GUERRA EN ORIENTE PRÓXIMO

Estados Unidos tiende la mano a Irán

El secretario de Estado norteamericano, James Baker, en el primer bosquejo ofrecido por Estados Unidos sobre su visión de] golfo Pérsico tras el fin de la guerra contra el régimen de Bagdad, manifestó ayer que tanto Irak como Irán deberían desempeñar en el futuro "un importante papel" en la región y anunció la disposición de la coalición liderada por Washington a contribuir económicamente a la reconstrucción de¡ país enemigo. "La hora de la reconstrucción y de la recuperación no debe ser la ocasión para vengarse de un país obligado a ir a una guerra por la ambición de un dictador", dijo.
...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El secretario de Estado norteamericano, James Baker, en el primer bosquejo ofrecido por Estados Unidos sobre su visión de] golfo Pérsico tras el fin de la guerra contra el régimen de Bagdad, manifestó ayer que tanto Irak como Irán deberían desempeñar en el futuro "un importante papel" en la región y anunció la disposición de la coalición liderada por Washington a contribuir económicamente a la reconstrucción de¡ país enemigo. "La hora de la reconstrucción y de la recuperación no debe ser la ocasión para vengarse de un país obligado a ir a una guerra por la ambición de un dictador", dijo.

Más información

En una declaración ante el comité de asuntos exteriores de la Cámara de Representantes, Baker repitió la advertencia hecha el lunes por el presidente George Bush a Sadam Husein sobre la utilización de armas químicas y biológicas. "Hemos oído, y nos creemos, las amenazas de Sadam de utilizar armas químicas y biológicas", dijo. "Sadam haría bien en tomarse en serio nuestra advertencia de que no estamos dispuestos a tolerar el uso de esas armas, que tendría las más graves consecuencias", añadió Baker que, como Bush, no especificó qué represalia ordenaría EE UU en tal eventualidad.Para Baker, la seguridad futura en la región del golfo Pérsico debe estar basada "en el respeto a la actual soberanía de todos los Estados ribereños y a la inviolabilidad de sus fronteras". "Los pueblos del Próximo y Medio Oriente necesitan desesperadamente la paz", afirmó el secretario de Estado.

Baker intentó calmar los temores expresados por algunos países, principalmente la URSS e Irán, sobre el papel hegemónico que EE UU podría jugar en la zona tras el fin de la guerra, y repitió las seguridades dadas por Bush de que Washington no mantendría ninguna presencia terrestre en el Golfo tras el fin de las hostilidades, aunque no excluyó una permanencia naval, presente, dijo, desde los tiempos del presidente Harry Truman.

"Esperamos que los Estados regionales y las organizaciones existentes, como el Consejo de Cooperación del Golfo, tomen la iniciativa en la construcción de una red que refuerce los actuales acuerdos de seguridad", dijo. Y añadió que ninguna potencia regional debe ser excluida. "Tanto Irak como Irán pueden y deben jugar un papel importante".

Una de las mayores amenazas a la seguridad futura de la zona proviene de la proliferación de armamentos "tanto convencionales como de destrucción masiva". "Los arsenales convencionales de varios países de la zona son incluso mayores que los de la mayoría de las potencias europeas. Cinco países de Oriente Próximo tienen más carros de combate que el Reino Unido o Francia. Ha llegado la hora de cambiar esta tendencia de competencia y proliferación militar y reducir el flujo de armas a una región militarizada en demasía", manifestó Baker.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Problema palestino

Con relación al problema palestino, Baker admitió que el actual conflicto ha enconado unas relaciones de por sí difíciles, pero reafirmó la disposición de EE UU a seguir buscando una solución. "Hay que reanudar la búsqueda de una paz justa y una reconciliación real entre Israel, los países árabes y los palestinos. Y por reconciliación no me refiero sólo a paz como ausencia de guerra sino a una paz basada en el respeto, la tolerancia y la confianza mutuas", dijo.

Sin embargo, cualquier acuerdo futuro no debe comprometer la seguridad de Israel. "Todo el mundo debe enterarse de que cuando hablamos de nuestro compromiso inamovible con la seguridad de Israel lo decimos en serio", subrayó Baker.

Archivado En