Antonio Pernas aúna con éxito geometría y colores primarios La piel protagoniza un desfile lleno de rigor y buena costura

En el desfile de la tarde de ayer en el antiguo Museo de Arte Contemporáneo, Antonio Pernas puso muy alto el listón de la calidad en la primera manifestación de los disidentes de la Pasarela Cibeles que se agrupan en la Asociación Española de Creadores de Moda. La piel, el denim evolucionado y el algodón engomado, junto a la nobleza de la lana, fueron la fuente material.

El en principio imponente y desangelado salón sirvió como un lienzo desnudo para que Antonio Pernas desplegara toda una teoría alrededor de la moda de síntesis. En el suelo, unas quebradas líneas con los colores primari...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

En el desfile de la tarde de ayer en el antiguo Museo de Arte Contemporáneo, Antonio Pernas puso muy alto el listón de la calidad en la primera manifestación de los disidentes de la Pasarela Cibeles que se agrupan en la Asociación Española de Creadores de Moda. La piel, el denim evolucionado y el algodón engomado, junto a la nobleza de la lana, fueron la fuente material.

El en principio imponente y desangelado salón sirvió como un lienzo desnudo para que Antonio Pernas desplegara toda una teoría alrededor de la moda de síntesis. En el suelo, unas quebradas líneas con los colores primarios hacían una demarcación a lo Mondrian por donde discurría el paso de los modelos y en la primera serie ya se vio una rotundidad cromática sin ambages: índigo, amarillo cadnio o limón, rojo cereza y negros profundos; a ello se sumaban la riqueza material y una postura impecable, ese arte de la confección esmerada que hace un maridaje de posibles entre la hilatura y el corte.Los paños nobles y la lana se vieron asociados a los nuevos materiales sin que hubiera nada que rechinara o que desentonara con el efecto final, un control absoluto sobre la gama que le permitía superponer dos amarillos o dos rojos para conseguir un todo geometrista y conceptual, que es finalmente confiar en la materia por sí misma como el pintor en el pigmento.

En la ropa masculina llamaron la atención la gabardina plastificada de gruesa cremallera vista y alto cuello tubo, los pantalones de insinuantes talles bajos y el uso de la piel negra de pelo para un chaleco de cuello Mao o una americana de corte convencional. Para la mujer, chaquetas articuladas en sastre y faldas con un ligero acampanado, siempre rozando la rodilla, daban un aire de sobriedad sin llegar al retro, y la piel con los cantos vivos y teñida de los ya dichos colores primarios se ajustaba al cuerpo con liquidez y solvencia.

El tan manido brillo apareció solamente en dos ocasiones y sin exceso, apenas tratado como un apunte de lujo racionalista de negro sobre negro: una línea que baja en rigurosa vertical.

Por último, una larga falda negra de amplia circunferencia en la que había algo de conventual, acompañada de una cazadora corta, daba y resumía el concepto general de la colección, una de las más conseguidas de la moda española actual que, haciendo gala al título de Más es igual a menos, propone una sofisticación donde el adorno es la materia.

Hoy, en el mismo espacio, podrá verse el esperado desfile de Roberto Verino a las 19.00 horas y antes Devota & Lomba mostrará su propuesta a las 13.00 horas en el madrileño Locationibus Domus. Mañana cerrarán estas jornadas de moda Ángel Schlesser, en el Museo de Ciencias Naturales, y Jesús del Pozo, en el Colegio Oficial de Médicos de Madrid.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En