Marruecos utiliza más la zanahoria que el garrote en el Sáhara occidental

El Aaiún, la capital del Sáhara occidental, se parece muy poco al que dejaron los españoles en 1975. La Administración marroquí ha triplicado su población y la ha cubierto de escuelas, hospitales, viviendas, comercios, hoteles, calles y plazas. Todo huele a nuevo en una región mimada en los últimos 13 años por la monarquía jerifiana. La prosperidad de E.I. Aaiún y la escasa presencia policial y militar en sus calles evidencian que Marruecos prefiere en el Sáhara la zanahoria al garrote.

En el que fue despacho de los gobernadores militares españoles del Sáhara occidental, Salah Zemrag so...

El Aaiún, la capital del Sáhara occidental, se parece muy poco al que dejaron los españoles en 1975. La Administración marroquí ha triplicado su población y la ha cubierto de escuelas, hospitales, viviendas, comercios, hoteles, calles y plazas. Todo huele a nuevo en una región mimada en los últimos 13 años por la monarquía jerifiana. La prosperidad de E.I. Aaiún y la escasa presencia policial y militar en sus calles evidencian que Marruecos prefiere en el Sáhara la zanahoria al garrote.

En el que fue despacho de los gobernadores militares españoles del Sáhara occidental, Salah Zemrag sorbe su té a la menta. Gobernador civil del reino de Marruecos en la provincia de El Aaiún, se expresa en francés. "Lamento no hablar español", dice, "pero no soy originario de esta región. He nacido más al norte". Y añade: "El padre de Mohamed Abdelaziz, el presidente de esa supuesta RASD, es un militar retirado del Ejército marroquí, que vive en Casba Tadla, una aldea próxima a la mía".El artesonado del despacho es el mismo que contemplaban los generales españoles, pero los retratos del jefe de Estado son otros. Salali Zemrag ha puesto cinco fotos del rey Hassan II, tres de ellas de un tamaño superior al natural. También ha colocado una imagen de la marcha verde, la operación que permitió a Marruecos recibir el Sáhara occidental de una España con mocionada por la muerte de Franco.

Pregunta. Si el plan de paz de la ONU para el Sáhara tiene un final feliz, el próximo año se celebrará aquí un referéndum de autodeterminación. Marruecos y el Polisario han aceptado que el censo español de 1974 sirva de base para la consulta. ¿Cuántos de los 74.000 saharauis censados por los españoles están aquí y cuántos en Tinduf?

Respuesta. La mayoría de ellos está aquí.

P. ¿Cuántos?

R. No puedo decirle la cifra exacta, porque los primeros que tienen que conocer ese tipo de datos son los técnicos que la ONU envíe a supervisar el referéndum. Le aseguro, sin embargo, que son una amplia mayoría.

Lazos de sangre

P. Parece convencido de que casi todos ellos optarán por la integración en Marruecos.R. No tengo ninguna duda de que ése será su voto; y el de un buen porcentaje de los que están en Tinduf. No hay una sola tribu saharaui que no esté también implantada en las regiones de Tarfaya, Tanitam, Agadir, Marraquech e incluso más al norte. Los saharauis tienen lazos de sangre con Marruecos, y a lo largo de la historia han proclamado su fidelidad a nuestros sultanes.

P. ¿Ningún saharui de El Aaiún votará por el Polisario?

R. Algunos puede que lo hagan. Pero fijese: en Gaza y Cisjordania hay soldados israelíes en pie de guerra, y no obstante la población se manifiesta. Aquí no hay ese despliegue, ni tampoco hay manifestaciones. Pregúntese por qué.