El Gobierno saudí repartirá tres millones de máscaras antigas a 10.000 pesetas
El Gobierno saudí anunció este fin de semana que muy pronto empezará a repartir máscaras antigás entre la población nacional y extranjera. El primer envío, de tres millones de caretas, llegará en los próximos días y serán vendidas a un precio de 350 riales (menos de 10.000 pesetas). El anuncio se ha realizado en el momento de mayor tranquilidad y mejores perspectivas de encontrar una solución pacífica desde que se inició el conflicto del golfo Pérsico y coincide en el tiempo con la llega da a Riad del jefe del Estado Mayor norteamericano, general Colin Powell.
Las autoridades de Arabia ...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
El Gobierno saudí anunció este fin de semana que muy pronto empezará a repartir máscaras antigás entre la población nacional y extranjera. El primer envío, de tres millones de caretas, llegará en los próximos días y serán vendidas a un precio de 350 riales (menos de 10.000 pesetas). El anuncio se ha realizado en el momento de mayor tranquilidad y mejores perspectivas de encontrar una solución pacífica desde que se inició el conflicto del golfo Pérsico y coincide en el tiempo con la llega da a Riad del jefe del Estado Mayor norteamericano, general Colin Powell.
Las autoridades de Arabia Saudí no precisaron el día en que comenzará el reparto de las máscaras antigás, ni su procedencia. El coronel Saoud Al Zuneifer se limitó a comentar a los periodistas que un gran número de máscaras, varios millones, llegará de inmediato al reino para proteger a ciudadanos nacionales y residentes ante una eventual agresión iraquí con armas químicas. Un primer envío de tres millones está a punto de llegar y su reparto se hará de forma inmediata, como medida preventiva. Aunque las amenazas de Irak son pura propaganda".Hasta ahora, los ciudadanos saudíes y los extranjeros residentes podían comprar caretas antigas, con cierta dificultad por su escasez, en establecimientos especializados en material médico a un precio de 650 riales (unas 18.000 pesetas). Estas máscaras eran, en su mayoría, de procedencia alemana y británica.
El plan oficial prevé que todos los residentes en Arabia Saudí, siete millones de saudíes y cinco millones de extranjeros, tengan posibilidad de comprar las máscaras a bajo precio y aquellas personas protegidas por el subsidio social (huérfanos, inválidos) las reciban de forma gratuita.
También este fin de semana, el mando militar norteamericano anunció la llegada a la zona del Golfo de más material bélico especializado en la guerra química. Se trata de los tanques M1A1 Abrams, que hasta ahora estaban estacionados en Europa, dentro del operativo de defensa de la OTAN. Estos carros de combate, que forman parte de los excedentes de armamento en Europa una vez que entre en vigor el nuevo tratado de armas convencionales, sustituirá a los M-1 desplegados en el desierto saudí.
Según un portavoz militar estadounidense de la Oficina de Información Conjunta (JIB), estos tanques están mejor dotados que los actuales ya que tienen mayor ,protección contra armas químicas y su cañón de 120 milímetros posee mayor capacidad bélica que el de 105 milímetros que llevan los M-1.
Con los M1A1 Abrams y los carros británicos Challenger M- 1 (las ratas del desierto que se empezaron a descargar el sábado en el puerto de Jubail, cerca de Dahran), el mando conjunto afirma que tendrá una gran superioridad sobre los 5.500 carros de combate iraquíes. El ejército estadounidense incluye los carros T-72, de fabricación soviética, que ya han sido bautizados con el nombre de Dolly Parton (una cantante de country de Estados Unidos entrada en kilos), por las llamativas defensas que llevan en su parte delantera.
La estrategia aliada de defensa contra a la guerra química incluye asimismo centenares de misiles Patriot desplegados en toda la zona del Golfo. Los Patriot son capaces de interceptar en vuelo los temibles misiles Scud, de fabricación soviética, que podrían haber sido cargados con gases letales por el ejército iraquí.
La IP Brigada de Artillería estadounidense, que se hace llamar los Scuds Busters (cazamisiles), está en alerta las 24 horas del día con sus rádares conectados a los aviones espía Awacs.
Por otra parte, el jefe del Estado Mayor norteamericano, general Colin L. Powell, inició ayer en Yedda una visita de tres días a Arabia Saudí. Posteriormente, viajará a Bruselas y París.