La cumbre del clima de Kioto se inaugura sin concretar qué gases hay que reducir

Hoy se inaugura en Kioto (Japón) la cumbre del clima, que pretende alcanzar un acuerdo mundial para reducir las emisiones a la atmósfera de gases de efecto invernadero responsables del aumento de la temperatura media del planeta. EE UU, el mayor contaminador, propone estabilizar en el 2012 la emisión al nivel de 1990. La cumbre se abre sin concretar siquiera qué gases hay que reducir. Participan 9.000 personas, entre delegados de más de 150 países, observadores, ONG. La delegación española la presidirá Isabel Tocino.

ENVIADA ESPECIAL

La reunión -denominada oficialmente Tercer...

Hoy se inaugura en Kioto (Japón) la cumbre del clima, que pretende alcanzar un acuerdo mundial para reducir las emisiones a la atmósfera de gases de efecto invernadero responsables del aumento de la temperatura media del planeta. EE UU, el mayor contaminador, propone estabilizar en el 2012 la emisión al nivel de 1990. La cumbre se abre sin concretar siquiera qué gases hay que reducir. Participan 9.000 personas, entre delegados de más de 150 países, observadores, ONG. La delegación española la presidirá Isabel Tocino.

ENVIADA ESPECIAL

La reunión -denominada oficialmente Tercera Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas para el Cambio Climático- hace prever tensas negociaciones para llegar a compromisos concretos en cantidades y plazos de reducción de emisiones, con la aspiración de un acuerdo vinculante contra la amenaza de cambio climático advertida por los científicos para el próximo siglo. Bajo la Convención sobre el Cambio Climático, adoptada en la cumbre de Río y firmada ya por 171 gobiernos, los países desarrollados -responsables de las emisiones industriales- acordaron reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero, pero el acuerdo no es vinculante ni especifica cuánto ni cuándo reducir.Ni siquiera se ha establecido cuáles son gases que limitar. Ayer continuaron hasta última hora los debates en la sesión plenaria del grupo de trabajo con el mandato de negociación recibido en 1995. Hay un consenso sobre reducir el dióxido de carbono, el metano y el óxido de nitrógeno, resumió el presidente del grupo, el argentino Raúl Estrada. Pero los debates mostraron que no hay acuerdo para ampliar esa lista a seis gases o para incluir los compuestos clrofluorocarbonados (CFC). Las posturas más conciliadoras indicaban que podrían regularse ya las emisiones de los tres primeros -entre ellos el C02, producido sobre todo por la quema de combustibles fósiles en la industria y el carbón- y posponer la inclusión de otros gases cuya contribución al calentamiento está menos definida.

Tramo técnico

La bienvenida a los delegados e inaguración oficial corre hoy a cargo del ministro de Asuntos Exteriores de Japón, Keizo Obuchi. Inmediatamente se formarán los grupos de trabajo y de negociación. Estos grupos y los contactos entre delegaciones serán los protagonistas en el denominado tramo técnico, durante toda esta semana, en la que se fijarán posiciones para entrar el lunes próximo en el tramo ministerial, que debería concluir con un acuerdo sobre un protocolo vinculante de reducciones de gases de efecto invernadero en plazos fijos. Para asistir al tramo ministerial acudirá la ministra española de Medio Ambiente Isabel Tocino.Además, las delegaciones deben abordar puntos clave como los mecanismos de financiación y vigilancia de los acuerdos y otros aspectos no menos espinosos: si todos los países desarrollados deben asumir idénticos objetivos, si se aceptan mecanismos de compraventa de cuotas de emisiones entre países y si las, políticas y medidas a tomar serían comunes.

Por el momento se pretende que los países desarrollados salgan de Kioto con compromisos de reducción de emisiones, mientras que los en vías de desarrollo podrían asumir compromisos de limitación en futuras negociaciones. No evita esto la preocupación de muchos, al considerar que países como China o India van ser importantes emisores de gases si siguen estrategias clásicas de crecimiento económico basado en alto consumo energético con tecnologías de baja eficacia.

Por ahora las ofertas de las delegaciones clave en Kioto son las siguentes: EE UU, el mayor emisor de gases de efecto invernadero (un 24,5% del total mundial), propone estabilizar en el 2008 o 2012 las emisiones al nivel de 1990; la UE lleva una propuesta de reducción del 20% en el 2010, también respecto a 1990, con un reparto intracomunitarlo de las cargas que permite aumentar las emisiones a algunos países menos industrializados (por ejemplo a España, hasta un 17%). Japón se limita a un 5110 y la Federación Rusa propone que cada uno defina sus reducciones para que el resultado global sea una disminución del 3%. La propuesta más avanzada, coincidente con la reivindicación mínima de los ecologistas, pide para el 2005 una reducción del 20% respecto a 1990.

Con tal disparidad, las negociaciones se presentan muy duras. 1.500 personas integran las delegaciones de más de 150 países en Kioto. La mayor es Japón, con más de 550 delegados. También están 4.000 observadores y miembros de organizaciones no gubernamentales. La importancia de la cita del clima ha convocado a casi 4.000 periodistas de 402 medios de comunicación de todo el mundo.

La delegación española, integrada en el grupo de la UE dirigido por Luxemburgo, está formada por cuatro personas en el inicio de la conferencia: Dolores Carrillo, directora general de Calidad Ambiental; Iñigo Ascasibar, consejero técnico del Ministerio de Medio Ambiente; Arturo Spiegelberg, de Asuntos Exteriores; y Luis Mas, de Industria y Energía. La delegación aumentará hasta ocho personas.