CIENCIA

Implantación experimental de genes inhibidores de tumores para luchar contra el cáncer

Científicos norteamericanos anunciaron ayer que han logrado inhibir el desarrollo de tumores cancerosos en ratones de laboratorio mediante la sustitución de un gen defectuoso. Según un grupo de científicos de la universidad de California, en San Diego, la sustitución de un supresor del cáncer que no funciona por un gen similar activo podría ser una nueva estrategia para la prevención o el tratamiento de distintos tipos de tumores.

"Hasta ahora no se sabía si un simple gen podía inhibir el crecimiento de tumores... y haber podido demostrar que este gen puede hacerlo es maravilloso", ...

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Científicos norteamericanos anunciaron ayer que han logrado inhibir el desarrollo de tumores cancerosos en ratones de laboratorio mediante la sustitución de un gen defectuoso. Según un grupo de científicos de la universidad de California, en San Diego, la sustitución de un supresor del cáncer que no funciona por un gen similar activo podría ser una nueva estrategia para la prevención o el tratamiento de distintos tipos de tumores.

"Hasta ahora no se sabía si un simple gen podía inhibir el crecimiento de tumores... y haber podido demostrar que este gen puede hacerlo es maravilloso", dijo Huei-Jen Su Huang, miembro de este equipo de científicos, que anunciaron su descubrimiento en la publicación especializada Science.Los especialistas trabajaron con el gen llamado RB, cuya ausencia o inactivación se ha vinculado al desarrollo de los casos de retinoblastoma -forma rara de cáncer ocular en los niños-, pero relacionado también con otros tipos de cáncer.

Se cree que la ausencia de genes RB activos juega un papel importante en casi todos los casos de renitoblastoma, la mayoría de los cánceres de pulmón, un 20% de los casos de cáncer de mama y la mitad de los casos de osteosarcoma, un tipo de cáncer de hueso, indicó Wen-Hwa Lee.

Los científicos emplearon técnicas de ingeniería genética para unir un gen humano RB a un virus desarmado de sus efectos nocivos. Esa combinación fue utilizada para insertar el gen RB en células de osteosarcoma carentes de él, las cuales fueron inyectadas a su vez en un tipo de ratón cuyo sistema inmunológico no rechaza las células humanas.

A siete ratones se les inyectó en uno de sus costados células tratadas con RB, y en el otro, células de tumores que llevaban un tipo distinto de gen del que no se creía que pudiese influir sobre la formación del cáncer. Un mes más tarde, los ratones habían desarrollado tumores únicamente en la parte de su cuerpo en la que se había inyectado ese último tipo de células, pero no en el otro.

No está aún claro a través de qué mecanismos actúa la proteína expresada por el gen RB para bloquear el crecimiento de los tumores, afirmó Lee.

Según John Minna, jefe del departamento de Oncología del Instituto del Cáncer de la Armada, se trata de un descubrimiento importante, aunque "el gran interrogante es si alguna vez podrá utilizarse para tratar a pacientes humanos".

Contra el mal de Aizheimer

En el mismo número de la revista Science, otro equipo de científicos demuestra que el trasplante de células alteradas por ingeniería genética puede prevenir la muerta de ciertas neuronas del cerebro y por lo tanto combatir enfermedades como el mal de Akheimer y el Parkinson. La posible terapia se encuentra todavía en fase muy experimental, ya que los trasplantes se han realizado únicamente en ratas y la muerte de estas neuronas no se considera causa única de los desórdenes neurológicos citados.Los experimentos han sido realizados por los equipos de Fred Gage, en San Diego, y David Dranchman en Harvard (Massachusetts).

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