La clienta que envió faxes desde Moncloa aún no ha recuperado toda su inversión

María Lirios Reig, la clienta de Gescartera que reclamó la devolución de su inversión desde el fax de la Secretaría General de Presidencia del Gobierno, reconoció ayer, en una carta enviada a este periódico, que fue una funcionaria amiga suya que trabaja en Moncloa, llamada María Soledad Villegas, quien envió los faxes, aunque puntualizó que por ahora, no ha logrado recuperar toda su inversión. Según María Lirios Reig, las siglas 'MAR' que aparecen en la línea de mensaje del fax corresponden a un 'martes' de agosto y no a marzo.

La carta, remitida por fax y cuya recepción fue anticipada...

María Lirios Reig, la clienta de Gescartera que reclamó la devolución de su inversión desde el fax de la Secretaría General de Presidencia del Gobierno, reconoció ayer, en una carta enviada a este periódico, que fue una funcionaria amiga suya que trabaja en Moncloa, llamada María Soledad Villegas, quien envió los faxes, aunque puntualizó que por ahora, no ha logrado recuperar toda su inversión. Según María Lirios Reig, las siglas 'MAR' que aparecen en la línea de mensaje del fax corresponden a un 'martes' de agosto y no a marzo.

La carta, remitida por fax y cuya recepción fue anticipada a la dirección de este periódico desde el palacio de La Moncloa, va firmada conjuntamente por María Lirios Reig y la funcionaria de Presidencia María Soledad Villegas, a quien el día anterior Reig señaló como a 'un amigo' al que no deseaba comprometer. En la conversación mantenida con este diario el lunes, la señora Reig no hizo mención a ninguno de los extremos que anoche puntualizó en su carta.

Reig explica en su carta que invirtió por primera vez sus ahorros en Gescartera en 1993, debido al consejo de una amiga que trabajaba como empleada de Gescartera. 'Además de María Lirios invirtieron una hermana y varias amigas, entre ellas María Soledad Villegas, funcionaria auxiliar administrativo destinada en La Moncloa desde 1983. Su inversión en Gescartera se realizó en 1998 y ascendió a dos millones de pesetas'.

'En julio de este año empieza a aparecer en la prensa el caso Gescartera. El 31 de julio nos personamos en las oficinas de Gescartera. Al estar precintadas, nos dirigimos a la CNMV donde un asesor técnico nos dijo que debíamos solicitar el reintegro de las cantidades y pedirlo por fax a Gescartera. Preparamos los faxes que se enviaron desde la Secretaría Ggeneral el martes 14 de agosto'.

Según Reig, las siglas 'MAR' que aparecen en los fax remitidos desde Moncloa significa que se enviaron 'un martes', y no en el mes de 'marzo', como informaron a este periódico las fuentes de la investigación que vieron los fax incautados en la sede de Gescartera.

María Lirios Reig añade que no ha recuperado 'absolutamente nada de su dinero, 'salvo los fondos de inversión' que cobró, 'como otros afectados, a finales de julio, con una pérdida de un millón de pesetas'.

Reig niega que dispusiera en marzo de información que le aconsejara salir de Gescartera, ya que el 30 de dicho mes invirtió un millón más. 'Así pues', continúa, 'sólo ha habido dos personas afectadas por una estafa, que han perdido sus ahorros. 'Lamentamos mucho haber utilizado incorrectamente un fax de la Secretaría General de la Presidencia y que esto haya dado lugar a esta penosa confusión', añade Reig y María Soledad Villegas.

Entretanto, ayer, el fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, reclamó al Juzgado Central de Instrucción número 3 de la Audiencia Nacional los faxes remitidos a Gescartera desde la Secretaría General de Presidencia del Gobierno, informa José Yoldi.

En el juzgado se intentaba ayer localizar en los primeros tomos del sumario los documentos remitidos desde la Secretaría General de Presidencia aunque a las tres de la tarde todavía no habían sido encontrados.

Por otro lado, la mayor parte de los empleados de Gescartera Dinero han percibido la nómina correspondiente al mes de julio que ha supuesto un desembolso de unos 4,5 millones de pesetas, informa Efe. Entre la docena de empleados que han percibido su salario, cuya media ronda las 300.000 pesetas, no figura ninguno de los que permanecen como imputados, como Antonio Camacho, Pilar Giménez-Reyna, José María Ruiz de la Serna y Francisco Javier Sierra Flor.

El importe de la nómina ha sido obtenido de la cuenta del Banco Zaragozano, donde están depositados los únicos fondos encontrados en Gescartera Dinero, y que ascendían a unos 300 millones de pesetas. El pago ha sido ordenado por los interventores designados por la CNMV tras la intervención de la agencia. Los trabajadores del resto del grupo, Gescartera Gestión y Gescartera Pensiones, no han cobrado las nóminas ya que, al no estar intervenidas estas empresas carecen de un gestor que se haga cargo de su administración.