La plantilla de Michelin en Lasarte vota el convenio pese al anuncio de bajas
Casi el 60% de los 983 empleados que votaron respaldaron las condiciones laborales
Los trabajadores de Michelin en la planta de Lasarte respaldaron ayer la aporbación de su nuevo convenio en plena resaca del anuncio de la dirección de prejubilar a 400 de sus 1.154 empleados. Votó el 85,1%, es decir, 983, y de ellos 565 aprobaron el articulado del convenio -el 57,47% de los votantes-, mientras que 369 -el 37,53%- lo rechazaron. Los demás fueron votos en blanco y nulos. La práctica totalidad de los miembros del comité de la factoría se habían opuesto al convenio porque amplía la jornada laboral.
El respaldo al nuevo convenio ha resultado todavía más sorprendente ya que...
Los trabajadores de Michelin en la planta de Lasarte respaldaron ayer la aporbación de su nuevo convenio en plena resaca del anuncio de la dirección de prejubilar a 400 de sus 1.154 empleados. Votó el 85,1%, es decir, 983, y de ellos 565 aprobaron el articulado del convenio -el 57,47% de los votantes-, mientras que 369 -el 37,53%- lo rechazaron. Los demás fueron votos en blanco y nulos. La práctica totalidad de los miembros del comité de la factoría se habían opuesto al convenio porque amplía la jornada laboral.
El respaldo al nuevo convenio ha resultado todavía más sorprendente ya que la mayoría del comité (los siete delegados de CCOO, los seis de LAB, los cuatro de ELA y los dos de ESK) habían manifestado su posición contraria al preacuerdo logrado con la empresa. Sólo UGT (tres representantes) y el sindicato de oficinas CSI (uno), hicieron campaña a favor. El resultado es vinculante para todas las centrales.
Quizá ha pesado que el referéndum se celebrase apenas un día después de conocerse la decisión del grupo Michelin de reestructurar todas sus líneas de producción en Europa. Esta reordenación va a suponer el cierre de una planta en Francia, con casi 900 trabajadores, y la prejubilación de 1.500 empleados en España, de ellos 400 en Lasarte.
Fuentes de CC OO y de LAB creen que el anuncio ha sido premeditadamente lanzado esta misma semana para crear un ambiente de incertidumbre y decantar los votos a favor del convenio.
Para UGT, sin embargo, se trata de un varapalo a la mayoría sindical en la planta, pero exclusivamente porque los trabajadores "han comprendido que se trata de un acuerdo positivo".
El acuerdo da estabilidad a la empresa prácticamente durante todo el plan de ajuste. El convenio dura hasta 2010 y la reestructuración llegará hasta 2011. En materia salarial, los empleados recibirán una subida del 2,2% a la firma y al finalizar cada año de los dos primeros se les compensará con el IPC más un 0,2%. Los dos últimos se corregirán con el IPC más el 0,3%.
El principal problema ha sido la jornada. Los 520 trabajadores que están en el turno de lunes a domingo trabajarán 18 horas más a cambio de 466 euros anuales. El resto, los que están en el turno de lunes a viernes, reducen 16 horas la jornada.
Para UGT, este acuerdo "hay que verlo en su globalidad, porque además se garantiza la continuidad de todos los cerca de 300 que tienen contrato de relevo y de los 60 eventuales, además de mejorar aspectos como la conciliación de la vida laboral y la familiar".
CC OO, ELA y LAB ven insostenible firmar un convenio que incrementa la jornada laboral después de "los esfuerzos y prolongada lucha sindical de varias décadas que ha costado llegar a la actual situación".