11 fotos

El paraíso del peluquero Ronnie Stam

El peluquero Ronnie Stam abre las puertas de su casa, que reconstruyó a partir de una cabaña de pescadores en Brasil

Al aire libre. Piscina de la casa que el peluquero Ronnie Stam y su esposa, la interiorista Jan Eleni Lemonedes, reconstruyeron a partir de una cabaña de pescadores en Trancoso, Brasil.
Ronnie Stam con su mujer, la interiorista Jan Eleni Lemonedes y su hija Lola en la piscina de su casa, en Trancoso (Brasil), un antiguo pueblo de pescadores que cautivó a la familia.
Oasis común. La piscina es el espacio que conecta las dos construcciones que componen la vivienda de los Stam. “Es una playa interior que destila exotismo”, asegura el peluquero. Las alfombras, los cojines y los divanes, diseñados por su esposa, le confieren el confort de un salón.
Tiempo de siestas. Cada rincón tiene su función: la de este, con la hamaca como protagonista, está claro.
Luz. El colorido de la casa lo aportan los textiles indonesios, el arte étnico local y algunos objetos de cerámica comprados en rastrillos.
Con vistas. “Con las grandes ventanas de vidrio se tiene la sensación de estar al aire libre”, dice el propietario de la casa, Ronnie Stam.
Neutro. “Queríamos evocar un loft”, explica la dueña, Jan Eleni Lemonedes. Por eso, en toda la casa las paredes son blancas y el suelo es de cemento encerado.
Solo lo necesario. Stam concibió el dormitorio como un remanso de paz. Todo se reduce a la cama. Apenas hay muebles ni adornos.
Sin límites. “La luz y la brisa circulan entre las dos casas gracias a que sus puertas están siempre abiertas”.
En plena naturaleza. “Las plataneras, los árboles de mango y la música de Caetano Veloso recrean un entorno tropical y playero”, asegura Stam.
Sencillez por norma. La alacena de la cocina, diseñada por Stam, está realizada por artesanos locales a partir de viejas maderas recicladas.