Clásico de lo 'jondo'

Serranito ocupa un lugar muy especial entre los grandes concertistas de guitarra flamenca actuales. Serranito es, seguramente, el más clásico de su generación, el que mantiene una mayor fidelidad a la forma de entender el concierto de guitarra flamenca de quienes le precedieron. Quizá por eso su carrera no ha sido tan espectacular como la de algunos de sus compañeros. Esto no quiere decir que Serranito no haya estado también atento a las músicas del mundo en que vive, pero ha sido mucho más respetuoso con las formas flamencas recibidas de sus maestros.Esto es perceptible en cada concierto de V...

Serranito ocupa un lugar muy especial entre los grandes concertistas de guitarra flamenca actuales. Serranito es, seguramente, el más clásico de su generación, el que mantiene una mayor fidelidad a la forma de entender el concierto de guitarra flamenca de quienes le precedieron. Quizá por eso su carrera no ha sido tan espectacular como la de algunos de sus compañeros. Esto no quiere decir que Serranito no haya estado también atento a las músicas del mundo en que vive, pero ha sido mucho más respetuoso con las formas flamencas recibidas de sus maestros.Esto es perceptible en cada concierto de Víctor Monje, Serranito, quien, por cierto, no varía mucho su repertorio, y esto me parece negativo. En Móstoles hizo dos partes claramente diferenciadas. Una en solitario, la más profunda y flamenca, con esos toques libres a los que da grandeza y rigor admirables, como la taranta o la granaína; también por soleares hizo un toque rebosante de jondura, lo mismo que en esa pequeña joya de Los campanilleros. En la segunda parte, con Óscar Luis, excelente guitarrista también, Serranito se dedicó a sus obras más brillantes, de gran tirón para el público.