La ‘fosa de la cultura’, la 114 de Paterna, se abre el lunes para recuperar a represaliados del franquismo
Se iniciará el proceso para exhumar los cuerpos de las 197 personas que fueron fusiladas por las tropas franquistas en el verano de 1940
La fosa 114 del cementerio de Paterna (Valencia), conocida como ‘fosa de la cultura’ por la cantidad de personalidades que yacen allí relacionadas con el mundo del arte, se abrirá el próximo lunes 3 de mayo. Así se iniciará el proceso para recuperar los cuerpos de las 197 fusilados por las tropas franquistas en el verano de 1940 y enterrados en el lugar. Entre los asesinados, se encontraban miembros de ...
La fosa 114 del cementerio de Paterna (Valencia), conocida como ‘fosa de la cultura’ por la cantidad de personalidades que yacen allí relacionadas con el mundo del arte, se abrirá el próximo lunes 3 de mayo. Así se iniciará el proceso para recuperar los cuerpos de las 197 fusilados por las tropas franquistas en el verano de 1940 y enterrados en el lugar. Entre los asesinados, se encontraban miembros de la revista satírica La Traca, maestros, políticos, periodistas, escritores y artistas.
La apertura de la fosa sido impulsada por la Asociación de Familiares de Víctimas de la Fosa 114 de Paterna, cuyos representantes han anunciado que asistirán al acto del lunes, con el apoyo de la Diputación de Valencia, la institución que coordina y sufraga las actuaciones para recuperar restos de represaliados del franquismo a través de la delegación de Memoria Histórica, dirigida por Ramiro Rivera. El abogado Eduardo Ranz, especialista en procesos legales de memoria histórica, califica estos actos como un “triunfo de la democracia y de la memoria” y recuerda que este proceso lleva diez años en marcha.
Ranz lamenta las trabas procesales que los juzgados de instrucción han puesto a los representantes de los familiares pero celebra el informe favorable de la Fiscalía General del Estado en memoria histórica: “Es positivo incorporar a un Fiscal de Sala que pueda denunciar los crímenes del franquismo. Con esa herramienta, desde el ministerio Público se podrían investigar ejecuciones como las que ocurrieron en Paterna, aún hoy, sin realizar la indagación judicial necesaria”.
Matías Alonso, el Coordinador del Grupo Recuperación de la Memoria Histórica en Valencia, explica que esta fosa quiso ser “una especie de escarmiento a la sociedad y al mundo de la cultura, la judicatura y la política valencianas” y es emblemática “por el contenido que tiene, por quién está dentro de ella”. La historiadora Esther López Barceló, experta en memoria histórica, señala que estas iniciativas son “el doble de necesarias por el impacto que genera de reafirmación de los valores democráticos”.
Alonso ha resaltado el número de cuerpos depositados en esta fosa, la “más numerosa” en número de cadáveres, con “un total de 197 personas” procedentes de 66 pueblos. Ha precisado que 31 fueron fusiladas el 28 de junio de 1940. Este fue el caso del editor de La Traca, Vicent Miquel Carceller, y del magistrado de la Audiencia Provincial de Valencia Luis Cisneros. Ambos formaban parte del grupo de 31 personas que fueron fusiladas el 28 de junio de 1940 en Paterna y enterradas en dicha fosa.
Las víctimas reclaman justicia
Entre los asesinados estaba el secretario del Ateneo Mercantil de Valencia, Isidro Escandell, militante socialista y también vicepresidente de la Diputación de Valencia. A sus restos en la fosa se suman los de maestros y el alcalde de la localidad de Foios, entre otros primeros ediles.
Manuel Contreras García fue uno de los asesinados. Su nieto, Carlos Contreras, que ha sido secretario de la Asociación de Familiares de Víctimas, considera que la apertura de la fosa este lunes es un acto que genera “mucha ilusión y emoción” entre los familiares de quienes se encuentran enterrados en el lugar, “después de todos los obstáculos encontrados por el camino y de estar años peleando con esto”. Para él, es “una pena” que no puedan ver cómo se recuperan los restos los hijos de los represaliados, al haber fallecido ya. “Nosotros somos ya los nietos y nietas. Nuestros padres no lo pueden ver”, señala. Y explica que su abuelo paterno, pintor mural de la localidad valenciana de Godella, fue detenido cuando era concejal del ayuntamiento. Pero por poco tiempo. “Solo 23 días, los 23 últimos antes de acabar la Guerra Civil”, precisa. Aquel afiliado a Izquierda Republicana, “el partido de Manuel Azaña”, fue detenido por ese motivo. Tras pasar un año en prisión, fue fusilado.
Coincide en apellido con Carmen Contreras, la nieta de Juan Manuel Contreras, otro de los represaliados cuyos restos se cree que están en la fosa. Recuerda ir desde bien pequeña a visitar el lugar con su abuela. “No tenemos sed de venganza, no la queremos de ningún tipo, ni entrar en polémicas. Solo queremos poder rescatar a personas enterradas como perros, identificarlas y que sean enterradas de nuevo con sus familiares”, comentaba en declaraciones al diario Levante el 12 de febrero.
Con este tipo de actos, el Gobierno pretende avanzar en memoria histórica. Los presupuestos generales de 2021 prevén una partida de tres millones de euros para la búsqueda, identificación y dignificación de personas desaparecidas durante la Guerra Civil y la dictadura. Esta suma forma parte del plan cuatrienal de apertura de fosas que prevé la exhumación en 557 enterramientos clandestinos repartidos por el territorio nacional. El año pasado, el Ejecutivo activó un “plan de choque” para paliar la falta de recursos económicos —desde 2013 no se daban subvenciones estatales para estas tareas— , y que ha permitido poner en marcha 114 proyectos de apertura de fosas, con un número estimado de 3.000 víctimas enterradas en ellas.