EDUCACIÓN

Inversión educativa, un capitulo a la baja

Desde 1993, España ha ido recortando ligeramente el porcentaje del PIB destinado a la enseñanza

Asociaciones de padres y organizaciones y sindicatos de profesores firmaron la pasada semana una declaración en favor de la reforma educativa. Promovido por la Fundación Encuentro, dicho documento no sólo pedía el respaldo de la ministra Esperanza Aguirre a la Logse, sino que también barajaba cifras concretas. Se pedía un plan quinquenal por el cual se elevaría al 6% del PIB (Producto Interior Bruto) la inversión pública en educación. Traducido a pesetas: 600.000 millones para la enseñanza no universitaria y 300.000 para la superior. Una cantidad que, según los firmantes, colocaría a nuestro p...

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Asociaciones de padres y organizaciones y sindicatos de profesores firmaron la pasada semana una declaración en favor de la reforma educativa. Promovido por la Fundación Encuentro, dicho documento no sólo pedía el respaldo de la ministra Esperanza Aguirre a la Logse, sino que también barajaba cifras concretas. Se pedía un plan quinquenal por el cual se elevaría al 6% del PIB (Producto Interior Bruto) la inversión pública en educación. Traducido a pesetas: 600.000 millones para la enseñanza no universitaria y 300.000 para la superior. Una cantidad que, según los firmantes, colocaría a nuestro país entre los más desarrollados de la Unión Europea (UE) en materia educativa y permitiría hablar de calidad una vez terminada la inversión en nuevos centros.El porcentaje del Producto, Interior Bruto (PIB) destinado a educación mide la prioridad que cada gobierno otorga a este capítulo. Representa la proporción de la riqueza nacional destinada a la formación de sus ciudadanos y se mantiene o asciende de una manera regular siempre que no haya grandes quiebros en la economía. En términos generales, los estudios elaborados por la UNESCO y la OCDE señalan que coincide el hecho de una menor inversión en educación con un incremento de la pobreza en un país. En España, el descenso inversor que se ha ido produciendo en los cuatro últimos años se explica, según fuentes ministeriales del anterior Gobierno, por el interés puesto en otras prioridades como las subvenciones al desempleo y la sanidad.

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España, a la baja

Los últimos datos publicados por la OCDE (Organización de Cooperación y Desarrollo Económico, formado por una cincuentena de países), que corresponden a los recogidos en 1993, reflejan que el gasto público español destinado a educación era del 4,5% del PIB, mientras la media de los países de la OCDE más avanzados era del 5,3; igual que la media de la Unión Europea (UE). Los técnicos estiman que hoy en día los países de la UE que otorgan una mayor prioridad a la educación alcanza ese ansiado 6%.

Pero 1993 fue un año de vacas gordas para la educación española. A partir de esa fecha, el porcentaje del PIB fue bajando: En el gasto total (público y privado) descendió del 5,81% en 1993, al 5,67% en 1997, según datos provisionales. Este mismo descenso fue experimentado también por el gasto público en estos años.

Las 18 entidades que firmaron el manifiesto de la Fundación Encuentro, cuyo papel es el de mediador entre los distintos sectores sociales para alcanzar un consenso y que dirige José María Martín Patino, basan su urgencia en la aplicación de la reforma que ya ha cubierto la primaria y comienza este año con la aplicación obligatoria del segundo curso de la ESO. Se necesitan "al menos 600.000 millones de pesetas en la enseñanza no universitaria", reza el documento, para llegar al 6% del PIB.

Entre los firmantes coinciden asociaciones de padres laicas y católicas (CEAPA, CONCAPA), y federaciones y sindicatos de profesores de todo el espectro ideológico (Federación de Religiosos de la Enseñanza -FERE-, CCOO, FETE-UGT, ANPE, Centros de Educación y Gestión, Secretariado de la Escuela Cristiana de Cataluña, Asociación Profesional Serveis Educatus de Catalunya, Asociación de Professores de las Escuelas Cristianas de Cataluña, Confederación de Sindicatos Independiente y Sindical de Funcionarios -CSI-CSFI-, Federación de Sindicatos Independientes de Enseñanza -FSIE-, Confederación de Movimientos de Renovación Pedagógica (MPR), Federación de Enseñanza, Unión Sindical Obrera -USO-, Unión Española de Cooperativas de Enseñanza y Confedeferación Autónoma Nacional de Asociaciones de Estudiantes -CANAE-

900.000 millones

Ese 1,3% del PIB de inversión nueva hasta alcanzar la media del 6% representa 900.000 millones de pesetas, de los cuales 300.000 millones irían a parar a la Universidad. Los cálculos se basan en un PIB estable a lo largo de los cinco años de financiación formulados en el documento.

Los 600.000 millones de gasto público destinados a la aplicación de la reforma cubrirán, según Alvaro Marches¡, exsecretario de Estado de Educación con el Gobierno anterior que se ha adherido al documento de la Fundación Encuentro, inversiones en construcción de nuevos edificios de secundarla (sólo en las 10 comunidades administradas todavía por el Ministerio de Educación quedan pendientes de construcción unos 200 institutos), plantillas de profesores, programas de garantía social (destinados a los alumnos que no superan satisfactoriamente la enseñanza obligatoria) y aplicación de la reforma en términos de calidad a través de una educación obligatoria hasta los 16 años que evite cualquier segregación entre alumnos, además de nuevos programas para financiar la educación infantil.

Promoción de profesorado

Según cálculos de los padres de la Logse, siguiendo la letra de la reforma, el aumento del gasto en profesorado incluye un incremento en la contratación, pero la promoción del profesorado se centra más en un sistema de incentivos a la carrera docente basado en la evaluación y no tanto en las subidas salariales. Además, cuenta con la creación de programas de compensación destinados a conseguir un equilibrio entre las autonomías, primando a las que se encuentran en. condiciones culturales y sociales más desfavorecidas.

Habitualmente, el capítulo de personal representa un 55% del gasto público en primaria y secundaria. El 15% se destina al sistema de conciertos con centros de iniciativa privada. El 17%, al funcionamiento de los centros, y el resto a inversiones de todo tipo para la mejora de la calidad y política de compensaciones.Expertos en el gasto escolar recuerdan que España siempre ha estado por debajo de la media de la UE y bastante distante- de los países más potentes. "Pero si excluimos la educación superior, España se coloca muy cerca de la media de los países de la OCDE", explica José Ginés Mora, profesor titular de análisis económico en la Universitat de Valencia y experto del Instituto de Investigaciones Económicas en la misma ciudad.

Ginés Mora afirma: "Estamos a ocho décimas del gasto medio de la OCDE si excluimos la educación superior. Hasta 1993, España ha estado prácticamente en la medía. Lo que hay que saber es que el sector que se sitúa a gran distancia en comparación con los países más desarrollados de la OCDE es la Universidad".

Optimista, este experto pide "que no se abuse en la demanda de financiación. La situación no está tan mal gracias al esfuerzo de los últimos 10 años. Lo importante es que no se rebaje la inversión en primaria y secundaria una vez que se haya acabado con la construcción de edificios. España es el país que más está gastando en infraestructura. Si se sigue manteniendo el gasto", añade Ginés Mora, "se llegará a una enseñanza de calidad, aunque sabemos que el Gobierno actual no va por ahí".

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