Las ONG creen que la inmigración es el mayor reto que tiene Cataluña

El año 2002 no fue bueno para los derechos humanos en todo el mundo, y Cataluña no fue la excepción. Así lo creen los responsables de las principales organizaciones sociales que actúan en Cataluña y que ayer destacaron la inmigración y las prisiones como los ámbitos donde más ha retrocedido el respeto a los derechos fundamentales. Por el contrario, la Federación Catalana de ONG de Derechos Humanos considera que en materia de solidaridad sí se ha avanzado.

Por primera vez, la federación ha elaborado una lista en la que se destacan los ámbitos en los que ha habido más mejoras y en qué mat...

El año 2002 no fue bueno para los derechos humanos en todo el mundo, y Cataluña no fue la excepción. Así lo creen los responsables de las principales organizaciones sociales que actúan en Cataluña y que ayer destacaron la inmigración y las prisiones como los ámbitos donde más ha retrocedido el respeto a los derechos fundamentales. Por el contrario, la Federación Catalana de ONG de Derechos Humanos considera que en materia de solidaridad sí se ha avanzado.

Por primera vez, la federación ha elaborado una lista en la que se destacan los ámbitos en los que ha habido más mejoras y en qué materias se ha retrocedido. El presidente de la Federación Catalana de ONG, Francesc Casares, considera que esta clasificación, aunque no es "científica" sí muestra los ámbitos que considera "que están más abandonados". "Se trata de comunicar a la gente qué colectivos ven escuchadas sus demandas y hacer que las organizaciones especializadas en este ámbito analicen la situación".

- El gran asunto pendiente. Así se refiere el informe a los problemas de los inmigrantes, a juicio de las ONG el principal reto que tiene ante sí la sociedad catalana. El documento destaca que la paralización de la práctica totalidad de vías de regularización de extranjeros "ha generado una bolsa de personas en situación irregular que no ha dejado de aumentar". Paralelamente, la fundación Ficat, especializada en atender a los menores inmigrantes desamparados, alerta de un aumento de la presencia de niñas de los países del Este en las calles de las ciudades catalanas.

- Prisiones al borde del colapso. La situación en las prisiones catalanas no deja de empeorar a causa de la masificación que sufren. Justícia i Pau considera que los centros penitenciarios "son viejos, obsoletos" y sobremasificados. La población reclusa a finales del año pasado ascendía a 6.900 personas, cuando la capacidad teórica de los centros no supera las 5.700 plazas.

- Derechos civiles en retroceso. "Aunque en Cataluña no se da ningún tipo de persecución en el campo de las ideas, sí se observa que se intenta dejar al margen a los considerados políticamente incorrectos, como ocurre con el movimiento antiglobalizador, muy fuerte en Cataluña".

- Recortes laborales. La huelga general del 14 de junio de 2002, que obligó al Gobierno a retirar algunos de los puntos más polémicos del decretazo, es vista como "una pequeña victoria" por parte de las ONG.

- Homosexualidad. En Cataluña, como en Francia, Alemania o Bélgica, las parejas homosexuales siguen teniendo reconocidos un nivel de derechos y obligaciones sensiblemente inferiores a los del matrimonio civil, y apenas se está avanzando.

- Unos más iguales que otros. Las asociaciones feministas consideran 2002 como un año "de estancamiento", como si después de unos años con mejoras sustanciales se les dijera: "Hasta aquí habéis llegado".

- Derechos sociales. La falta de vivienda en las grandes ciudades es el principal problema que advierten las ONG en este ámbito, por lo que aseguran que el de la vivienda "es un derecho vulnerado".

- Gitanos al margen. A menudo se presenta Cataluña y su capital, Barcelona, como un ejemplo de multiculturalidad. Sin embargo, algunas de las ONG que han elaborado el informe critican "el doble lenguaje" de las administraciones y que "este supuesto multiculturalismo no va más allá del folclorismo".

- Mejoras en medio ambiente. A pesar de la crisis del Prestige, las ONG consideran que 2002 sirvió para aumentar la sensibilización ambiental entre la población, sobre todo con la protesta contra el Plan Hidrológico Nacional.

- Solidaridad en buena forma. "Aunque quieran tacharnos de insolidarios, la salud de la población en materia de solidaridad es bastante buena", asegura el informe, que destaca que en Cataluña existen 5.600 entidades sociales sin ánimo de lucro

y la elevada participación ciudadana en las marchas antiglobalización.