Congelada la negociación sobre el futuro del legado Dalí

La comisión delegada del patronato de la Fundación Gala-Salvador Dalí, creada el pasado 31 de marzo para estudiar el futuro del legado del pintor, no ha iniciado todavía sus trabajos, según han confirmado a este diario varios de sus miembros. El retraso en el inicio de las conversaciones obedece, según las fuentes informantes, al hecho de que el Ministerio de Cultura aún no ha entregado a la comisión el inventario de los bienes legados al Estado por el pintor. El director general de Bellas Artes y Archivos, Jaime Brihuega, afirmó, tras acordarse la constitución del mencionado órgano, que el in...

La comisión delegada del patronato de la Fundación Gala-Salvador Dalí, creada el pasado 31 de marzo para estudiar el futuro del legado del pintor, no ha iniciado todavía sus trabajos, según han confirmado a este diario varios de sus miembros. El retraso en el inicio de las conversaciones obedece, según las fuentes informantes, al hecho de que el Ministerio de Cultura aún no ha entregado a la comisión el inventario de los bienes legados al Estado por el pintor. El director general de Bellas Artes y Archivos, Jaime Brihuega, afirmó, tras acordarse la constitución del mencionado órgano, que el inventario sería "un instrumento utilizable por todos" a mediados de abril.

Constituyen la comisión, además de Brihuega, el conseller de Cultura, Joan Guitart; el alcalde de Figueres, Mariá Lorca, y el pintor e íntimo colaborador de Dalí en los último años, Antoni Pitxot. A estas cuatro personas corresponde, según lo acordado por el patronato de la fundación durante la reunión celebrada el pasado 31 de marzo, elaborar un proyecto de reorganización de la entidad y estudiar el futuro del legado del artista.Las dos cuestiones están íntimamente relacionadas, como subrayó el propio Brihuega al reiterar la voluntad del Gobierno de contar con la fundación a la hora de tomar cualquier decisión sobre el patrimonio del pintor "siempre que se logre el consenso en el diseño del nuevo perfil de la entidad". En otras palabras: el Gobierno compartirá con la fundación las decisiones sobre el legado del pintor en la medida que ésta adapte su estructura -órganos directivos y de gestión- a un modelo aceptado, entre otras instituciones, por la propia Administración central.

Una "pretensión lógica", según fuentes próximas a la fundación, si se tiene en cuenta que es el Gobierno -y no las otras instituciones representadas en la fundación- el que, corno gestor del patrimonio del Estado, fue instituido heredero universal de Dalí. Pero el reconocimiento de este hecho "no debe impedir", señalaron las mismas fuentes, "que fructifiquen las propuestas del alcalde Lorca, quien reivindicó la fundación como heredera espiritual del artista".

Inventario

No parece que existan, a la vista de las declaraciones efectuadas por las distintas partes, grandes obstáculos para lograr él consenso reclamado por Brihuega. Pero la comisión creada para plasmarlo en un acuerdo no ha iniciado todavía sus trabajos, a pesar de que el propio director general señaló que lo haría a mediados de abril, fecha en la que el inventario debía ser "un instrumento utilizable por todos". Brihuega no contestó las demandas de información realizadas en los últimos días por este diario. Fuentes del Departamento de Cultura y del Ayuntamiento de Figueres, por su parte, confirmaron que la comisión no se ha reunido y afirmaron no haber recibido el inventario, elemento base para las negociaciones. Estas fuentes no pudieron precisar, sin embargo, si el retraso en la elaboración o en la entrega de este esperado documento obedece a razones de índole técnica o política.Pese a su deseo de cerrar la negociación cuanto antes, el conseller Guitart no dio excesiva importancia a la demora en el inicio formal de las negociaciones, a la que incluso atribuyó efectos benéficos. Este período de reflexión que parecen estar dándose las distintas partes implicadas es interpretado, en fuentes próximas a la fundación, como un intento por diluir definitivamente las tensiones originadas por el sorpresivo testamento de Dalí.

Como paso previo al inicio de la negociación, Guitart y Brihuego acordaron, con al apoyo de Lorca, la incorporación a la comisión de varios técnicos, entre los que figuran el director general del Patrimonio, Eduard Carbonell y el jefe del servicio de Artes Plásticas, Josep Miquel García, ambos de la Administración autonómica; el director del Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona, Daniel Giralt Miracle; el historiador Félix Fanés; el director del Centro de Arte Reina Sofía, Tomás Llorens; y la conservadora del Museo Español de Arte Contemporáneo, Ana Beristain.

Antoni Pixot, que no ha sido consultado, según manifestó el propio pintor, criticó la composición de la comisión por considerar que la misma no refleja la mayoría de que disponen en la fundación los patronos designados por Dalí. Pitxot aseguró no haber tenido otro contacto con Brihuega que "una amable carta" que le remitió el director general excusando su asistencia a la inauguración de una reciente exposición del pintor en Madrid.