Agricultura, construcción y hostelería son las actividades con más inmigrantes contratados

Andalucía es una de las comunidades que soporta más paro en España. Pero desde el año 2000, las diferencias con sus vecinos se han recortado. Al mismo tiempo que más gente accedía a un empleo, los idiomas y acentos que se oyen en los tajos también han cambiado. Pero no en todos los ámbitos. Sólo en aquellos sectores en los que los trabajadores autóctonos han decidido que ya no les resultaba atractivo, por razones salariales o por la dureza de la labor. Sus puestos han sido cubiertos por inmigrantes. Este proceso se ha centrado en el trabajo agrícola, la construcción y la hostelería.

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Andalucía es una de las comunidades que soporta más paro en España. Pero desde el año 2000, las diferencias con sus vecinos se han recortado. Al mismo tiempo que más gente accedía a un empleo, los idiomas y acentos que se oyen en los tajos también han cambiado. Pero no en todos los ámbitos. Sólo en aquellos sectores en los que los trabajadores autóctonos han decidido que ya no les resultaba atractivo, por razones salariales o por la dureza de la labor. Sus puestos han sido cubiertos por inmigrantes. Este proceso se ha centrado en el trabajo agrícola, la construcción y la hostelería.

Las cifras de la Consejería de Empleo de la Junta indican que, en septiembre de 2006, había 191.034 trabajadores extranjeros afiliados a la Seguridad Social (SS). El principal sector económico elegido es el agrícola, en el que 39.496 personas estaban dadas de alta a finales del verano. La construcción absorbía a 29.894 personas y 24.110 la hostelería. 25.323 trabajadores inmigrantes eran autónomos. Tras la actividad agrícola, la construcción y la hostelería, los sectores en los que se ha contratado más mano de obra foránea ha sido en el comercio (15.745 trabajadores), las actividades inmobiliarias (14.909) y las industrias manufactureras (7.196).

Para algunos investigadores estas cifras corroboran la idea de que la mano de obra inmigrante se está especializando. Así lo cree Manuel Alejandro Cardenote, profesor de Economía Regional de la universidad Pablo de Olavide de Sevilla. "Alrededor del 22% de los afiliados extranjeros a la SS en Andalucía están en el sector agrario, cuando este sector no supera el 6% de la actividad económica. En la construcción, a pesar del importante peso que tiene, se da menos esta especialización laboral, a diferencia de lo que ocurre en el resto de España en el mismo sector".

El sector agrícola es el más demandado por los inmigrantes en busca de empleo. Un informe del Junta de diciembre de 2005 indicaba que las profesiones más solicitadas eran principalmente la de peón o trabajador agrícola; seguidas por la de limpiador, camarero, peón de la construcción y dependiente de comercio. De cada cien personas extranjeras demandantes de empleo, 30 proceden del Magreb, 25 de la Unión Europea (UE) y 25 de Suramérica. En el mismo informe se señalaba que los principales países de procedencia de las personas extranjeras demandantes de empleo en Andalucía eran Marruecos (28%), Ecuador (7%), Colombia (7%), Italia (5,4%) y Argentina (5%). La nacionalidad marroquí fue la de mayor número de contratos en todas las provincias andaluzas, excepto en Huelva, donde la mayoría de las personas extranjeras contratadas fueron de nacionalidad rumana, para trabajar principalmente en los cultivos de fresas y cítricos.

El fenómeno tiene también sus sombras. El sindicato Comisiones Obreras ha detectado en los últimos meses que ha aumentado el desempleo justamente en estos dos sectores en los que más personas inmigrantes trabajan. "Esto es preocupante en la medida en la que no se pueda trasladar en un futuro a estas personas inmigrantes a otros sectores", afirma Rosa Berges, secretaria de Políticas Sociales y Migraciones de CC OO en Andalucía.

Otras iniciativas que deben tomar las administraciones son, según este sindicato, la creación de mejores políticas sobre los inmigrantes para favorecer su integración en el mercado laboral.

La Junta de Andalucía ha promovido dos planes integrales de apoyo a los inmigrantes. El que está vigente, el II Plan Integral para la Inmigración en Andalucía 2006-2009, aprobado el mes de mayo, destinará 1.177 millones de euros a medidas para la integración de este colectivo en la sociedad andaluza. El plan contempla medidas como la asistencia personalizada y los servicios de interpretación de idiomas del Servicio Andaluz de Empleo (SAE); la adaptación de todos los programas de empleo (incluido el de la Oficina Virtual del SAE) a la población extranjera o la elaboración periódica de un catálogo de ocupaciones de difícil cobertura a disposición de la población inmigrante.

La atención del SAE incluye el servicio Andalucía Orienta, que ofrece asesoramiento a todo demandante de empleo que, además de inscribirse en el registro del paro, busque algún tipo de orientación laboral.