Una vivienda de los nómadas de Mongolia centra una exposición
El patio interior del Museo Nacional de Antropología, en su sede del Museo Nacional de Etnología, de Madrid (calle Alfonso XII, 68), está ocupado por un ger o yurta, una vivienda característica de los nómadas de Mongolia. El ger, de forma circular, de unos seis metros de diámetro, tiene una estructura ligera y plegable, de palos de madera entrecruzados, que se cubre con fieltro grueso. El mismo recinto se utiliza para cocinar, comer y dormir.
Junto con la vivienda, la exposición, cuyo comisario es Francisco de Santos, conservador de las colecciones asiáticas del museo, se ha reunido...
El patio interior del Museo Nacional de Antropología, en su sede del Museo Nacional de Etnología, de Madrid (calle Alfonso XII, 68), está ocupado por un ger o yurta, una vivienda característica de los nómadas de Mongolia. El ger, de forma circular, de unos seis metros de diámetro, tiene una estructura ligera y plegable, de palos de madera entrecruzados, que se cubre con fieltro grueso. El mismo recinto se utiliza para cocinar, comer y dormir.
Junto con la vivienda, la exposición, cuyo comisario es Francisco de Santos, conservador de las colecciones asiáticas del museo, se ha reunido una serie de acuarelas con tipos y escenas de Mongolia de diversos artistas contemporáneos. Los materiales presentes en la muestra proceden de una reciente donación de la familia Ruedas.
En unos carteles que ilustran la exposición sobre la vida de los nómadas de Mongolia se informa sobre. las características de la vivienda, que en el mismo lugar se puede visitar, con la estufa para cocinar, las mamparas de caña, las camas con coberturas de fieltro y piel y almohadones de lana de cordero, los cofres de piel y madera para las reservas de cereales, azúcar y té. También se señala el fenómeno de los pastores nómadas en el centro de Asia, que se desplazan en busca de pastos para sus rebaños de corderos, vacas y caballos.