Los estadounidenses se enamoran de la Europa del terraceo y las calles peatonales
La falta de vivienda asequible, la crisis del Fentanilo, el tráfico infernal. Las grandes urbes norteamericanas están en crisis. Este verano los yanquis que han viajado al viejo continente no han parado de preguntarse en redes por qué sus ciudades no pueden ser como Utrecht o Logroño
El ciudadano estadounidense parece haber llegado a su límite con las urbes de su país. Algunos de los grandes núcleos de población de EE UU atraviesan la crisis más profunda de su historia por culpa de la falta de vivienda asequible, la aparición del fentanilo, la situación de los veteranos de guerra o la falta de estructura médica pública. Las imágenes de zombis de...
El ciudadano estadounidense parece haber llegado a su límite con las urbes de su país. Algunos de los grandes núcleos de población de EE UU atraviesan la crisis más profunda de su historia por culpa de la falta de vivienda asequible, la aparición del fentanilo, la situación de los veteranos de guerra o la falta de estructura médica pública. Las imágenes de zombis deambulando por el Skid Row angelino o de tiendas saqueadas en Filadelfia que recorren las redes desde hace meses se difundieron en origen por cuentas afiliadas a la derecha estadounidense, pero con el tiempo esas estampas dejaron de un lado la denuncia ante la inacción de los gobiernos demócratas —siempre son ciudades demócratas las protagonistas— para mutar en ejemplos de la necesidad que tienen las urbes estadounidenses de una urgente reformulación. Esta empieza, desgraciadamente para quienes viralizaron los vídeos, por reducir el tráfico, aumentar la densidad de población y recuperar el pequeño comercio. Exacto, en hacerse (un poco) más europeas.
La configuración de nuestras ciudades, una mayor exposición a “la vida en la calle”, la integración de los niños en los planes de los adultos… Todo ello, más o menos cliché, ayuda a componer esa visión de Europa como último refugio del buen vivir. “La mezcla de cocinas y paisajes, los beneficios sociales, el equilibrio entre el trabajo y la vida personal, y la preservación de tradiciones hacen que muchos nos preguntemos si la vida sería mejor en Europa”, admite Charles Curkin, editor de ELLE Decor y colaborador de The New York Times. Una confirmación de esta visión podemos encontrarla en TikTok, donde las cuentas de American mums living in Spain se multiplican; Eurosummer fue uno de los mayores trends del verano, y, por supuesto, no podemos olvidar al matrimonio Smith, la pareja estadounidense que se hizo viral explicando por qué están la mar de contentos viviendo en Logroño, inesperado ejemplo de todo lo que una ciudad como Phoenix debería aspirar a ser en 2023.