Los sindicatos españoles temen una invasión de excedentes

Organizaciones agrarias españolas han manifestado su total oposición a un acuerdo en el seno del GATT que suponga una modificación de la Política Agrícola Común. Los sindicatos españoles coinciden en señalar que las limitaciones a las exportaciones afectarían fundamentalmente a Francia (cereales) Alemania, Dinamarca u Holanda, fundamentalmente por la carnes. Sin embargo, la falta de salidas en el exterior para esos productos supondría al final un aumento de excedentes en el conjunto de los mercados comunitarios con efectos negativos fundamentalmente para los países menos competitivos como Espa...

Organizaciones agrarias españolas han manifestado su total oposición a un acuerdo en el seno del GATT que suponga una modificación de la Política Agrícola Común. Los sindicatos españoles coinciden en señalar que las limitaciones a las exportaciones afectarían fundamentalmente a Francia (cereales) Alemania, Dinamarca u Holanda, fundamentalmente por la carnes. Sin embargo, la falta de salidas en el exterior para esos productos supondría al final un aumento de excedentes en el conjunto de los mercados comunitarios con efectos negativos fundamentalmente para los países menos competitivos como España que se verían inundados por esos nuevos excedentes.Según un portavoz de la Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (Asaja), las exigencias estadounidenses para copar un mínimo del 5% de los consumos comunitarios, en el caso de los cereales, suponen la importación de unos siete millones de toneladas. Por otra parte, la limitación en las ayudas a la exportación significaría dejar en el mercado interior, fundamentalmente en Francia, unos 10 millones de toneladas. Ambas medidas supondrían en total un excedente de 17 millones de toneladas que es una cantidad muy superior a la disminución que se prevé con el abandono del 15% de las superficies dedicadas a cultivos herbáceos contemplada por la PAC.

España no es un exportador neto de cereales, excepto cebada. Sin embargo, ese aumento de excedentes en el mercado comunitario supondría una invasión del mercado nacional con esos productos, lo que forzaría una bajada de los precios del mercado interior. Lo mismo ocurriría con el vacuno.