Un Sorolla inédito se enseña en el Museo de la Pasión de Valladolid

Más de medio centenar de obras pertenecientes al pintor valenciano Joaquín Sorolla se exhiben en la sala del Museo de la Pasión de Valladolid desde ayer y hasta el 15 de octubre en una exposición que por primera vez mostrará todas las facetas que el pintor de la luz cultivó. Las obras proceden en su totalidad de los fondos del Museo Sorolla de Madrid. La exposición no se llevará a otras ciudades y contiene un 50% de obra inédita.

Según los organizadores, la exposición pretende enseñar, a pesar de las dificultades, las épocas perfectamente definidas en la obra de Sorolla, "por lo uni...

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Más de medio centenar de obras pertenecientes al pintor valenciano Joaquín Sorolla se exhiben en la sala del Museo de la Pasión de Valladolid desde ayer y hasta el 15 de octubre en una exposición que por primera vez mostrará todas las facetas que el pintor de la luz cultivó. Las obras proceden en su totalidad de los fondos del Museo Sorolla de Madrid. La exposición no se llevará a otras ciudades y contiene un 50% de obra inédita.

Según los organizadores, la exposición pretende enseñar, a pesar de las dificultades, las épocas perfectamente definidas en la obra de Sorolla, "por lo uniforme de su ascendente curva pictórica, rota y sin conocer el descenso".A pesar de ello, se apuesta con la exposición por el descubrimiento de las distintas etapas del pintor. La primera (1903) está considerada de formación y definida por el propio artista como un tiempo en "alcanzar su ideal". La segunda, entre los años 1903 y 1911, señalada como la etapa de la madurez en la que presenta al mundo su obra, y una tercera, que abarca desde 1911 a 1920 en la que sus obras cobran una gran calidad a pesar de lo condicionado que se encuentra por la realización del encargo de la decoración de la Hispanic Society of America.

Sorolla cultivó el retrato desde sus comienzos como pintor, aunque los temas de sus lienzos empiezan a diversificarse cuando viaja por varias regiones españolas y se dedica al paisajismo.

Pese a que la tendencia pictórica de Sorolla fue pronto barrida a escala internacional por las vanguardias, su personalidad no dejó de interesar lejos de su país.

El artista tuvo una fuerte influencia en la pintura de Estados Unidos y consiguió distinguirse como cultivador de un naturalismo pródigo y elegante, tendencia muy arraigada en el arte occidental de su tiempo.

La exposición, que se presenta en la sala del Museo de la Pasión, está organizada por la Fundación Municipal de Cultura del Ayuntamiento, Caja España y el Ministerio de Cultura.

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