CARTAS AL DIRECTOR

Evitar una injusticia

Tenemos el agrado de dirigirnos a nuestros colegas y amigos a fin de exponerles la situación por la que atraviesa en España nuestro hijo Francisco Castorina, de 20 años de edad. Él se encuentra internado en el Centro de Internamiento de la Berneda, Policía Migratoria, de Barcelona, junto a los inmigrantes ilegales de diversas nacionalidades.

Su detención ocurrió el viernes 15 de marzo de este año 2002, a cinco cuadras de donde se producía una actividad previa a la marcha contra la globalización del día siguiente, sábado. En dicha fecha se vencía su habilitación para permanecer como turi...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Tenemos el agrado de dirigirnos a nuestros colegas y amigos a fin de exponerles la situación por la que atraviesa en España nuestro hijo Francisco Castorina, de 20 años de edad. Él se encuentra internado en el Centro de Internamiento de la Berneda, Policía Migratoria, de Barcelona, junto a los inmigrantes ilegales de diversas nacionalidades.

Su detención ocurrió el viernes 15 de marzo de este año 2002, a cinco cuadras de donde se producía una actividad previa a la marcha contra la globalización del día siguiente, sábado. En dicha fecha se vencía su habilitación para permanecer como turista.

A partir de entonces ha sido privado de su libertad, se le ha abierto una causa por 'estar indocumentado, no tener medios de vida y con peligro de huir de la justicia'.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Por otra parte, se le ha abierto también una causa penal por la que se lo acusa de 'participar de modo ilícito en una manifestación, con armas u objetos contundentes'. Nuestro hijo Francisco ha manifestado desde el principio que fue la policía la que le colocó tales objetos, habiendo pedido su abogada pruebas dactiloscópicas para probarlo.

Además, nos permitimos señalar que esta situación es una clara discriminación contra extranjeros, ya que mal podría ir a renovar sus papeles estando detenido, dado que su permiso vencía el mismo día de su detención.

Por otra parte, es completamente abusivo que se mantenga su internamiento por no tener sus papeles en regla. Nuestro hijo será juzgado el día 9 de abril y podría ser condenado de uno a cuatro años de prisión.

Tenemos la sospecha fundada de que lo que se está haciendo con nuestro hijo es parte de una campaña dirigida a penalizar y disuadir a quienes pretendan manifestarse contra la globalización. Tenemos que evitar esta injusticia.

Archivado En