El Reino Unido acepta la convocatoria de la reunión sobre unión monetaria

El Reino Unido "no se opondrá" a la convocatoria de la conferencia intergubernarnental sobre la unión monetaria en la próxima cumbre de Estrasburgo, según fuentes diplornáticas británicas. La presidencia francesa tiene previsto proponer la fecha de octubre de 1990, por lo que será Italia la que presidirá la reunión clave para la comistrucción de la unidad europia. Por otra parte, la comisión presentó ayer al Consejo de Ministros de la CE la propuesta de un "espacio económico europeo dinámico" que implica asociar el mercado único de 1993 a los países de la Asociación Europea de Libre Comercio (...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El Reino Unido "no se opondrá" a la convocatoria de la conferencia intergubernarnental sobre la unión monetaria en la próxima cumbre de Estrasburgo, según fuentes diplornáticas británicas. La presidencia francesa tiene previsto proponer la fecha de octubre de 1990, por lo que será Italia la que presidirá la reunión clave para la comistrucción de la unidad europia. Por otra parte, la comisión presentó ayer al Consejo de Ministros de la CE la propuesta de un "espacio económico europeo dinámico" que implica asociar el mercado único de 1993 a los países de la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA).

La flexibilización de la posción británica responde al desgaste que la primera ministra, Margaret Thatcher, está sufriendo por su actitud poco comunitaria. Fuentes diplomáticas británicas afirmaron que "el Gobierno aprecia que es inútil desgastarse para una convocatoria, como la de la conferencia intergubernamental sobre la unión monetaria, en la que bastará sólo la mayoría". Esta posición ha sido comunicada a representantes de diversos Estados miembros. Pero será en la cenferencia, donde los acuerdos sobre la reforma de los tratados de la Comunidad Europea exigirán la unanimidad, donde el Reino Unido defenderá hasta el final sus criterios.Este cambio de actitud coincide con la posibilidad de que el Reino Unido se sume a la aprobación como declaración solemne de la Carta Social, el otro punto esencial de la cumbre de la CE que se celebrará en Estrasburgo los próximos 8 y 9 de diciembre. Sin embargo, en el caso de la dimensión social el problema decisivo será el. alcance reglamentario del prograrna de desarrollo de la Carta Social elaborado por la Comisión Europea.

El Consejo de Ministros de Asuntos Exteriores de la CE celebrado ayer en Bruselas para preparar la cumbre no entró a analizar los posibles acuerdos en materia de unión monetaria y dimensión social, dejados en manos de la iniciativa de la presidencia francesa.

Los doce se centraron en las relaciones con el Este y realizaron un primer análisis de la propuesta de la Comisión Europea para los países de la EFTA, que será analizada en la conferencia ministerial de las dos organizaciones que se celebrará el 19 de diciembre.

Un nuevo espacio

El objetivo es asociar a estos países en las normas y beneficios del mercado único para crear lo que se ha definido como espacio económico europeo dinámico. El núcleo duro de esa área de libre comercio estará integrado por la CE, pero los miembros de la EFTA (Suecia, Suiza, Austria, Noruega, Finlandia e Islandia, además del Principado de Liechtenstein) no quieren quedarse al margen de la integración económica y comercial que representará el mercado único.

Algunos países del sur de la Comunidad Europea, en especial España, ponen como condición a esa cooperación ampliada la contrapartida de la contribución de estos países en la política comunitaria de cohesión para corregir los desequilibrios regionales que agudizará el mercado único.

Archivado En