Un banquero en la reserva

Luis Blázquez, banquero en la reserva, es el típico hombre hecho a sí mismo, como su mentor, Alfonso Escámez. Entró en el antiguo Banco Central con 14 años -tiene 56- fue ascendiendo hasta convertirse en director general y consejero. Era hombre de confíanza de Escámez y se encargó durante mucho tiempo del nutrido grupo industrial de la entiadad y de atraer socios extranjeros al banco (la constructora Bouy-gues, la aseguradora UAP y la petrolera Elf Aquitaine, entre otros). En la actualidad, prejubilado del BAnco Central Hispano (BCH), ocupaba varios puestos de consejero en algunas empresas...

Luis Blázquez, banquero en la reserva, es el típico hombre hecho a sí mismo, como su mentor, Alfonso Escámez. Entró en el antiguo Banco Central con 14 años -tiene 56- fue ascendiendo hasta convertirse en director general y consejero. Era hombre de confíanza de Escámez y se encargó durante mucho tiempo del nutrido grupo industrial de la entiadad y de atraer socios extranjeros al banco (la constructora Bouy-gues, la aseguradora UAP y la petrolera Elf Aquitaine, entre otros). En la actualidad, prejubilado del BAnco Central Hispano (BCH), ocupaba varios puestos de consejero en algunas empresas del grupo (Dragados, Cepsa, Mare Nóstrum ... ). Aunque ya no está de consejero del banco todavía mantiene relaciones y es asesor en temas industriales. Blázquez se vio involucrado hace tres años en el caso Macosa. El Banco Central condonó a la empresa Macosa una deuda de 1.500 millones en concepto de intereses de un préstamo cuyo capital había sido ya amortizado. Ese hecho llevó a Blázquez hasta el juez, al que declaró que la condonación se pactó para apoyar al sector siderúrgico.