Sergio Ramírez reaviva el 'caso Paz' en los 'Coloquios de invierno'

El escritor y político nicaragüense Sergio Ramírez reactivó en la tarde del viernes por unos minutos la polémica que acompañó la inauguración de los Coloquios de invierno de México al advertir, en alusión a la ausencia de Octavio Paz, que la pluralidad de los debates estaba de sobra manifiesta con la presencia en ellos de Gabriel García Márquez, Fernando del Paso y Carlos Fuentes. El que fue vicepresidente del Gobierno sandinista de Nicaragua, autor también de Confesión de amor, dijo que esta triple presencia no sólo supone pluralidad sino "un honor histórico".Pese a que fueron u...

El escritor y político nicaragüense Sergio Ramírez reactivó en la tarde del viernes por unos minutos la polémica que acompañó la inauguración de los Coloquios de invierno de México al advertir, en alusión a la ausencia de Octavio Paz, que la pluralidad de los debates estaba de sobra manifiesta con la presencia en ellos de Gabriel García Márquez, Fernando del Paso y Carlos Fuentes. El que fue vicepresidente del Gobierno sandinista de Nicaragua, autor también de Confesión de amor, dijo que esta triple presencia no sólo supone pluralidad sino "un honor histórico".Pese a que fueron unos minutos, la sombra del premio Nobel mexicano volvió a planear, al igual que ha ocurrido en otros momentos de los debates, sobre el auditorio Alfonso Caso, como cuando lo citó el escritor Fernando Savater días atrás como "mi maestro" o cuando, el mismo viernes, el escritor venezolano Alejandro Rossi dijo que la presencia de Paz en estos coloquios que se celebran en la Universidad Autónoma de México "no hubiera sobrado".

Los Coloquios de invierno tuvieron el viernes su máximo exponente con en el presidente de la Comisión Nacional para la Cultura y las Artes, Víctor Flores Olea. El que fue rector de la Universidad -Nacional Autónoma de México (UNAM), y en este caso el responsable de la organización de los debates, disertó sobre el tránsito de la cultura desde el espacio de la tradición al de la modernidad, y llegó a la conclusión de que las utopías se han agotado en nuestro tiempo. Para Flores Olea, las utopías están siendo sustituidas por distopías, basadas en pavorosas imágenes de ficción científica y en un futuro que se presenta más como amenaza que como esperanza.