Israel se queda sin argumentos
ENVIADA ESPECIAL Israel se ha quedado sin argumentos para rechazar el diálogo con la OLP. El respaldo internacional recibido por el grupo palestino se ha visto coronado con el inicio de contactos con EE UU. Aun siendo importante, la decisión de Washington resultará, sin embargo, insuficiente si no logra arrastrar tras de sí al futuro Gobierno de Tel Aviv, actualmente en proceso de formación. La futura conferencia de paz requiere la participación de las dos partes en conflicto.
Como ha asegurado con su habitual sentido del humor Yasir Arafat, "en la paz, como en el amor, hacen fal...
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ENVIADA ESPECIAL Israel se ha quedado sin argumentos para rechazar el diálogo con la OLP. El respaldo internacional recibido por el grupo palestino se ha visto coronado con el inicio de contactos con EE UU. Aun siendo importante, la decisión de Washington resultará, sin embargo, insuficiente si no logra arrastrar tras de sí al futuro Gobierno de Tel Aviv, actualmente en proceso de formación. La futura conferencia de paz requiere la participación de las dos partes en conflicto.
Como ha asegurado con su habitual sentido del humor Yasir Arafat, "en la paz, como en el amor, hacen falta dos". En esta ocasión, además, conviene la intervención de una celestina que, una vez convencida de las buenas intenciones del pretendiente, ayude, como en las mejores novelas renacentistas, a ablandar la voluntad del pretendido, un Israel bastante reacio a cualquier requerimiento. El acercamiento norteamericano-palestino ha abierto la puerta que puede desembocar en el ansiado proceso de paz.
La tarea de la diplomacia norteamericana será ahora doble. De un lado, conocer y valorar las propuestas y deseos palestinos; de otro, tratar de convencer a sus aliados israelíes de la necesidad de que emprendan la misma senda. No cabe duda de que, más, tarde o más temprano, tendrán que imitar el modelo que esta semana les ha ofrecido la Administración estadounidense. La cuestión estriba en que cada día que pasa aumenta el coste de su obstinación, en la que coinciden tanto conservadores como laboristas.
Así parece haberlo entendido también la diplomacia soviética, cuya aproximación a Israel no ha conducido hasta el momento al restablecimiento de relaciones debido precisamente al escollo palestino. "El proceso de armonización de nuestras relaciones con Israel se iniciará el mismo día en que comiencen los trabajos de la Conferencia Internacional de Paz sobre Oriente Próxiino", ha manifestado en Ginebra Vladimir Petrovski, viceministro de Exteriores del Kremlin.