García Márquez se autoexilia en México
El Nobel de Literatura Gabriel García Márquez se ha ido de Colombia y se ha instalado de nuevo en México. La noticia se ha conocido justo cuando en el país se empezaban a organizar mil y una celebraciones por sus 70 años y por los 30 de Cien años de soledad, "la biblia latinoamericana", como la calificó el mexicano Carlos Fuentes. "La situación en Colombia se volvió incómoda, insegura e intranquila para escribir. Me fui a buscar un sitio donde pueda hacer lo que mejor puedo hacer por Colombia, que es escribir" ha manifestado en una entrevista radiofónica.
"Es lo único que voy a acl...
El Nobel de Literatura Gabriel García Márquez se ha ido de Colombia y se ha instalado de nuevo en México. La noticia se ha conocido justo cuando en el país se empezaban a organizar mil y una celebraciones por sus 70 años y por los 30 de Cien años de soledad, "la biblia latinoamericana", como la calificó el mexicano Carlos Fuentes. "La situación en Colombia se volvió incómoda, insegura e intranquila para escribir. Me fui a buscar un sitio donde pueda hacer lo que mejor puedo hacer por Colombia, que es escribir" ha manifestado en una entrevista radiofónica.
"Es lo único que voy a aclarar sobre el tema", añadió el Nobel el jueves a la emisora RCN, que se negó así a explicar más sobre la versión periodística que aseguraba que había tomado la decisión de no regresar mientras permanezca en el poder el presidente Ernesto Samper.En la revista Cambio 16 Colombia, que empezó a circular ayer, se lee entre líneas que detrás de la determinación hay algo más: un inmenso cansancio por la crisis que vive Colombia, envuelta en un largo narcoescándalo que ha dividido al país en dos. En muchas oportunidades se ha buscado a Gabo, como se le conoce familiarmente, de intermediario para enmendar entuertos. La revista, en una larga crónica, salpicada de anécdotas y testimonios de personas cercanas al Nobel, relata la secuencia de amores y desamores entre el novelista y el jefe de Estado. Cuenta la directora de la publicación que a finales de julio de 1995, durante un taller de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano, García Márquez se retiró diciendo: "Desgraciadamente, me tengo que ir porque debo hacer un favor a un amigo". El amigo era Samper, quien buscaba la mediación del novelista ante el fiscal general de la nación para auscultar la situación del Proceso 8.000, como se llama al narcoescándalo, que por ese entonces ya involucraba a la cúpula del Gobierno.
Pero la señal del distanciamiento, según la publicación, llegó en la Semana Santa del 96, durante un almuerzo en Cartagena, días antes de que se produjera el fallo del Congreso, que exoneró al presidente. Gabo comentó que las reformas constitucionales que estudiaba el Gobierno podrían interpretarse como pagos anticipados por el fallo. La respuesta de Samper que que los gaviristas (los seguidores del ex presidente César Gaviria, actual secretario de la Organización de Estados Americanos) le estaban llenando la cabeza de cuentos. Y según la revista, Gabo replicó: "Hazme el favor de respetarme. Porque cuando te doy una opinión que coincide con lo que tú quieres, yo soy el que piensa; y cuando no coincide son tus opositores los que me lavan el cerebro''.
No es la primera vez que Garcia Márquez fija su residencia en México. Fue también su refugio cuando en 1981, en medio del estatuto de seguridad del Gobierno de Julio César Turbay Ayala se sintió amenazado y optó por el camino del exilio. Su decisión de repetir el camino andado ha sorprendido a todos. No hace mucho habíadecidido regresar a la amurallada Cartagena de Indias. Mandó construir "su casa principal" con un estudio inmenso y blanco, que tiene como horizonte el mar. Allí dio vida a la Escuela del Nuevo Periodismo Iberoamericano.
Los columnistas ya empiezan a comentar la opción tomada por Gabo. Como afirma Rafael Santos, "en el mundo entero, la salida de nuestro intelectuál más brillante, cuando más cuestionados estamos, tendrá muchas lecturas".