País Vasco y Cataluña ensayan un nuevo modelo pediátrico para medir el desarrollo del niño

A los tres meses coge un objeto; a los seis se sienta; al año anda, y, apenas 12 meses después, dice sus primeras palabras y se muestra ansioso por empezar a vestirse solo. Es decir, comienza a emanciparse. Este proceso, apasionante para los padres, está acompañado de la angustia cuando el desarrollo de los niños presenta problemas. Pero muy pocos progenitores conocen que las tablas con que se mide a los niños son anticuadas y proceden de países con otros valores culturales. Por ello, especialistas vascos y catalanes han desarrollado el programa Haizea Llevant (Viento de Levante).

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A los tres meses coge un objeto; a los seis se sienta; al año anda, y, apenas 12 meses después, dice sus primeras palabras y se muestra ansioso por empezar a vestirse solo. Es decir, comienza a emanciparse. Este proceso, apasionante para los padres, está acompañado de la angustia cuando el desarrollo de los niños presenta problemas. Pero muy pocos progenitores conocen que las tablas con que se mide a los niños son anticuadas y proceden de países con otros valores culturales. Por ello, especialistas vascos y catalanes han desarrollado el programa Haizea Llevant (Viento de Levante).

Con él será más fácil saber si una niña se desabrocha los botones a la edad adecuada o un chaval identifica su sexo con normalidad. El Gobierno vasco podrá a disposición de pediatras, educadores, a partir de octubre, ese nuevo instrumento para detectar anomalías en el desarrollo de los niños. El programa Haizca, elaborado por un grupo de profesionales guipuzcoanos vinculados al mundo de las minusvalías, está enfocado a niños de entre dos y seis años, y será completado con un modelo similar para niños de cero a dos años -el Llevant- que se viene aplicando en Cataluña de manera experimental desde hace dos años."Los padres y madres ya están acostumbrados a llevar a sus hijos al pediatra para medirles y tallarles. Nosotros queremos ampliar esa evaluación tradicional y hacerla integral", señala Joaquín Fuentes, 4psiquiatra infantil de 42 años y Lino de los tres coordinadores de] modelo.

En una primera fase, el programa Haizca Llevant prevé la prevención de anomalías en el desarrollo de los niños a través de los centros de orientación al profesorado (COP) y de las unidades de pediatría de los ambulatorios de la red pública vasca. La inversión para la edición del material -sin incluir los elementos del modelo adaptado para los niños que presentan algún tipo de disfunción- no supera los 25 millones de pesetas.

A juicio de los diseñadores de] nuevo modelo de evaluación, será necesaria una "colaboración fluida" entre el Departamento de Bienestar Social y las Consejerías de Sanidad y Educación del Ejecutivo autónomo. "Creemos que es mejor tardar lo que sea necesario para encajar perfectamente el trabajo entre los tres departamentos, así como con los catalanes", comentó Fuentes.

La propuesta inicial del equipo que ha diseñado el programa es la de habilitar un total de 75 lugares en el País Vasco donde los pediatras y educadores puedan detectar las anomalías en el desarrollo de los niños en materia de socialización, comunicación, y en el sistema lógico matemático y motriz.

De los años cincuenta

"El tema está en estudio, pero nuestra idea es la de comenzar a experimentar con el programa a partir de septiembre u octubre", adelantó el director de Bienestar Social, Patxi López Cabello, departamento que ha impulsado el estudio. La extensión del programa se realizaría "progresivamente", según López Cabello. Previamente, los profesionales participarían en unos cursos de formación para conocer "a la perfección las posibilidades preventivas que tiene el programa", afirma Fuentes.

La idea de adaptar los parámetros que se utilizaban para medir el desarrollo de los niños a la realidad del País Vasco partió hace unos cuatro años de un grupo de profesionales vinculados a las minusvalías. "Era necesario conseguir un modelo válido para chequear el desarrollo de nuestros críos aquí y ahora", comenta el pedagogo lñaki Fernández, de 45 años. Hasta ahora, los pediatras y educadores han utilizado modelos caducos e importados de Francia, Reino Unido y EE UU. En éste último caso el programa fue elaborado en los años cincuenta. Diferentes resultados

Diferentes resultados

"Los resultados de la encuesta realizada entre 838 críos del País Vasco -el 1% de los niños en Euskadi entre dos y cinco años y 11 meses- muestran que hay diferencias con los obtenidos cuando se estudia a los niños según los modelos importados de otros países. Esas diferencias se dan, sobre todo, en el terreno cultural: alimentación, vestido, deporte, autonomía personal. No así en el desarrollo del lenguaje o de la lógica matemática, donde los modelos son practcamente iguales", comenta orgulloso Pere Rueda, psicólogo de 41 años.El logro más destacado, sin embargo, es el de haber sintetizado 40 elementos significativos para la detección precoz de disfunciones. Así nace el denominado Haizea Txiki (viento pequeño), que será el que se utilizará para identificar problemas en el desarrollo de los niños.

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