Los agricultores salvan la sequía por las ayudas y el seguro

Las ayudas comunitarias por hectárea dispuestas con la reforma de la Política Agrícola Común (PAC) para los cultivos herbáceos, así como la indemnizaciones por el seguro integral de cereales salvarán del desastre a los agricultores de las zonas afectadas por la sequía. Estas subvenciones directas que se conceden, además de las medidas aprobadas por el Gobierno para compensar los daños por la sequía, suponen una media de unas 25.000 pesetas por hectárea como ayudas comunitarias directas por superficie. A esta cantidad se sumaría como indemnización entre las 16.000 y las 20.000 pesetas para quie...

Las ayudas comunitarias por hectárea dispuestas con la reforma de la Política Agrícola Común (PAC) para los cultivos herbáceos, así como la indemnizaciones por el seguro integral de cereales salvarán del desastre a los agricultores de las zonas afectadas por la sequía. Estas subvenciones directas que se conceden, además de las medidas aprobadas por el Gobierno para compensar los daños por la sequía, suponen una media de unas 25.000 pesetas por hectárea como ayudas comunitarias directas por superficie. A esta cantidad se sumaría como indemnización entre las 16.000 y las 20.000 pesetas para quienes hayan asegurado sus cosechas.La reforma de la Política Agrícola Común cuya aplicacióncomenzó en 1993, ha supuesto la progresiva reducción de los precios institucionales para producciones como las cerealistas. Pero, para compensar ese recorte de cotizaciones, se inició en la misma fecha el pago de compensaciones directas por hectárea según los rendimientos de cada zona. En el caso de España, eso ha supuesto bajar los precios institucionales de unas 24 a 19 pesetas kilo. Sin embargo, las ayudas directas por hectárea de cereales para esta campaña se sitúan en unas 22.000 pesetas en parcelas con rendimientos medios de 2.500 kilos. Estas compensaciones son más importantes en el caso de las oleaginosas que pueden llegar a las 37.521 pesetas por hectárea, 27.400 por tierra retirada del cultivo ó 57.000 pesetas por hectárea para las másde 500.000 hectáreas dedicadas al trigo duro.

La reforma de la PAC, con reducción de precios y compensación por ayudas directas, podría haber sido negativa para España en el caso de un mercado con grandes cosechas que hundieran las cotizaciones. En condiciones de sequía y falta de producciones, la PAC se ha convertido en una pequeña tabla de salvación para las zonas afectadas al suponer un ingreso seguro que cubre los costes de producción.

Los agricultores cerealistas de las zonas afectadas por la sequía se han podido beneficiar del seguro integral de cereales cuya suscripción recibe subvenciones de la Administración central y los gobiernos regionales. Las indemnizaciones por el seguro integral de cereales comienzan afuncionar en el momento que los rendimientos esperados no superan el 65% de la producciones aseguradas. En una superficie con un rendimiento asegurado de 2.000 kilos por hectárea, el agricultor percibiría indemnización por 1.300 kilos. En las zonas afectadas por la sequía, los agricultores podrían recibir una media entre las 16.000 y más de 20.000 pesetas por hectárea con daños catastróficos.

Según los datos de Agroseguro, esta campaña se habrían asegurado algo más de dos millones de hectáreas en el integral de cereales y las indemnizaciones por este concepto se situarían entre 15.000 y 20.000 millones.

Estas dos medidas son independientes de las ayudas aprobadas recientemente por el gobierno para zonas de sequía.