Crítica:'JAZZ'

La pareja y los demás

El matrimonio Toshiko Akiyos hi-Lew Tabackin formó su big band en 1972 y desde entonces han mantenido la formación algo que en este y otros tiempos representa una auténtica victoria. Frente a los atriles se sientan músicos del área de Los Ángeles en los que puede reconocer más fácilmente un grado de profesionalidad que una personalidad propia. Toshiko compone, arregla y dirige, y parece saber sacar lo mejor de sus músicos. Pero sus mejores músicos son ella misma y su marido.La big band funciona, las tres filas de vientos saben pasar de los macizos orquestales a la elegante...

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El matrimonio Toshiko Akiyos hi-Lew Tabackin formó su big band en 1972 y desde entonces han mantenido la formación algo que en este y otros tiempos representa una auténtica victoria. Frente a los atriles se sientan músicos del área de Los Ángeles en los que puede reconocer más fácilmente un grado de profesionalidad que una personalidad propia. Toshiko compone, arregla y dirige, y parece saber sacar lo mejor de sus músicos. Pero sus mejores músicos son ella misma y su marido.La big band funciona, las tres filas de vientos saben pasar de los macizos orquestales a la elegante ligereza que supo descubrir Gil Evans, la sucesión de tensiones y climax está sabiamente dirigida y se ejecuta con precisión. Pero su concierto, que superó las dos horas sin bajones de intensidad, tuvo sus mejor momentos cuando Toshiko y Lew se constituían e protagonistas absolutos.

10º Festival de Jazz de Madrid

Toshiko Akiyoshi-Lew Tabackin Big Band. Colegio mayor San Juan Evangelista Madrid, 31 de octubre.

Cuando se es Franz Kafka y se tiene un padre como aquél, se escribe Carta alpadre, de Franz Kakfa. Toshiko Akiyoshi tiene en Bud Powell su padre-maestro y le dedica Remembering Bud Powell, reescritura de la composición de Benny Golson., I remeber Clifford.

En el tema de entrada, Lew Tabackin entregó su primera carta de presentación con un impresionante trabajo en el saxo tenor. Después de ver a Bennie Wallace ponerse de los nervios intentando ser Sonny Rollins a Tabackin muestra un sonido que parece un puro Sonny Rollins que se le hubieran pasado todos los nervios. Luego vuelve a ser solista principal, en otro homenaje, Farewell to Mingus, y arranca en un sonisto que hace pensar en Coleman Hawkins.

En la banda se destacaron el muy parkeriano saxo alto Gerrry Neiwood, Walt Weiskopf, que prestó una inédita -por complementaria- batalla de tenor con Tabackin; y el bateris Terry Clarke, que no parece adecuado en absoluto para la buena pulsación rítmica de la banda.

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