Ciudadanos, aunque el partido ultra quiere llevar la voz cantante y exhibir la bandera más grande al llamar a sus partidarios a que salgan a la calle. No hay marcha atrás por parte de Pedro Sánchez, a pesar de la inquietud interna. Su apuesta es firme y de largo recorrido, señalan en su entorno.
La operación de firmas por toda España contra el nuevo Estatuto de Cataluña que el PP de Mariano Rajoy impulsó en 2006 no es opción política en 2021 como forma de protesta. La presencia de militantes del PP en todas las ciudades de España con mesas plegables con la petición de firmas contra aquel proyecto de Estatut “no fue una decisión acertada”, señalan fuentes populares. Desde hace años, en el PP se asentó la doctrina de que muchos catalanes vivieron esa petición de firmas como “una agresión”. Los populares no harán seguidismo de Vox. Ciudadanos convocará protestas en las plazas catalanas.
Pasó el tiempo y llegó el desafío soberanista. En esta ocasión, a la greña contra los independentistas, pero el PP tampoco siguió a quienes realizaban acciones vistosas en la calle. Sus dirigentes no secundaron a Ciudadanos en sus batidas para quitar los lazos amarillos con los que el independentismo inundó calles, playas, árboles y mobiliario urbano. La batalla se desplegó en el Parlament y en las Cortes.
En estos momentos de preparativos de las protestas no habrá unidad de acción en el campo de la derecha, la ultraderecha y el centro. Cada cual llevará sus iniciativas aunque unos se las voten a otros. En el Parlamento y en los Ayuntamientos. Aún está por decidir si también generan ese campo de enfrentamiento con los socialistas en los Parlamentos regionales.
La competición se llevará también en el campo jurídico para ver quién encuentra más resquicios para la denuncia. Sobre todo el Consejo de Ministros caerá una querella criminal de Vox por los efectos administrativos que puedan tener los indultos. Después, el partido de Santiago Abascarl recurrirá a la vía penal. No ha habido otro Gobierno que haya sido más amenazado que este de terminar en prisión. Así ha sido durante la pandemia, por la parte de gestión que le toca al Gobierno central. El frente de batalla ahora se centra en los indultos.
El Gobierno se prepara para hacer frente a la decisión política más difícil desde que alcanzó el poder. Pero seguirá adelante. En el Ejecutivo de Pedro Sánchez no se cree que indultar a los condenados del procés tenga efectos inmediatos y milagrosos, pero la aspiración es que se produzcan a medio y largo plazo. ¿Cuáles serán los efectos? Tampoco están muy claros.